Abusos a menores

El padre que denunció a Benítez ataca a los Maristas por «encubrimiento»

Asegura que hay muchas quejas por los abusos sexuales del ex docente y que no se tomaron las «medidas oportunas», aunque entiende la libertad con cargos del pederasta confeso porque «no cumple los requisitos para ser encarcelado»

El acusado de abusos sexuales quedó en libertad con cargos tras declarar ante el juez
El acusado de abusos sexuales quedó en libertad con cargos tras declarar ante el juezlarazon

Joaquín Benítez, el ex profesor de gimnasia del colegio Maristas Sants–Les Corts que ha confesado casos de pederastia, fue puesto el sábado en libertad condicional con medidas cautelares, pero este hecho no ha minado lo más mínimo la moral padre denunciante, Manuel, que encubre el apellido para proteger la identidad de su hijo y de la familia. Acusa al centro de encubrir los escándalos y su intención es interponer una denuncia.

Manuel fue el primer padre que denunció públicamente al ex profesor Joaquín Benítez, y ayer explicó que pedirá a su abogado que traslade al juez esta línea de investigación. Insistió en que le constan denuncias previas por abusos sexuales cometidos por Benítez, sin que, a su juicio, se hayan tomado las medidas oportunas.

Seis denuncias

«Pediremos al juez que investigue esta línea de un posible encubrimiento, porque aparecen informaciones de personas que se empiezan a arrepentir de haber visto la situación y no haberlo denunciado», señaló. Hasta el momento, existen seis denuncias confirmadas ante los Mossos d’Esquadra, aunque el padre aseguró que ha recibido en el mail que ha creado para estos hechos más de una veintena de quejas.

De momento, Benítez quedó en libertad con cargos, pero con medidas cautelares, como la prohibición de salir del territorio nacional, la retirada del pasaporte, comparecencias semanales en comisaría, y también el veto para realizar actividades culturales, educativas, recreativas o de cualquier otro tipo, donde haya menores.

El ex profesor admitió públicamente esta semana los hechos. Reconoció que cometió abusos sexuales, que es homosexual, y que lo hizo todo por «debilidad». «Pensaba que vendrían antes a por mí», reconoció, en referencia a que fue expulsado del colegio en 2011, cuando ya hubo una denuncia por abusos.

Mientras el padre dice que en el mail que creó ya ha recibido muchos relatos y quejas similares. El auto emitido el sábado por el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) no deja lugar a dudas. Las denuncias son explícitas, y en ellas se habla de masajes, masturbaciones y felaciones, hechos reconocidos por Benítez. Está por ver lo que puede ocurrir a partir de ahora. Benítez no solo trabajó en el colegio de Maristas, sino que ejerció de monitor de diversas actividades físicas en centros de Castelldefels, Cornellà y Viladecans, por lo que puede el número de denuncias puede ir en aumento..

Manuel confesó que no puede perdonar al ex profesor por el «daño irreparable» que ocasionó a su hijo y a su familia, y que se trata de una persona que le provoca «temor y rabia».

El padre del alumno quiso animar a otras posibles víctimas a denunciar, porque cuando lo hacen «se quitan una losa de encima», y agregó que su hijo le dijo que se siente «orgulloso» de él. Ante el hecho de que el juez decretara libertad con cargos para el ex profesor, Manuel reconoció que esta decisión le provocó «bastante enfado» pero entendió que no se dan los requisitos.

El Govern revisará el protocolo

El president de la Generalitat, Carles Puigdemont, aseguró ayer que el Govern está siguiendo «muy de cerca» el caso de presuntos abusos sexuales del ex profesor de gimnasia del colegio Maristas Les Corts (arriba en la imagen), y que en caso de detectar algún error se revisará el protocolo. Puigdemont dijo que «el Govern está siguiendo muy de cerca el caso y los consellers afectados están trabajando en ello intensamente». «Si fuera el caso de que hubiera habido un error de protocolo revisaremos lo que sea necesario, pero todavía es prematuro para sacar esta conclusión», manifestó. No fue la única opinión crítica desde la Generalitat. El conseller de Justicia, Carles Mundó, dijo que el centro «tendría que haber actuado de forma diferente» sí tenía conocimiento de las malas conductas del ex profesor de gimnasia.