El 80 por ciento de los catalanes desayuna mal y en solitario

El 12 % de los niños no desayuna, sólo un 23 % come fruta y el 21 % bollería industrial.

«Desayuna como un rey, come como un príncipe y cena como un mendigo», dice el refrán. Y Don Quijote también decía a Sancho Panza que «comiera poco y cenara más poco» porque «matan más cenas que guerras». La sabiduría popular está llena de buenos consejos... que los catalanes desoyen. Aunque más del 40 por ciento cree que el desayuno es la comida más importante del día, sólo dos de cada diez desayuna de forma equilibrada.

Y ¿qué es un desayuno equilibrado? Los expertos recomiendan incluir en la primera comida del día una pieza integral del grupo de los cereales (pan o cereales con poco azúcar), fruta (fresca, seca o en zumo) y un lácteo, preferiblemente bajo en grasa. Tampoco ven mal incluir huevos, hortalizas, pescado, aceite y frutos secos.

Pero la realidad, según pone de manifiesto el «Estudio de Lidl: 5 al día sobre los Hábitos del Desayuno en Cataluña», es que el 80 por ciento de los catalanes no toma un desayuno equilibrado y saludable, sobre todo, los jóvenes entre 18 y 24 años. A partir de los 45 años, que la gente toma más conciencia de que «somos lo que comemos», el porcentaje de personas que desayuna de forma más saludable crece.

La mayoría no toma fruta (75 por ciento) y sólo un 7 por ciento incluye hortalizas en su desayuno. Los niños hacen lo que ven en casa, ocho de cada diez no toman fruta, un 21 por ciento come bollería industrial, aunque lo más preocupante es que un 12 por ciento no desayuna. La mayoría toma cereales con leche, yogures, quesos enteros o pan.

La mitad de los adultos se salta el desayuno al menos una vez por semana, aunque la mayoría, un 85 por ciento come en casa y sólo un 15 por ciento opta por ir al bar o a la cafetería. Pese a desayunar en casa, la mitad lo hace solo y cuatro de cada diez aprovecha para mirar el móvil o la televisión, sobre todo, los jóvenes. Durante la semana, el 45 por ciento le dedica menos de 10 minutos, un tiempo que los expertos consideran insuficiente para poder realizar un desayuno «completo y equilibrado». El 22 por ciento apenas toma un café o un vaso con leche.

Nostalgia de comer en familia

El 73 por ciento lamenta que ahora dedica menos tiempo a la familia que antes, sólo uno de cada cuatro come con ella entre semana, aunque el fin de semana, a la hora del almuerzo y de cenar más de la mitad recupera este hábito de sentarse juntos en la mesa.

En Cataluña, los alimentos que más se consumen en la primera comida del día son infusiones, ya sea en forma de café o té, lácteos bajos en grasa, pan, aceite de oliva y zumos naturales.

Para concienciar sobre los beneficios de empezar el día con un desayuno sano y equilibrado, la cadena de supermercados Lidel, en colaboración con «5 al día», que defiende la ingesta de cinco piezas de fruta u hortalizas al día, ha lanzado una campaña itinerante que arrancó en Barcelona y recorrerá más de 80 ciudades de España.