Barcelona

Animalario egipcio

Una exposición permite conocer la admiración y culto que esta cultura sentía hacia gatos, halcones o cocodrilos

Algunas de las extraordinarias piezas que pueden verse en la muestra en el Museo Egipcio de Barcelona
Algunas de las extraordinarias piezas que pueden verse en la muestra en el Museo Egipcio de Barcelonalarazon

Una nueva manera de acercarnos a la civilización del Antiguo Egipto. Eso es lo que nos propone el Museo Egipcio de Barcelona a partir de un apropuesta novedosa e interesante como es la relación de esta cultura con los animales.

Una nueva manera de acercarnos a la civilización del Antiguo Egipto. Eso es lo que nos propone el Museo Egipcio de Barcelona a partir de un apropuesta novedosa e interesante como es la relación de esta cultura con los animales. Para ello, el centro se sirve de una serie de 70 piezas –propiedad de la colección de la Fundació Arqueològica Clos–, algunas de ellas inéditas que nos ayudan a entender un universo fascinante. Es, de alguna manera, la inmortalidad animal en una muestra que ayuda a ir más allá en el estudio del universo egipcio. Además de su utilización como recurso económico, mascota o presa de caza, los animales estuvieron presentes en numerosas manifestaciones culturales del Egipto faraónico: muchos signos jeroglíficos muestran a animales, ya fueran completos o a través de determinadas partes de sus cuerpos.

La muestra tiene como punto de partida un estudio radiológico realizado a siete momias de animales conservadas en este museo y cuyos resultados se presentan a los visitantes. A este respecto, el presidente de la Fundació Arqueològica Clos, Jordi Clos, apuntó ayer que «las conclusiones a las que permiten llegar las tomografías axiales revelan informaciones sorprendentes sobre diferentes aspectos del bestiario faraónico».

De ese bestiario, resalta en la exposición la presencia del sarcófago y la momia de un halcón, probablemente del año 302 a. C. El animal momificado conserva el esqueleto completo y tiene en perfecto estado su conexión anatómica, según ha constatado la radiografía.

Otro animal sagrado para los egipcios era el gato, con un culto importante a partir de la dinastía XXII. Son numerosos los felinos que incluso se han localizado en necrópolis dedicadas a este animal. La pieza expuesta en Barcelona es un buen ejemplo de ello.

Llamativa es también la máscara de una momia de cocodrilo (715-30 a.C.), un reptil que fue considerado como una de las divinidades principales para los egipcios.

Igualmente interesante es la impresionante cabeza de un babuino, animal sagrado del dios Tot (Dinastía XVIII, 1550-1307 aC), que, según Clos, debió formar parte de una gran figura, probablemente de más de dos metros de altura.

Probablemente uno de los trabajos más llamativos en el museo barcelonés es el sarcófago de un ibis, una pieza de madera, pan de oro y bronce en un inmejorable estado de conservación, y que en su interior conserva la momia del ave. Se cree que podrías fecharse de Baja Época (715-332 a.C.) o en el período Ptolemaico (302-30 a.C.).

La tipología de los objetos expuestos en el Museo Egipcio de Barcelona es muy variada y ofrece desde un capitel de columna hathórica, del período Ptolemaico, a un collar con tres cabezas de cerdo coronadas con el disco solar, del período Kushita (Dinastía XXV, 715-332 aC), además de un sistro –sonajero– de la Dinastía XXVI (reinado de Amasis, 570-526 aC), en el que se aprecia la figura de una leona.

Una mirada inédita a una cultura extraordinaria.

Dónde: Museo Egipcio de Barcelona.

Cuándo: Hasta septiembre.