El desafío independentista

Societat Civil Catalana alerta de la fractura lingüística por el «procés»

Un informe de la entidad indica que la hipotética consulta soberanista puede ser «tóxica»

La entidad Societat Civil Catalana presentó ayer un informe basado en los datos del CEO de la Generalitat
La entidad Societat Civil Catalana presentó ayer un informe basado en los datos del CEO de la Generalitatlarazon

Un informe de la entidad indica que la hipotética consulta soberanista puede ser «tóxica».

La entidad Societat Civil Catalana (SCC) presentó ayer su estudio «La Cataluña inmune al ‘procés’», que básicamente señala que en Cataluña hay «una importante fractura lingüística» referente a la posibilidad de celebrar un referéndum. El informe también se basa en muchos datos de las encuestas del Centre d’Estudis d’Opinió de la Generalitat (CEO).

Presentaron el estudio el vocal de la Junta Directiva de SCC, Joaquim Coll; el coordinador del Observatorio Electoral de Cataluña, Felipe Moreno; y el catedrático de Estadística de la Universitat de Barcelona, Josep Maria Oller. Respecto a su propio estudio, Coll, dijo que el referéndum «no es sólo ilegal e ilegítimo», sino que también es «socialmente divisorio e indeseable porque rompe la cohesión social».

Coll insistió en que su estudio, basado en los datos del CEO, demuestra que existe una «fractura lingüística» en Cataluña, y que el proceso soberanista ha radicalizado a una parte de la sociedad catalana. La manera en la que SCC llegó a estas conclusiones es que, según los últimos datos del CEO, el 77,6 de catalanohablantes está a favor de la independencia, mientras que el 73,1 por ciento de castellanohablantes está en contra de la separación.

Según el mismo estudio, se puede observar como un 47,7 por ciento de los catalanohablantes se siente únicamente catalán. No obstante, la mayor parte de los que utilizan el castellano como primera lengua, un 60 por ciento, se sienten tan catalanes como españoles.

Estos datos también aparecieron en la última encuesta del CEO, y que comparados con el estudio realizado por este mismo órgano cambian en cuanto al sentimiento de los catalanohablantes, teniendo en cuenta que en 2006 el porcentaje de aquellos que sólo se sentían catalanes era inferior, un 29,7 por ciento.

Teniendo en cuenta todos estos datos, Coll aseguró que «queda claro que en Cataluña hay «una fractura desde el punto identitario y lingüístico», y añadió que por este motivo el referéndum que quiere el Govern «no es deseable porque es profundamente divisorio, teniendo en cuenta que contiene elementos tóxicos». Destacó que «no tiene sentido hablar sobre cohesión social y proponer este referéndum, estamos ante un debate identitar , esa es la realidad, y el resto son argumentos falsos».