Educación

Cazan a 44 familias que falsearon la inscripción escolar

Barcelona desestima el 11% de peticiones por enfermedad digestiva que da 10 puntos

La búsqueda del colegio y el aula adecuada para los hijos lleva a los padres a buscar atajos en la inscripción
La búsqueda del colegio y el aula adecuada para los hijos lleva a los padres a buscar atajos en la inscripciónlarazon

Barcelona desestima el 11% de peticiones por enfermedad digestiva que da 10 puntos.

El cúmulo de denuncias de padres que se han quedado sin plaza para escolarizar a sus hijos en el colegio que habían elegido, como los de la plataforma «Famílies Sense Places», ha conseguido que el año que viene dolencias como la celiaquía u otras intolerancias alimentarias ya no sumen puntos para acceder a un centro escolar. Se hacían muchas trampas y hoy en día, cualquier comedor puede adaptar su menú. Prueba de ello es que el Consorcio de la Educación de Barcelona ha desestimado hasta un 11 % de las 400 solicitudes de preinscripción para el 2017-18 que habían alegado enfermedad digestiva crónica porque no cumplían los requisitos.

La gerente del Consorcio de Educación de Barcelona, Mercè Massa, explicó ayer en el balance de la preinscripción del curso escolar en Barcelona que se ha hecho «un control riguroso de los supuestos en los que las familias han alegado enfermedades digestivas crónicas de un hijo» para garantizar el equilibrio en la matriculación y combatir la segregación.

Los casos desestimados «no cumplían con los requisitos de concretar la enfermedad, ni se especificaba si era crónica», dijo. El Consorcio también recibió tres casos de denuncia por falso empadronamiento, que «aún están pendientes de resolución».

En P3, el 91,5 % de las familias ha obtenido plaza en los centros demandados en primera opción, mientras que en primero de ESO la cifra ha llegado al 87,6 %. Sólo el 0,6 % del total de la preinscripción ha sido asignado de oficio. Para adaptarse a nuevos métodos pedagógicos, se ha creado un fondo cooperativo de mobiliario escolar.

Las familias que reconocen que cobran renta mínima,¡ se ha triplicado este años. Y la elección de centro público o concertado se equilibra.