Cataluña

El Govern descarta una cumbre para un referéndum unilateral

La CUP exige en balde una reunión para impulsar el derecho de autodeterminación en un año

Los diputados de la CUP Anna Gabriel y Benet Salellas protagonizaron ayer una rueda de prensa de la CUP en la plaza del Rei de Barcelona
Los diputados de la CUP Anna Gabriel y Benet Salellas protagonizaron ayer una rueda de prensa de la CUP en la plaza del Rei de Barcelonalarazon

La CUP exige en balde una reunión para impulsar el derecho de autodeterminación en un año.

La relación entre el Govern de Junts pel Sí y la CUP se rompió tras el veto de los anticapitalistas a los presupuestos y no se recompondrá a través de un pacto para impulsar un referéndum unilateral de independencia (RUI). La mayoría soberanista que existe en el Parlament, por tanto, continúa siendo inoperativa y la cuestión de confianza a la que se someterá el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, el próximo septiembre sigue en el aire.

La CUP ofreció ayer una rueda de prensa para reclamar a Puigdemont que convoque una cumbre en el Palau de la Generalitat con el objetivo de promover un RUI, ya que, a su entender, es la manera de recomponer la hoja de ruta soberanista. Pero el Govern descartó de inmediato someterse a esta exigencia. «No está prevista ninguna cumbre. La CUP no está en condiciones de pedir nada a quien le ha retirado el apoyo para poder gobernar con un presupuesto tras incumplir el pacto firmado», explicaron fuentes de la Generalitat, descartando de esta manera volver a pasar por el aro de los anticapitalistas.

La CUP formalizó ayer esta propuesta después de varias semanas dándole vuelo y después de obtener el beneplácito de ERC durante la campaña electoral. La lectura de la formación anticapitalista es que las elecciones generales del pasado 26-J han cerrado la puerta a la celebración de un referéndum de autodeterminación en Cataluña, ya que Unidos Podemos ha quedado muy lejos de las expectativas creadas por los sondeos.

«El cambio en el Estado español, desgraciadamente, no ha sido posible», subrayó la diputada de la CUP Anna Gabriel. Hecha esta conclusión, Gabriel reclamó a Puigdemont que cite a todas las formaciones partidarias del derecho a decicir (Junts pel Sí, Catalunya Sí que es Pot e incluso al PSC) para acordar la convocatoria de un referéndum unilateral antes de junio de 2017, es decir, en el plazo de un año. «Queremos hacer evidente que la demanda de un referéndum no sólo pertenece a los independentistas sino que también es patrimonia de otras fuerzas políticas», añadió Anna Gabriel.

Preguntado por la influencia que puede tener este RUI sobre la cuestión de confianza, la CUP se limitó a decir que un acuerdo sobre el referéndum «facilitará» la aprobación de la cuestión de confianza. «La cuestión de confianza es central y la resolveremos en las próximas semanas y meses, pero en la semana después del 26-J hay que llegar a acuerdos sobre cómo ejerceremos el derecho de autodeterminación, que es el objetivo de esta legislatura», explicó el diputado Benet Salellas.