Alumnos

González Torices afirma que «una escuela sin autoridad no camina a ninguna parte»

El escritor zamorano publica la obra teatral «Las desventuras de un niño acosado» en la que pretende concienciar a la sociedad y en la que se incluye una guía sobre «bullying» dirigida a los padres y docentes

El escritor zamorano y presidente de la asociación «Leer es crear», José González Torices
El escritor zamorano y presidente de la asociación «Leer es crear», José González Toriceslarazon

«Colócate en el pecho medalla o medallón/ y grítales al acoso con muy alta la voz/ que no consentiremos que vayas de matón/ y pegues a los niños así, sin ton ni son./ Y al acoso decimos: ¡Stop, stop, stop!» Éste es un pequeño extracto de la nueva obra teatral del escritor zamorano José González Torices, donde se sumerge de lleno en la problemática del acoso escolar. «Las desventuras de un niño acosado» es su título, que además incluye una práctica guía sobre el «bullyng», elaborada por el doctor Blas Bombín Mínguez, destinada a los padres y docentes. Su presentación será este miércoles en el Salón de Actos de EspañaDuero, en Valladolid, con la asistencia del consejero de Educación, Fernando Rey.

«El acoso no deja de ser una violación de la libertad, una falta de respeto, pero es lo que los jóvenes ven en la sociedad actual, los comportamientos del día a día, y son muchos los aspectos negativos que influyen en ellos», indica el profesor Torices, en declaraciones a LA RAZÓN. El también profesor de la Asociación «Leer es crear», que es la que edita esta publicación, señala que el libro, además de alertar sobre esta lacra que se da en los centros escolares y en su entorno, pretende ser una llamada de atención a la sociedad, establecer una conciencia social para recuperar valores tradicionales que poco a poco se van perdiendo. «Mira, la escuela sin valores ni autoridad no camina a ninguna parte», afirma categóricamente.

Sin generalizar, González Torices, indica que el acoso es un acto continuado, y si no se actúa con prontitud, los escolares pueden llevar una carga durante muchos años de su vida. A los más pequeños se les desestabiliza su mundo afectivo, o puede derivar en algunos casos de suicidio, como ya ha sucedido lamentablemente entre adolescentes. «El reto no es solucionar los problemas de acoso que se detecten, sino que hay que crear una conciencia en los centros escolares de que eso no puede suceder. El chaval debe vivir en paz, sin agobios y se debe dejar trabajar a los profesores para ser escuchados», recalca el autor del libro.

González Torices también alerta que con el paso de los años la autoridad del maestro ha quedado marginada. «En España no se valora de manera positiva al profesor. Aquí se le exige y se va a por él. Y cuando se toma en poca consideración al profesor, deja de ser creíble, y ya se va creando mal ambiente en las aulas. Hay que defender a capa y espada su figura. Que le dejen trabajar en paz, que reciba el apoyo de los padres y el centro y así, estoy seguro, de que habría menos acoso». «El profesor tiene que tener tiempo para educar en valores y enseñar, en provovar el conocimiento a través de la emoción», afirma. También señala que antes el acoso se notaba menos, pero ahora hay otros elementos añadidos, como la llegada de las nuevas tecnologías.

Esta publicación se distribuirá de manera gratuita entre todos los centros educativos que lo consideren y además, tanto González Torices como el doctor Bombín se comprometen a acudir a los colegios que les reclamen para mantener un encuentro para abordar esta lacra social.