Cataluña

El PSC amaga con romper con Colau si se salta la ley con el referéndum

Iceta augura un simulacro de votación soberanista «con cajas y con algún papelito»

Iceta, en una imagen de archivo, colocó ayer en el alambre la coalición de gobierno que el PSC mantiene con BComú en el Ayuntamiento de Barcelona
Iceta, en una imagen de archivo, colocó ayer en el alambre la coalición de gobierno que el PSC mantiene con BComú en el Ayuntamiento de Barcelonalarazon

Iceta augura un simulacro de votación soberanista «con cajas y con algún papelito».

La capacidad destructiva del proceso soberanista está más que demostrada. Buena parte de los partidos políticos catalanes han sufrido sus consecuencias, sea con pérdidas de miles de electores, con escisiones e incluso con la desaparición. Los efectos devastadores han alcanzado también a dirigentes y en breve podrían doblegar a coaliciones de gobierno como la que el PSC mantiene con Barcelona en Comú en el Ayuntamiento de la capital catalana.

Así lo dio a entender ayer el primer secretario de los socialistas catalanes: «No podremos colaborar con un gobierno que se salte la ley, ni en Barcelona ni en ninguna parte, aunque creo que eso no se producirá», dijo en declaraciones a Rac 1.

La advertencia de Iceta se produce cuando faltan poco más de dos meses para la presunta celebración del referéndum de autodeterminación de Cataluña. Los partidos soberanistas –ERC, PDeCAT y CUP– han ido incrementando la presión sobre la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, en los últimos tiempos y el PSC ha llegado a la conclusión de que es el momento de entrar en la partida y jugar sus bazas.

Hasta ahora, BComú y PSC han conducido sus diferencias con el mayor disimulo posible. No han podido evitar alguna división como la producida hace pocas semanas en el pleno del Ayuntamiento a raíz de una moción presentada por el PP para «no apoyar ni proporcionar medios ni personal municipal el 1 de octubre en relación al referéndum», pero han intentado pasar de puntillas por el asunto.

El papel de Collboni

Esta actitud personalizada por el segundo teniente de alcalde del Ayuntamiento, Jaume Collboni, ha generado malestar en sectores del PSC, que no comparten la estrategia de su líder municipal porque es muy poca combativa con las ambigüedades de la alcaldesa. Iceta, en todo caso, evitó desautorizarlo y, preguntado directamente la posibilidad de abandonar el gobierno de Barcelona, respondió: «Esto lo debe decir el presidente de nuestro grupo municipal, Jaume Collboni, pero, para la tranquilidad de todos, nosotros en gobiernos que se saltan las leyes no participamos».

Iceta sí que quiso enviar un mensaje a los cuadros locales de su partido y dijo que a ningún cargo electo «le recomendaría que se saltase la ley» porque «incurriría en unas responsabilidades penales que creo que nos hemos de ahorrar». Finalmente, sobre lo que ocurrirá el 1-O, auguró «un simulacro de votación es muy posible que se haga con lugares de votación, cajas y algún papelito», pero en cualquier caso no será «un referéndum efectivo».