Economía

Josep Tejedo: «Las grandes superficies son nuestros adversarios»

Mercabarna cumple 50 años mientras abastece a más de diez millones de personas

Josep Tejedo
Josep Tejedolarazon

El director general del Mercabarna hace un repaso a los 50 años del "mercado de los mercados"y analiza el presente y futuro de la institución.

-Mercabarna ha cumplido 50 años, ¿Qué tal va de salud?

-Como las personas, tiene salud exterior e interior y ambas muy buenas. Hemos hecho un programa de renovación de todos los mercados. No solo los tejados, sino también las medidas antiincendios, sistemas eléctricos, sistemas de reutilazo agua, etcétera. Es decir, homologarlos a los edificios de nueva construcción. Hemos cambiado, en definitiva, toda la piel. Respecto al alma, la salud del mercado, intentamos que los empresarios, después de la crisis, consideren que las sinergias en Mercabarna son suficientemente buenas. De hecho, gracias al esfuerzo de todos, la facturación se ha mantenido en estos últimos diez años. Actualmente tenemos 7.500 empleos y seguimos creciendo. Un mercado es venta, al fin y al cabo. Y el estilo de distribución del país es de mercado mediterráneo. “El sábado vamos a la plaza”, se decía antes. Y esta idiosincrasia se mantiene gracias a los mercados. Hay que competir con las grandes superficies y eso no es fácil. Nosotros no ofrecemos cremas faciales a dos euros. Hemos conseguido que esta “plaza” funcione y además incrementar las exportaciones. Todo esto fue posible centralizando todos los mercados de Barcelona en un solo mercado.

-Mercabarna fue pionero en España.

-Sin duda, de ahí que ya llevemos cincuenta años. Había otras iniciativas estatales, pero los primeros en llevarlo a cabo fuimos nosotros. Además, no hay otra ciudad en Europa que tenga 43 mercados en la ciudad y 160 en el área metropolitana. Aunque es una adaptación constante. Ahora, por ejemplo, los ultramarinos han sido sustituidos por los supermercados de pakistaníes. Según los datos de nuestro observatorio, el 56% de las tiendas de calle de alimentos son de emigrantes. Que también empiezan a cambiar su firma de comprar. Antes venían a última hora para conseguir a mejores precios pero cada vez compran mejor. En cualquier caso, Mercabarna es el mayor mercado de Europa en toneladas de fruta y verdura fresca. Los hay más grandes, ojo, pero no en frutas y verduras.

-¿Qué recorrido hace, por ejemplo, una alcachofa de El Prat?

-Tiene varios. Mercabarna tiene unos espacios que los payeses de proximidad, una cincuentena, alquilan para vender sus productos. En otro pabellón tenemos las cooperativas. En tercer lugar, mayoristas que además son productores también venden aquí. Y por último, cuando la alcachofa no tiene un productor directo, los mayoristas la compran para venderla.

-¿Y después a los mercados Barcelona?

-Depende, empieza a diversificarse en función de cómo te organices o cuánto quieras vender. Es decir, en función de si vendes a una parada de un mercado, a cinco paradas, a diez mercados o exportas. Aquí no viene a comprar grandes superficies. De hecho, son nuestros adversarios. Este modelo de mercados evita, por ejemplo, que, como en Alemania, el 87% de los alimentos provenga de grandes distribuciones. Mercabarna sirve de paraguas.

-Sorprende que Mercabarna pueda competir en mercados como el francés o el italiano que también comercializan el mismo género.

-El otro día estuvieron aquí los encargados de mercados de Milán. Y les hicimos esa pregunta. Sencillo, en el sur de Italia pueden comprar determinados productos, también importar lo necesario de Grecia, o ir a Almería a comprar pimientos tempraneros. Pero no lo tienes todo a la vez. Si lo que necesitas es un camión de naranjas, vete a Castellón, no lo dudes. Pero si necesitas una parte de mandarinas, otra de alcachofas y otra de manzanas, Mercabarna es el lugar. Por separado nunca lo encontrarás tan barato. Y así, el 60% de la fruta de Cerdeña llega de Mercabarna, por ejemplo.

-¿Si el modelo exportador funciona tan bien puede resentirse el comprador local?

-Tenemos que compaginar el que aquí no producimos todo lo que gastamos con educar a la gente a comer la fruta de temporada. Porque sino hay que importarlo del hemisferio contrario. Pero, claro, si las grandes superficies traen uvas fuera de temporada, el cliente irá y le comprará las uvas, las manzanas y todo lo que sea. Por eso son nuestros adversarios. No sería deseable, sin embargo, que la importación deje de ser un recurso para sustituir al modelo. Pero no es fácil con la globalización de fondo. Las cooperativas de Lleida exportan más del 70 por ciento. Podría suceder que nosotros tengamos que importar nectarinas porque los payeses la han exportado. ¿Quién le pone el cascabel al gato?

-Mercabarna parece una ciudad...

- Es impresionante. Abastecemos a 10 millones de personas. Sólo en el mercado se hacen 72.000 toneladas de pescado. De fruta, un millón de toneladas. Hay 24 restaurantes, casa de apuestas, peluquería, guardería, hotel, tres gasolineras, talleres de reparación, vienen cada día 24.000 personas en 14.000 vehículos.

-De algún modo, ejercéis de notarios de la alimentación, ¿está mejorando?

-En cuanto a variedad, seguro. Tenemos cosas que no sabemos ni cómo se llaman. Pero también en la adaptabilidad. Hay frutas y verduras que se comercializan por los emigrantes. La casquería, por ejemplo, había pasado a mejor vida y ahora vuelve a ser muy demandada. Respecto a los hábitos, sin duda han mejorado. La gente se ha sensibilizado mucho pero aún falta camino, de la sensibilización a la compra. Es decir, el ecológico, pese a todo, apenas representa el 1,2% de venta. Pero sí ha cambiado. Antes se hacía una gran compra en el hipermercado de turno. Ahora la gente prefiere ir más veces a comprar y comprar poca cosa, por lo que se tira mucho menos.