Comunitat Valenciana

«En un país civilizado la riqueza se distribuye a través de los impuestos»

Entrevista a Mónica Oltra, vicepresidenta y consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas

Mónica Oltra
Mónica Oltralarazon

Mónica Oltra es la voz del Consell y ahora entra en campaña con Compromís- Podemos, «incomoda un poco», admite.

-Esta semana anunció un cambio en la ley de violencia de género desde su Conselleria. ¿Por dónde van a ir esas modificaciones?

-Podemos cambiar la ley autonómica y no queremos hacer una propuesta cerrada. Queremos hablar con el sector, con las entidades de mujeres. La idea es ampliar el concepto de violencia de género, estaría bien que se trasladar también a la ley estatal. En este momento, cuando un asesion mata a los hijos de su pareja o ex pareja no es considerado violencia de género y esto sí es violencia contra las mujeres. Se mata a los hijos para hacerle daño a la víctima. El caso de Cuenca, la amiga de la víctima, que la acompañaba porque su amiga tenía miedo, no es considerada víctima. Todas son víctimas de la violencia machista y tiene que ver con la consciencia criminal de pensar que tu pareja es propiedad tuya. No se entiende la relación en un plano de igualdad o respeto. Se entiende que es mía, una posesión y la puede dominar. Hay que cambiar el marco legal para favorecer una mayor protección para las mujeres víctimas de violencia machista y para mejorar los recursos. Debe tener un marco legal obligatorio y que no se pueda recortar un 30 por ciento la lucha contra violencia de género como ha hecho el Gobierno de España en los últimos años

-¿Quién es más responsable la Policía, la sociedad o las Administraciones?

-Es compartida. Las Administraciones, por ejemplo, nosotros estamos llevando a cabo una propuesta para que los policías de la Generalitat tengan formación obligatoria en lucha contra violencia de género. Tienen que abordarlo de manera conjunta: la Conselleria de Justicia tiene que mejorar la protección- ya está en marcha la mejora de la red de atención de mejoras a las víctimas porque es insuficiente-, se va a mejorar la formación del personal de la Administración, todos los que atienden a estas mujeres. Educación: hay estadios previos a la violencia antes de la bofetada. El colectivo diana son los alumnos de 2ª de ESO. Es la edad en la que se presentan las relaciones intepersonales, el encuentro entre chicos y chicas, o chicos y chicos o chicas o chicas. Tienen que saber identificar cuando hay una situación incipiente de violencia. Puede manifestarse a través del control, la dominación. La hemos centrado en el ciberacoso. La campaña se llama “no me toques el whatsup” porque muchas veces no se identifica como una situación de dominación. En Sanidad: detectar una situación de violencia de género desde lo 14 años. La consulta de médico es un espacio íntimo de confianza. Ofrece tranquilidad para que pueda aflorar. Se ha establecido un protocolo con preguntas para saber si hay una situación de violencia de género. Economía Sostenible: planes de formación específicos para favorecer su inserción laboral. Para cuando ya ha denunciado y ya tiene una orden de alejamiento, le hace falta una independencia económica. Es la última parte para vivir una vida plena y feliz. En Vivienda: una parte del parque público también se les reservará. No solo es cuestión de la Conselleria de Igualdad, hemos puesto en marcha una política trasversal. Todas las Conselleries están pendientes de luchar contra la violencia de género.

Por lo que respecta a la sociedad, debe tener en cuenta que no es una cuestión que pase entre cuatro paredes. Si en la casa de al lado pasa algo tiene que llamar a la Polícía. Las tres patas tienen una obligación.

-¿Piensa que se produce un efecto llamada?

-Soy gran defensora de la libertad de expresión y el derecho de la información, si no hubiese sido por los medios de comunicación, este tema no sería un objetivo primordial de la Administraciones. Se pone en el ojo público con el caso de Ana Orantes y creo que la visiblización de un problema ayuda a arreglarlo. No creo que haya un efecto llamada... visibilizar una emergencia social contribuye a solucionarlo.

-Incidió mucho en el nuevo nombre de su Conselleria, aparcó Bienestar Social para cambiarlo por Igualdad y Políticas Inclusivas. ¿Dónde hay más desigualdad en la Comunitat Valenciana entre géneros, razas o clases?

