Castilla y León

Herrera defiende que se compense el sacrificio de los trabajadores en la crisis

El presidente, partidario de una subida de salarios «consensuada entre sindicatos y empresarios»

Herrera, durante un instante de su cara a cara con el líder socialista, Luis Tudanca, ayer en las Cortes
Herrera, durante un instante de su cara a cara con el líder socialista, Luis Tudanca, ayer en las Corteslarazon

Con un minuto de silencio en recuerdo del que fuera vicepresidente de la Junta, Tomás Villanueva, y de la cooperante segoviana asesinada en Afganistán, Lorena Enebral, arrancaba ayer una nueva sesión plenaria de control al Gobierno popular de Juan Vicente Herrera, con protagonismo para el empleo, los salarios, las pensiones o la situación de los autónomos.

Un pleno en el que el jefe del Ejecutivo regional defendía que se suban los salarios de los trabajadores, especialmente los de aquellos de empresas que se hayan recuperado de la crisis, pero que la subida sea negociada entre sindicatos y empresarios y realista a la situación económica.

«Hay que compensar los sacrificios que han hecho los trabajadores durante la crisis, para que la recuperación económica llegue a todos», contestaba Herrera a la petición «voluntarista» de un pacto de rentas en España que defendía en su réplica el socialista Luis Tudanca para que se suban un entre 2,5 y un 3 por ciento los sueldos y que el salario mínimo sea de al menos 1.000 euros en 2020.

Pese a ello, el presidente aseguraba que, antes que aumentar los salarios, para Castilla y León la prioridad sigue siendo crear empleo y conseguir que los 155.000 parados encuentren un puesto de trabajo. Igualmente, reafirmaba su confianza en los agentes económicos y sociales para que negocien entre ellos e insistía en que de haber una subida salarial ésta debe ser compatible con el mantenimiento o la mejora de la productividad.

Por otra parte, durante el pleno, el líder de Ciudadanos, Luis Fuentes, recordaba a Herrera la «peligrosa tendencia de caída» de autónomos que sufre esta Comunidad, tras perderse 211 trabajadores por cuenta propia en agosto respecto a julio, y le pedía medidas urgentes.

El presidente explicaba en su respuesta que este descenso se debe al «mal año» del campo, ya que el 30 por ciento de los autónomos procede del sector agrario, o a que debido a la recuperación económica al menos 8.000 personas han dejado de ser autónomos para trabajar por cuenta ajena. Si bien, Herrera echaba en cara a Fuentes que pinte un «escenario catastrofista» en el colectivo de los autónomos «que no es tal», y destacaba algunos datos que, en su opinión, revelan un panorama esperanzador en este gremio: por ejemplo, que haya en Castilla y León más de 100.000 autónomos con más de tres años de antigüedad, «lo que demuestra una estabilidad», decía el presidente; o que en los últimos tiempos se hayan afiliado 7.060 nuevos autónomos con menos de seis meses de antigüedad, «algo que, apuntaba Herrera, garantiza el relevo generacional».

Sin mapas rurales no hay plan de convergencia

Durante el cara a cara entre Herrera y Pablo Fernández, sobre la petición del líder de Podemos a la Junta de que ponga en marcha el Plan Plurianual de Covergencia Interior «para reducir desequilibrios entre territorios», el presidente condicionaba éste a que se apruebe en las Cortes los mapas rurales y se complete la Ley de Ordenación del Territorio. Por lo que animaba a Fernández a dar ese paso y respaldar esta última fase de la Ley. Y ante el reproche del podemita a la «falta de voluntad política» para acometer el Plan, Herrera recordaba a Fernández su compromiso firmado de avanzar en la Ley de Ordenación o que también apoyara una enmienda a esta norma en la que se decía que a los seis meses de aprobarse, la Junta debería acometer el Plan de Convergencia.