Desahucio

Los Mossos desalojan del «banco expropiado» del que Trias pagó el alquiler

El Consistorio asumió el pagó de los 66.500 euros de del alquiler anual

La Razón
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Los Mossos d'Esquadra han iniciado hoy en el barrio de Gràcia de Barcelona el desalojo por orden judicial del autodenominado "banco expropiado", una antigua sucursal bancaria okupada en 2011.

Los Mossos d'Esquadra han iniciado hoy en el barrio de Gràcia de Barcelona el desalojo por orden judicial del autodenominado "banco expropiado", una antigua sucursal bancaria okupada en 2011, que el entonces alcalde Xavier Trias 'amnistió' en 2015 al asumir el consistorio los 66.500 euros del alquiler anual.

Según han informado fuentes policiales, el desalojo del edificio, situado en el número 181 de la Travessera de Gracia, se ha iniciado hacia las 09.40 horas, en cumplimiento de una orden judicial, aunque el proceso es lento porque hay un grupo de personas encerradas en el interior, algunas dentro de una caja fuerte, según el colectivo okupa.

El edificio, que actualmente es propiedad de una sociedad mercantil, había acogido una sucursal bancaria, hasta que quedó en desuso y fue okupado en 2011.

El propietario del inmueble inició los trámites para instar al desalojo y, cuando el proceso estaba a punto de culminar en 2015, el entonces alcalde Xavier Trias, a las puertas de las elecciones municipales de mayo pasado, acordó que el ayuntamiento asumiera el coste del alquiler para todo el año, cifrado en 66.500 euros, con lo que los okupas pudieron permanecer en el local sin riesgo de desalojo a costa del erario público.

Una vez que el equipo de Ada Colau (BComú) ganó las elecciones, la entonces concejal del distrito de Gràcia, Maite Fandos, antes de dejar el cargo, informó al colectivo okupa de que el consistorio les pagaba el alquiler hasta final de año, por razones de interés social, si bien los okupas advirtieron que el equipo de Trias pretendía "comprar la paz social en un año delicado de elecciones".

El nuevo equipo de gobierno de Colau intentó cancelar el contrato de alquiler, al entender que no se tenían que pagar lo más de 5.500 euros en alquiler mensual para sostener un edificio okupado.

Sin embargo, el contrato de alquiler, que se firmó poco después de los incidentes por el desalojo de Can Vies -que provocaron durante días una batalla campal en Barcelona-, tenía una cláusula que provocaba que, en caso de cancelación, el coste era aún superior que pagar el alquiler mensual hasta finales de año.

Por este motivo, el ayuntamiento de Colau aguardó a que finalizará el contrato y el 1 de enero de 2016 dejó de pagar el alquiler, ante lo que el propietario reactivó el procedimiento que había dejado en suspenso, para lograr el desalojo que los Mossos están llevando hoy a cabo.

Los Mossos han enviado a la zona a varias furgonetas de la unidad antidisturbios, mientras que el colectivo okupa ha pedido apoyo a través de las redes sociales, por lo que un grupo de personas se ha acercado a la zona para mostrar su solidaridad con los encerrados.

Además se ha convocado para esta noche a las 20.00 horas una manifestación en la plaza de la Revolución en apoyo a los okupas del "banco expropiado".

Efe