-Probablemente haya más desigualdad entre clases. Las cifras dicen que la desigualdad va creciendo. En parámetros de género vamos mejorando muy poco a poco, algunas cifras empeoran, pero cada vez hay más mujeres con titulaciones superiores, hemos incluso adelantado a los hombres, hay más mujeres en profesiones masculinizadas y aunque sea poco a poco se va mejorando, aunque todavía queda mucho porque en los Consejos de Administración de las empresas todavía hay una minoría muy vergonzante. Ahí se avanza, pero en los parámetros sociales se está retrocediendo y la brecha entre los que más tienen y los que menos, se abre más. Cada vez, lo que antes era clase media se convierte en clase media baja o baja. Eso dicen las estadísticas. En a la discriminación de raza, creo que puede que haya un peligro latente por la brecha social pero que no se manifiesta. Los ciudadanos tienen una idea que todo el mundo tiene que ser bien acogido y que todos tenemos los mismos derechos independientemente del color de nuestra piel o la lengua que hablemos o de la nacionalidad. Preocupándome las tres, donde trabajamos, creo que hemos de incidir muchos en la igualdad a nivel social, en mejorar los parámetros de la redistribución de la riqueza. Ahí tiene mucho que decir nuestra Conselleria pero también la de Hacienda y sobre todo el Ministerio de Hacienda que es quien establece las leyes tributarias que es el mecanismo a través del cual se puede generar más igualdad.

-Cambio impuestos.

-En un país civilizado la redistribución de riqueza se produce a través del sistema impositivo. Luego también a través de políticas activas, tenemos un sector público muy castigado. Esta Comunidad tiene el número más bajo de empleados públicos más bajo por habitante de toda España, entonces, claro para llevar a cabo políticas públicas, que también favorecen la igualdad de oportunidades. Para que tus derechos no dependan de tu cartera necesitamos más inyección en el sector público, una Administración pública que pueda dar mejores respuestas y un sistema tributario que distribuya la riqueza. Hoy un diez por ciento de la población acumula el 57 por ciento de toda la riqueza del país, mientras que el diez por ciento de la población más pobre solo tiene un 2,3 por ciento de la riqueza. Son datos que objetivizan de lo que estamos hablando.

-La presidenta del PP, Isabel Bonig, dijo hace poco que los ricos están en Compromís.

-¿Dice eso? ¿Le da envidia? Yo lo que sé es que con las políticas del PP las personas más vulnerables de esta sociedad son las que más han sufrido. Me da igual en qué partido estén los ricos o los pobres, lo que me importa es que los partidos hagan políticas para la igualdad y para que las personas vulnerables no se queden por el camino y con el PP durante 20 años de Gobierno y ahora los últimos 4 años de Rajoy los que tienen menos poder adquisitivo han sufrido muchísimo.

-Entiendo que tiene garantizado que este cambio se producirá si gana la coalición Compromís- Podemos.

-De esto se trata. Lo bueno de algunas legislaturas es que se acaban. Lo mejor de la legislatura de Rajoy es que se acaba. El 20D tenemos la oportunidad de que el cambio que empezó el 24 de mayo continúe con el voto del 20D. Yo lo que estoy explicando es que el voto tiene dos partes, el del 24 de mayo y la del 20D. Obviamente no vamos a arreglar ni la Comunitat ni el Estado español en cuatro días, ni en tres meses, pero que se pueda empezar a cambiar las políticas para que tengamos políticas de más igualdad, de mejor bienestar para la mayoría de la población, donde se atienda a las personas dependencia, se favorezca la autonomía personal, donde el sistema económico esté al servicio de la persona y no este cambio de modelo que se están produciendo en el que nos dicen que salimos de la crisis los que nunca entraron y el que ganaba mil ahora gana 500. Tenemos un nivel de paro y pobreza sostenible. Para cambiar todo esto es necesario que Compromís- Podemos tenga una influencia decisiva.

-Copagos. ¿Está satisfecha con lo conseguido hasta ahora? En las residencias no se ha eliminado.

