Política

Cuatro dirigentes del PDeCAT abandonan por incompatibilidades

Pascal considera que la decisión responde a que «han estado pendientes de las familias» .

Marta Pascal reconoce que el congreso fundacional destapó «las sensibilidades diversas» del PDeCAT.
Marta Pascal reconoce que el congreso fundacional destapó «las sensibilidades diversas» del PDeCAT.larazon

Pascal considera que la decisión responde a que «han estado pendientes de las familias» .

El PDeCAT volvió a dar muestras ayer de su desconcierto. En esta ocasión se produjo por un problema interno que ha desembocado en la renuncia de cuatro miembros de los doce –es decir, un tercio– que componen la dirección ejecutiva del partido al sucumbir a las presiones de algunas «capillitas o familietas» por incumplir con el régimen de incompatibilidades. El estatuto de la formación no permite que los dirigentes puedan ejercer más de dos cargos, orgánicos o institucionales.

De esta forma, los neoconvergentes se vuelven a ver envueltos en otro embrollo justo medio año después del congreso fundacional de julio. Todo ello en un momento en el que la formación contempla su desplome en todas las encuestas, está huérfana de liderazgos –tras el «no» de Puigdemont– y se ha quedado sin rumbo ideológico, engullida por el proceso independentista.

Los cuatro miembros de la dirección que abandonarán son el diputado y alcalde de Valls (Tarragona), Albert Batet; el diputado y alcalde de Besalú (Girona), Lluís Guinó; la diputada y alcaldesa de Calella (Barcelona), Monserrat Candini, y la directora de Cooperación Interdepartamental del Govern, Elsa Artadi –las incompatibilidades establecen que una directora general no puede tener cargo en la dirección–.

La coordinadora del partido, Marta Pascal, defendió que se incorporaron a la dirección a sabiendas de que incumplían el régimen de incompatibilidades porque «eran perfectamente votables». Pascal, más bien, puso el foco en las diferencias internas: «La decisión de algunos responde a que han tenido que estar más pendientes de algunas capillitas y familietas». Y continuó, reconociendo que «el congreso destapó muchas sensibilidades diversas, y ahora hemos querido recoser». La líder neoconvergente trató de zanjar la controversia y aseguró que es una decisión tomada «en coherencia» con lo que han defendido: «Los Estatutos marcan este camino». Todo ello ocurre justo una semana después de que el PDeCAT acabara de completar toda su estructura con la elección de la Comisión económica y la Comisión de la calidad democrática, y cuando el partido ha empezado a centrarse en su despliegue territorial y rearme ideológico, con una conferencia final en primavera. La formación ha puesto en marcha ya una ronda de presentación territorial.

Pascal no detalló cómo revertirán esta circunstancia, ya que este sábado 28 de enero llevarán a cabo el segundo Consell Nacional, y será donde expliquen el procedimiento para escoger los sustitutos. Justo el mismo día en que la CUP decidirá si aprueba los presupuestos, de los que dependen la supervivencia del Govern. Y a ello hizo referencia Pascal, que insistió en la negativa a aumentar la fiscalidad y posponer este debate para cuando haya sido creado un Estado catalán.

«No debe gravarse más. Hay que pasar a una nueva fase. Cuando tengamos un Estado independiente, ya decidiremos el modelo de fiscalidad que queremos. Es caer ahora en una trampa».