Cataluña

El Govern y la CUP acercan posturas en los presupuestos pero no logran cerrarlos

Consiguen avances en materia de educación y en renta mínima, pero permanecen encallados en la negociación de la subida fiscal que reclaman los anticapitalistas

Junqueras lidera las negociaciones del Govern con la CUP
Junqueras lidera las negociaciones del Govern con la CUPlarazon

Consiguen avances en materia de educación y en renta mínima, pero permanecen encallados en la negociación de la subida fiscal que reclaman los anticapitalistas.

El Govern y la CUP han asumido que la negociación de los presupuestos de 2017 sólo puede culminar con éxito con un pacto sobre la bocina. Apenas falta una semana para que el consejo político de la CUP decida si aprueba o rechaza el proyecto presupuestario, pero los negociadores de la formación antisistema (los diputados Benet Salellas y Eulàlia Reguant) no han dado su visto bueno a la propuesta del Govern. Ambos continúan inmersos en unas conversaciones que, si bien avanzan en algunos aspectos, todavía están lejos de la fumata blanca.

Los contactos mantenidos ayer permitieron aproximar posturas en dos de los tres puntos de conflicto, esto es en el capítulo de educación y en la partida destinada a financiar la renta mínima. Ninguno de estos asuntos amenaza con hacer descarrilar el acuerdo final. En cambio, las conversaciones en torno a la subida fiscal que propugna la CUP permanecen encalladas.

Presión fiscal

Los antisistema reclaman incrementar la presión sobre el IRPF, Sucesiones y Patrimonio para obtener más recursos del «4 por ciento» de la población que más riqueza acumula. Pero el Govern permanece cerrado en banda en este punto, ya que se ha marcado como línea roja no acometer una nueva subida de impuestos tras los continuos incrementos de los últimos años de crisis.

Los negociadores de la CUP insistían ayer en que nadie del Govern les ha comunicado formalmente su rotunda negativa a abordar estas subidas. Los antisistema estarían abiertos al acuerdo en materia fiscal siempre y cuando se produjera algún gesto por parte del Govern y contemplan con cierta incredulidad el quietismo de los hombres de Oriol Junqueras, máximo responsable de la negociación por parte de la Generalitat.

La consellera de la Presidencia, Neus Munté, de hecho, emplazó a la CUP a aparcar el debate sobre el modelo fiscal hasta que Cataluña se convierta en un Estado independiente. «No nos engañemos, este problema de capacidad fiscal sólo lo resolveremos si tenemos todas las herramientas de un Estado. A partir de aquí, los modelos fiscales de cada formación política son defendibles y absolutamente legítimos y los tendremos que confrontar y llegar a acuerdos en este futuro espero que no muy lejano», dijo Munté en Ràdio 4.

Munté recordó que en el inicio de la negociación presupuestaria con la CUP, cuando los anticapitalistas accedieron a facilitar la admisión a trámite de las cuentas en el Parlament, ya se exploraron «todos los márgenes posibles» en fiscalidad, con nuevas «figuras impositivas en diferentes ámbitos». Por tanto, según la consellera, sólo hay «margen de negociación» en materia de educación y de renta garantizada de ciudadanía, dos aspectos que «son una prioridad para el Govern».

El tiempo para la negociación se agota la semana que viene.