-Antes se distinguía entre el de copago de mayores y el de discapacidad (diversidad funcional). En los compromisos electorales estaba eliminar este último. Después de ver el mapa de esta herencia tremenda del PP con un tapón de 45.000 personas que tienen derecho a la ayuda, con estas 14.000 personas de renta garantizada que están en lista de espera, lo que valoramos- teniendo en cuenta que estamos infrafinanciadas y no tenemos el dinero suficiente para llevar a cabo políticas públicas y es algo que incluso reconoce el Gobierno de España aunque no haga nada para arreglarlo- nos planteamos dividir el copago dividirlo entre centros diurnos y residenciales. Tiene más sentido. Una persona que vive en una residencia tiene sus gastos corrientes cubiertos (comida, medicamento, luz...). Un usuario de centro de día o ocupacional tiene que mantener su casa porque cuando acaba, se va a su casa. Estos últimos no tienen que pagar nada y los que están en residencia sí que harán una aportación complementaria. Aún así, se mejora la capacidad adquisitiva de los que están en residencia. Antes el copago era confiscatorio. No podían darle ni estrenas a los nietos. En este momento, lo que hemos hecho es que las pagas extraordinarias no computen para establecer la aportación, las tendrán enteras y dependiendo de si es una persona mayor o diversidad funcional, aquí sí que hay una diferencia y es que los que tienen alguna discapacidad suelen tener más gastos, pueden tener ortoprotésicos o más medicación, la parte del IPREM será el 41 por ciento, 219,66 y a las personas con discapacidad un 61 por ciento 344 euros.

-Entonces, no se ha cumplido con la promesa electoral porque no hay recursos para todo

-Claro, y también porque entendemos que hay que orientar el sistema hacia la autonomía personal y no hacia la dependencia. El Gobierno antiguo ponía el acento en llenar residencias y de una manera completamente cuestionable porque se llenaban las residencias de los empresarios amigos del PP- la familia de Cotino, Ortiz-. Nosotros queremos que las personas tengan que permanecer en su entorno el máximo tiempo posible. Todo el mundo lo prefiere. Queremos que la residencia sea el último recurso. Si tuviésemos una sociedad donde los impuestos redistribuyen la riqueza no haría falta pedir una aportación suplementaria. Pero en el sistema que tenemos ahora nos parece lo más justo.

-Refugiados sirios. Hay una red de viviendas preparada. ¿No llevará a cabo ninguna acogida si no lo autoriza el Gobierno de España? En cualquier caso, Grecia pertenece a la Unión Europea y también España. Libre circulación.

-Ganas no faltan, pero realmente aquí lo que hay es una falta de compromiso político de todos los países de la Unión Europea que nos aboca a un fracaso civilizatorio. El problema es que el problema de asilo es una competencia estatal, sin la complicidad del Gobierno de España no vamos a actuar. Que la Unión Europea que ha tenido episodios de guerras, de gente que huía de las guerras y que han sido acogidas en otros países, que ahora cerremos las puertas a las personas que huyen de la muerte, del terror yihadista, yo creo que es contrario al acta fundacional de la Unión Europea. Es un fracaso colectivo. El Gobierno de España no tienen ningún interés en que los refugiados puedan ser acogidos en este país. Es dramático porque los ciudadanos y ciudadanas sí que quieren. Lo de París a puesto el foco en el terror que generan los yihadistas pero este terror lo generan todos los días allí. Es su realidad cotidiana. Cómo es posible que no abramos los brazos a las personas que huyen de lo que nosotros tememos. La Generalitat lo tienen todo preparado: albergues, viviendas cedidas por ciudadanos, entidades bancarias, comisión mixta para abordarlo de manera multidisciplinar, por ejemplo a los niños hay que escolarizarlos, atenderlos en los hospitales. Tenemos también a la comunidad sirio valenciana que llevan aquí dispuestas a acompañarnos, las ONG están todas preparadas y un barco de Baleària para traer a las personas refugiadas y hacer los viajes que necesitemos. Hemos tenido una respuesta solidaria de los ciudadanos, empresas y entidades bancarias y solo hace falta que el Gobierno de España diga sí. Nos hemos puesto a su disposición. No tienen voluntad, la última reunión fue muy decepcionante.

-Responsable en materia de inmigración. ¿Los Centros de Integración de Extranjeros (CIES) hay que cerrarlos? Solución alternativa.

-Los CIE y en concreto el de Valencia está para cerrar. Tiene unas condiciones infrahumanas. Son centros de internamiento de personas que no han cometido ningún delito. A mi juicio no es compatible con un estado democrático, civilizado y democrático porque privar de libertad a una persona que no ha cometido un delito, que no ha sido juzgada y condenada, yo creo que es contrario a todas nuestras Constituciones, al propio tratado de la UE. La solución no es encerrar a las personas migrantes sin que encuentren un lugar dónde desarrollar su vida dignamente. Las migraciones siempre nos han traído prosperidad y una vida mejor para todos y por lo tanto, a parte de tener que trabajar en el plano internacional para que nadie que no quiera irse de su casa se tenga que ir. No nos olvidemos que quien se va por necesidad no quiere irse, pero se le obliga. Se va porque en su país hay condiciones miserables, o de guerra, de violencia o porque eres mujer donde no te dejan ser libre o porque eres homosexual en un país donde no te matan por serlo. En la medida en que todo esto mejore, no huirán. Que se lo pregunten a los miles de españoles o valencianos que se han tenido que ir sin querer. No es aventura, es necesidad.

