Literatura

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La poeta que se perdió en su propio misterio

Marcel Riera traduce 218 poemas de Emily Dickinson en su mayor antología catalana.

La solitaria poeta ha marcado la lírica norteamericana como Walt Whitman, Poe o Emerson
La solitaria poeta ha marcado la lírica norteamericana como Walt Whitman, Poe o Emersonlarazon

Marcel Riera traduce 218 poemas de Emily Dickinson en su mayor antología catalana.

¿Quién era Emily Dickinson? ¿Importa? Una mujer vestida de blanco, que se negaba a tener contacto directo con sus semejantes, que le giraba la cara a los invitados que llegaban a la casa de sus padres, que hizo de su habitación su cárcel y castillo hasta negarse a salir de allí, que tenía escasos estudios, que sólo leía a los metafísicos ingleses y a los románticos, que su vía de comunicación se limitaba básicamente a la correspondencia, que estaba fascinada por las flores y la astronomía...

¿Quién era Emily Dickinson? ¿Importa? No, no lo hace. Lo único que importa es que es una de las mayores poetas del siglo XIX y ahí no hay espacio para la anécdota. Sólo cuentan sus poemas. El misterio de esta mujer es cómo es posible que una persona así escribiera con semejante brillo. Reafirma así una verdad que a veces se cuestiona, que la vida sólo es una anécdota irrelevante y que la poesía es todo lo demás.

La editorial Proa publica ahora «Aquesta és la meva carta al món», la mayor antología de la autora en catalán, en una edición bilingüe que incluye 218 poemas del corpus total de la obra de Dickinson que llega a los 1.890 poemas. Marcel Riera se ha encargado de la selección y la traducción en un titántico esfuerzo que le ha llevado un año y medio. «Todas las noches las dedicaba a traducir a Emily. He necesitado sumergirme por completo es su particular universo para poder sentir el mismo temblor que producen sus poemas. Eso es lo que he intentado trasladar en la traducción, no tanto la rima o el significado literal, sino más bien ese temor y temblor que despierta», dice Riera, enamorado de esta misteriosa mujer que acabó por perderse en su propio misterio.

Imposible obra completa

La selección ha respetado la treintena de poemas míticos de la autora, considerada por Harold Bllom como la mayor poeta de todos los tiempos después de William Shakespeare. Además, se ha intentado seleccionar ejemplos de todas las etapas creativas de una mujer que no ponía título a sus creaciones y que tampoco los numeraba, así que ha sido difícil poner en orden su obra. A partir de aquí, el criterio ha sido muy personal, apostando por los poemas que más le gustaban a Riera. «Estaría encantado de trabajar en sus obras completas, pero es un proyecto gigantesco, casi imposible, que incluiría unos seis o siete volúmenes», remarca el poeta y traductor.

Dickinson nunca pensó en la posteridad, ni siquiera en que su obra fuese para alguien más que para sí misma. Escribía en pequeños folios que luego cosía a mano hasta formar pequeños volúmenes. Prácticamente inédita en vida, tras su muerte su hermana pequeña encontró estas curiosas libretas escondidas en su cuarto y el resto es historia. La nueva traducción al catalán de Riera permite recuperar esta voz esencial de la literatura universal. «sus poemas son únicos, sólo necesitas leer uno o dos para acabar atrapado para siempre», dice Riera.