Las izquierdas se conjuran para un popurrí

Pablo Iglesias y Ada Colau aprovechan la clausura de la asamblea nacional de EUiA para confirmar su propósito de crear un artefacto político en Cataluña donde confluyan todos los afines a Podemos y a Barcelona en Comú.

La fragmentación de la izquierda política es casi tan antigua como la propia creación de la izquierda.Y los intentos de sus divisiones por reagruparse son prácticamente igual de pretéritos. En esta dinámica histórica hay que enmarcar el intento en marcha de la izquierda alternativa en Cataluña por crear el próximo año un artefacto político que sirva para unir a las formaciones que orbitan en torno a Pablo Iglesias y Ada Colau sin dejarse por el camino a ICV, EUiA y Equo.

La VII asamblea nacional de ayer de EUiA sirvió precisamente para hacer público el compromiso de todas las partes de crear una formación que pondrá a prueba la capacidad de las izquierdas alternativas para convivir sin sacarse los ojos. «Es el momento de juntarnos, más que nunca, por objetivos comunes, para demostrar que efectivamente las cosas se pueden hacer mucho mejor», dijo la alcaldesa de Barcelona y alma del nuevo proyecto, Ada Colau, a través de un vídeo que se proyectó en el Museo Marítimo de la capital catalana.

Colau está llamada a asumir el protagonismo central de una nueva formación que podría comportar, entre otras cosas, la doble militancia de las bases de todos los partidos implicados. «Hemos comenzado a hacer ya un camino y hemos demostrado que cuando nos juntábamos éramos más fuertes e imparables, así que hemos de seguir más que nunca juntos por un horizonte de libertades y de derechos que aún están por conquistar», añadió la alcaldesa.

Dirigentes de Catalunya Sí que es Pot –la marca que ICV y Podemos presentaron a las últimas autonómicas sin el resultado esperado–, ICV, Podem y Barcelona en Comú siguieron en primera fila la asamblea que reeligió a Joan Josep Nuet como coordinador general de EUiA.

El propio Nuet mostró su entusiasmo respecto a la creación de «un nuevo sujeto que debe ir mucho más allá de un acuerdo entre organizaciones y, por supuesto, de una confluencia electoral».

En el mismo sentido se expresó el líder de Podemos, Pablo Iglesias, que también se manifestó a través de un vídeo. «Hace falta construir un espacio político en el que puedan hablar diferentes sensibilidades y grupos, pero que caminemos juntos», afirmó Iglesias. El popurrí, por tanto, no sería una marca electoral como lo fue Catalunya Sí que es Pot, sino una formación política con personalidad jurídica propia que, en un principio, no debería suponer la liquidación de partidos como ICV, EUiA y Podemos.

La opinión compartida de los dirigentes de las diversas formaciones de la izquierda alternativa es que en Cataluña se dan las circunstancias para convertirse en una fuerza hegemónica. Al fin y al cabo, Barcelona en Comú ganó las elecciones municipales en la capital catalana y En Comú Podem se impuso dos ocasiones consecutivas en las generales en Cataluña. Su único paso en falso, por tanto, fue en las autonómicas, una cita en la que se vieron superados por Junts pel Sí y por el PSC.

El futuro junto al PSC –partidario de una alianza electoral con el espacio «podemita»– no forma parte, por ahora, de los debates para la creación de la nueva formación de izquierdas.