-¿Se trata de dar acogida a todos los que lleguen a Valencia? Antes decía que los recursos son limitados.

-Si alguien viene aquí y no puede trabajar, se va. La gente quiere una vida digna. El fenómeno de la migración económicamente es una joya. Vienen muchas personas formadas en otros países y vienen aquí en edad de trabajar. Hemos invertido cero euros y nos aprovechamos. En Alemania están encantados de que los jóvenes valencianos se vayan allí a trabajar. Aquí hemos invertido formarlos, en que lleguen a un nivel de excelencia y allí se ponen a trabajar. Tienen mano de obra preparada que no le ha costado nada. También vienen aquí a trabajar en cosas que la gente no quieren hacer.

-El Gobierno es paritario, las listas de su partido también, pero no lo son los altos cargos. 56 hombres frente 36 mujeres; en personal eventual 38-17 y altos funcionarios 48-37. ¿Por qué no llega a los escalones menos visibles la paridad?

-Tenemos que mejorar. Depende de qué conselleria la paridad se consigue. Tiene que ver con la masculinización de determinadas profesiones. En la de Vivienda y Obras Públicas es un ejemplo, cada vez hay más ingenieras de caminos, pero las personas con experiencia en esta materia mayoritariamente son hombre. No obstante, no es excusa, debemos seguir mejorando. La paridad tiene que llegar a todos los niveles, ya es un gran paso un gobierno paritario. Es la primera vez, me parece curioso que lo critique el PP que nunca lo hizo.

-¿Qué se puede hacer en la empresa privada?

-Estamos en ello. Lo vamos a hacer premiando. Trabajamos en las cláusulas sociales para la contratación pública. Hasta ahora solo había un criterio economicista, la más barata. Estas cláusulas dicen que se tendrá en cuenta la huella ecológica, el equilibrio en el Consejo de Dirección, cuanto más te acerques a la paridad más puntos tendrás, contratar a personas con diversidad funcional, la brecha salarial sea más pequeña, jóvenes tutelados de la Generalitat. Esto anima a las empresas. También queremos premiar a las empresas que lo hacen mejor. Se puede empezar con estas medidas positivas. De aquí un tiempo habrá que plantearse normativizarlo, como está por ley en los países nórdicos. Si fomentamos no avanzamos, si vemos que va muy lento, abordaremos el tema de poner una norma.

-¿Es difícil llevar dos carteras? ¿Se le pregunta más de política que de política de igualdad?

-Visibilizar lo social es también una asignatura, parece que tiene menos morbo estas noticias que otras. Yo lo llevo bien. Hay dramas sociales invisibilizados que son más importantes que discusiones que salen en las tertulias televisivas.

-Los populares le acusan de seguir viviendo en la oposición y de no gestionar. ¿Cómo lleva estas críticas?

-Todo el mundo es libre de decir lo que le parezca pero hemos gestionado más en cuatro meses en la Conselleria que el PP en los últimos años. Solo hay que preguntarle al sector. El PP valenciano la conseguido algo que parecía imposible, desmontar un tópico, que la derecha gestiona bien. Cuando llegué a la Conselleria apareció la foto de Aylan y dijimos, vamos a hacer un plan y quisimos ponernos en contacto por mail con los Ayuntamientos para coordinarlos, así nos lo pedían. ¡No teníamos los mails! Y llevamos los servicios sociales... Yo no sé cómo trabajaban. Esto al margen de la corrupción y de todas las indecencias que nos hemos encontrado. Además de esto, malos gestores, poco trabajadores. Me parece curioso que lo digan ellos. Las personas ya están notando nuestro trabajo porque nuestras políticas les están mejorando la vida.

-¿Es más díficil cuadrar las cuentas de lo que creía? Al final se ha solucionado poniendo el dinero (1.300 millones) que falta aunque a día de hoy no exista. ¿Con qué baza juegan para que llegue ese dinero?

