Comunitat Valenciana

De la Serna insiste en que solo motivos técnicos ralentizan el Corredor

Anuncia a los empresarios que el AVE Valencia- Castellón entrará en pruebas el 20 de marzo

El presidente Puig junto a Juan Roig (Mercadona), el ministro De la Serna, Vicente Boluda (AVE) y Moragues
El presidente Puig junto a Juan Roig (Mercadona), el ministro De la Serna, Vicente Boluda (AVE) y Moragueslarazon

Anuncia a los empresarios que el AVE Valencia- Castellón entrará en pruebas el 20 de marzo

«Es la tercera vez que me reúno con la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE) en cien días. Con el resto de organizaciones no me ha dado tiempo ni a tener un segundo encuentro. Además, es la tercera ocasión que vengo a Valencia a hablar de infraestructuras». Con esta afirmación, el ministro Íñigo de la Serna, contestaba a todos aquellos que reclaman mayor atención del Gobierno central.

Abría así su intervención antes de comenzar el almuerzo de clausura de la Asamblea de AVE. Previamente, había realizado una pormenorizada explicación de la situación del Corredor Mediterráneo. «He huído de los grandes titulares. Es una foto de la realidad».

La imagen que dibujó ayer el ministro sirvió para dejar bien claro que adaptar a ancho internacional el eje ferroviario del Mediterráneo no va a ser una tarea fácil. De la Serna insistió en que el compromiso del Gobierno central con el Corredor es «inequívoco» y que no existen problemas económicos, sino técnicos y administrativos. «Yo también me uno al ‘hashtag’ QuieroCorredor, como lo haría cualquiera que quiera vertebrar el territorio español».

En resumen, la única fecha con la que puede comprometerse en relación a la Comunitat Valenciana tiene que ver más con la alta velocidad que con el transporte de mercancías. De la Serna avanzó que el AVE entre Valencia y Castellón entrará en pruebas el próximo 20 de marzo y sin embargo, tuvo que admitir que la conexión entre Valencia y Alicante no entrará en funcionamiento hasta finales de 2018 o principios de 2019. De esta manera se vuelve a aplazar la puesta en marcha de un servicio de AVE que una las tres capitales de la Comunitat.

Además, De la Serna señaló como los tramos con mayor dificultad técnica los de Castellbisba- Vilaseca, Castellón- Vandellós y Murcia- Almería.

En cualquier caso, el ministro incidió en que trabajará para eliminar los cuellos de botella de los puertos, en modificar las estaciones para que puedan circular trenes de mercancías de mayor capacidad y en poner a trabajar al coordinador del Corredor Mediterráneo.

Por su parte, el presidente de AVE, Vicente Boluda, confía en que el de ayer sea un día que marque un «punto de inflexión» en la ejecución del Corredor. Además, ratificó que los empresarios mantendrán sus actos de reivindicación y recordó que el próximo acto será el 14 de marzo en Murcia.

El presidente de la Generaliat, Ximo Puig, fue el encargado de cerrar los discursos. Agradeció al ministro de Fomento que entienda la importancia que tiene el Corredor para la Comunitat aunque remarcó que los valencianos, salvo contadas excepciones, nunca reciben el nivel de inversiones que les corresponden en relación a su PIB.

«El motor público está gripado en la Comunitat porque además arrastra una deuda cercana a los 45.000 millones de euros».

Puig también solicitó al Gobierno central que no dé un impulso al servicio de Cercanías de la Comunitat porque, especialmente en el trayecto del norte son «manifiestamente mejorables».