Abusos a menores

Aumentan a cinco las denuncias por abusos sexuales del profesor del colegio de Sants

Los presuntos abusos del profesor de gimnasia tuvieron lugar en el colegio Maristas Sants-Les Corts de Barcelona. Ayer aparecieron pintadas en el centro
Los presuntos abusos del profesor de gimnasia tuvieron lugar en el colegio Maristas Sants-Les Corts de Barcelona. Ayer aparecieron pintadas en el centrolarazon

El juez, los Mossos d’Esquadra, el Consorcio de Educación y el Síndic de Greuges investigan si hubo, como mínimo, cinco alumnos víctimas de abusos sexuales por parte del profesor Joaquín Benítez, en el colegio Maristas Sants–Les Corts. También se quiere saber si el centro desconocía los graves hechos. El docente ya fue denunciado en 2011 por un hecho similar, aunque todo se ha destapado esta semana.

Fue a través de un padre, que aseguró que su hijo sufrió abusos sexuales por parte del profesor de gimnasia durante dos años. El docente está imputado,informó el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC). Las denuncias de los alumnos que han salido a la luz hasta ahora son bastante explícitas, con relatos de masturbaciones y felaciones.

El padre denunciante explicó que el profesor se llevaba a su hijo a su despacho con la excusa de que tenía mal la espalda, donde abusaba sexualmente de él, mientras entretenía al resto de alumnos con otras actividades. El denunciado no ejerce actualmente de docente en ninguna escuela pública ni concertada, aseguró la conselleria de Enseñanza.

Expulsión «inmediata»

Por su parte, el colegio aseguró que el profesor fue expulsado «inmediatamente» al enterarse de la denuncia, y lo puso en conocimiento de la Fiscalía de Menores en 2011. El centro explicó que en ese año el padre de un alumno les explicó lo que había pasado, el primer caso conocido de abusos por parte del profesor, por lo que se procedió a cesarlo de su trabajo. El ex profesor confesó que sí que abusó sexualmente de los alumnos, y dijo que «lo que hice lo hice por debilidad. Sé que está mal, lo sé. Sólo espero tener la oportunidad de pedir perdón a aquellos chicos».

Añadió que este fin de semana acudirá a declarar ante el juez, «y después tengo previsto desaparecer». Dijo que durante años ha ocultado su condición de homosexual. «Ya sé que no es una excusa, ni un motivo que explique lo que pasó, pero fui educado en el catolicismo más estricto, interno durante más de 16 años en el colegio con otros chicos, con los que tuve los primeros contactos». Ahora, se ha vuelto mormón.

Después de la nueva denuncia, acaecida esta semana, todo se centra ahora en saber el número de alumnos víctimas de los presuntos abusos. Pueden ser bastantes más de cinco. Los Mossos ya localizaron a estos alumnos, cuyas declaraciones están en manos del juez instructor de la causa. No obstante, el padre denunciante de esta semana tiene quejas.

Concretamente, ayer dijo que no recibió ningún apoyo por parte del colegio, y aseguró que le dijeron que «no podemos hacer nada, que si quería alguna cosa, que la denunciara, tienen un protocolo que, cuando hay una denuncia de este tipo lo tienen que notificar a la conselleria de Enseñanza. Yo fui al departamento, presento una reclamación y los inspectores se sorprendieron porque dijeron que no tienen absolutamente nada de este colegio, ni de 2011, 2012 ni 2013».

Añadió que los abusos duraron dos años, casi desde del primer día del alumno en la escuela. Al parecer, el chico escondió estas prácticas diciendo a sus padres que su tristeza y malestar se debían a un acoso escolar, y que llegó a falsificar la firma de sus progenitores para evitar la clase de gimnasia. Diversas personas relacionadas con el colegio, en total trece, se pusieron en contacto con el correo electrónico facilitado por el padre.