-En la Constitución y la Ley Orgánica de Financiación de las Comunidades Autónomas (Lofca) son nuestras bazas más importantes. Esos 1.300 millones corresponden a una financiación constitucional que dice muy claro que los territorios deben tener dinero suficiente para atender las necesidades de sus ciudadanos. Hablamos de cumplir derechos fundamentales. El antiguo Gobierno se quejaba y no hacía nada, el Gobierno que sale del pacto del Botánico ha decidido va a pasar a la acción. La Constitución es muy larga. Ese dinero nos sitúa en la media, en realidad siendo una comunidad pobre deberíamos estar por encima de la media. Deberíamos ser receptora, pero somos una anomalía democrática. Somos la única pobre que paga. No somos un Gobierno de la queja, que lo hacían con la boca pequeña para no incomodar a Rajoy y cuando Alberto Fabra tuvo decidir entre ser candidato o reivindicar la financiación cerró la boca y prefirió ser candidato a presidente. Ahora este Gobierno defiende los intereses de los valencianos. Gobierne quien gobierne lo tenemos clarísimo.

-Hoja de ruta para reclamar un modelo justo de financiación para la Comunitat. ¿La denuncia anunciada se presentará a cualquier gobierno, cuando?

-La vía judicial no se para. Está abierta y se está trabajando. Queremos llevar a una solución dialogando. Las comunidades cubrimos el 75 por ciento de los derechos de los ciudadanos pero el Estado se queda el 60 por ciento de la financiación. Esto es un desequilibrio. Esto es lo primero que hay que mover. También tenemos que hablar entre comunidades. No es posible que unos tengan más derechos en función de donde haya nacido. Independientemente de las prioridades de cada Gobierno. La imposibilidad de poder atenderlos porque no se nos financia conforme a nuestras necesidades no debería existir. Queremos dialogar y lo dicen todos los partidos, la sociedad civil... Incluso hemos lanzado una propuesta con una Administración tributaria propia y tres tramos en la financiación para que se adequen a nuestras necesidades. Estamos proponiendo soluciones. Si esto no funciona, en un estado de derecho lo solucionan los tribunales. En Alemania hay tres recursos de tres “landers” en el Tribunal Constitucional por este asunto. Cuando el Gobierno valenciano asuma que es la única vía que nos quede se usará la vía judicial gobierne quien gobierne.

-En esta situación de apuros económicos es irrelevante que los presupuestos contemplen una subida del uno por ciento del sueldo de los altos cargos. ¿Lo considera relevante?

-Habría que preguntarselo al ministro de Hacienda que es quien hizo la propuesta de subir un uno por ciento el sueldo a los funcionarios.

-Aplicársela a los altos cargos ha sido decisión de la Generalitat.

-Es una norma aprobada por el Gobierno de España y que se hace una traslación automática. A lo mejor podríamos haber hecho modificaciones, pero ya supone modificar una norma. Yo creo que tiene que ver con la próximidad de las elecciones. Además, a los empleados públicos se les ha maltratado desde los ultimos años y una subida de uno por ciento no les compensa. A los altos cargos... ciertamente la ciudadanía está muy caliente, pero vamos no creo que sea algo muy relevante.

-¿Qué garantiza para la Comunitat la coalición con Pablo Iglesias? Además de ese cambio impositivo del que ha hablado antes.

-Las políticas sociales y las de sostenibilidad ambiental y cambiar el sistema de financiación. Esta legislatura ha sido durísima. EL 2012 fue un año de recortes brutales: medicamentazo, copago que hace que las personas elijan entre medicarse y llegar a fin de mes, se recortaron las plantillas públicas... En ese marco jurídico estamos encorsetados. Tenemos servicios en la Generalitat donde no tenemos funcionarios. Si alguien coge una baja y una mujer un permiso de maternidad te quedas sin servicio. Este dogma de adelgazar a las Administraciones, de maltratar a los funcionarios, de recortar salarios... llevan a no tener médicos, maestros, brigadas forestales suficientes. Los recortes nos han salido muy caros además de ser la legislatura de la corrupción. El de Luis sé fuerte, la caja B... El cambio político es necesario. Hay que hacer lo que hemos hecho aquí con el Pacte del Botànic. Los responsables deben devolver lo que han robado, que paguen Feria Valencia, vienen aquí a hacer un mítin y aún no han pagado lo que debían desde 2008. Es como volver al lugar del crimen. Es de traca, parece que los antisistema sean ellos... son los que más problemas tienen con el Código Penal. A mi me gustaría que el Gobierno de España fuera plural, que hubiese un pacto de Gobierno, similar al del Botànic. Los Gobiernos monocolores es que tienen una tendencia a transitar hacia el despotismo. Por el contrario, los Gobiernos plurales son garantía de más participación y escucha y que la gente de los partidos asumamos que nadie tiene la verdad absoluta.

-Y si Pablo Iglesias le dijera ven...

-¿A dónde? (Ríe)

-Con él.

-(Ríe) A ver, si Pablo Iglesias me dice vente a hacer un mítin le diré que sí.

-¿Y a formar parte de un Gobierno plural?

-Yo tengo un compromiso con los valencianos y valencianas que es para cuatro años en la vicepresidencia de la Generalitat. Yo soy de tierras chiquitas. España es demasiado grande.

-La presión le pudo y volvió a fumar el día que el PSPV dijo que iba a pactar con Ciudadanos. ¿No ha encontrado desde entonces un momento de calma para dejarlo de nuevo?

-No. Lo intenté pero fracasé. Lo he dejado para Navidad, a ver si en Navidad hay ese momento de calma.

-Tanto Puig como usted dicen que este Gobierno es sólido. El Pacte del Botànic son las bases. ¿Hay algún línea roja que pueda destruirlo?

-Espero que sí haya líneas rojas de todos y con todos porque eso es señal de que aquí todo no vale. Este Gobierno a parte de parámetros políticos tiene parámetros morales y el cumplimiento de la palabra dada es un parámetro moral. Cuando uno no puede cumplir lo tiene que explicar muy bien. Sí hay líneas rojas, pero las compartimos. Tanto Compromís y PSPV como Podemos que apoya al Gobierno desde el Parlamento. Está funcionando muy bien. El pacto es muy sólido y el mestizaje, la manera en la que hemos organizado el Gobierno. Nos hace trabajar de manera cooperativa y solidaria. Tanto que de cara a la campaña a veces te incomoda un poco. Hemos hecho mucha piña y eso está muy bien. Disfrutamos de lo que hacemos. A mi equipo le dije, vamos a ver qué hacemos estos cuatro años, pero vamos a pasárnoslo bien porque en la medida en que uno es feliz puede transmitir felicidad.

-Muchos especulan con lo que puede ocurrir después de elecciones. En los mentideros se escucha de todo. Cambiar el gobierno para que entre Podemos... pedir más poder si gana su coalición al PSPV...

-Hablar es gratis.

-Con los resultados que usted espera, ¿ve la Generalitat igual el próximo 21 de diciembre?

-El 21 de diciembre nos veo aprobando el Presupuesto en las Corts y con mucha ilusión porque ya vamos a trabajar con un presupuesto propio. Mire, el 20 de diciembre si la Compromís- Podem tiene más votos que el PSOE tendrá más diputados. Ya está. Esas son las consecuencias. El resto es un compromiso para cuatro años.

-Confía en sacar más escaños que el PSOE.

-Yo espero que sí, pero también más que el PP. Nos presentamos para ser la fuerza más votada.

-¿Cómo debe mirar la Comunitat Valenciana a Cataluña?

-Me harta este tema, pero se tiene que relacionar con Cataluña y con el resto de Comunidades con amabilidad y el Gobierno de España tendría que hacer lo mismo. Seguramente sacaríamos más en claro desde estos parámetros que si nos relacionamos desde la competencia, agresividad, la no escucha. Los conflictos se solucionan dialogando amablemente aunque nos traten mal a veces con el Gobierno de España.

EL PERFIL

La vicepresidenta del Consell del «mestizaje»

Nació en Neus (Alemania) en 1969. Está casada y tiene dos hijos. Es licenciada en Derecho por la Universitat de València, habla inglés, valenciano, castellano, alemán e inglés. Fue abogada en ejercicio hasta 2014. Es de respuesta rápida, pero nunca da puntada sin hilo. Abre ahora una nueva etapa en su vida política y eso que este año ha iniciado unas cuantas. Primero fue el Pacte del Botànic, luego formar un Consell con el PSPV y con el visto bueno del partido de Pablo Iglesias. Casi sin descanso, comenzó a vigilar la construcción de otro acuerdo, el que permitiría concurrir a las elecciones del 20 de diciembre con Podemos. Costó, pero salió como ella había querido desde el primer día. Quiere arrastrar el «cambio» de las municipales y en las autonómicas a las generales. «Yo siempre explico que este voto tiene dos partes. Una fue el pasado 24 de mayo, la segunda llega en diciembre».