Economía

La construcción avisa, aún no hay recuperación

En diez años la mitad de las empresas han desaparecido y la obra pública ha caído un 92%

El presidente de la Federación Valenciana de Empresarios de la Construcción (Fevec), Francisco Zamora
El presidente de la Federación Valenciana de Empresarios de la Construcción (Fevec), Francisco Zamoralarazon

En diez años la mitad de las empresas han desaparecido y la obra pública ha caído un 92%

«En ningún caso podemos hablar de recuperación». El presidente de la Federación Valenciana de Empresarios de la Construcción (Fevec), Francisco Zamora, se muestra muy cauto con aquellos que dan por finalizada la crisis en el sector. «En los últimos meses parece que haya un interés manifiesto en hablar de un sector que recupera el tono, pero la realidad es mucho más cruda».

Admite que el balance del ejercicio 2016 en materia de vivienda nueva deja un resultado un poco mejor, pero los crecimientos siguen anclados a un solo dígito. La inversión en construcción rondó el 2,3 por ciento en el ámbito nacional, pero Zamora advierte de que el sector se mueve en porcentajes muy por debajo de lo necesario para hablar de que esté en vías de recuperación.

Recuerda que en los últimos diez años la mitad de las empresas de construcción han desaparecido y la inversión en obra pública ha caído en torno al 92 por ciento en la Comunitat Valenciana.

«Hemos pasado de un paroxismo total a movernos en unos niveles que para los profesionales del sector todavía no invitan al optimismo».

En una entrevista concedida a LA RAZÓN, explica que la construcción engloba diferentes subsectores (residencial, rehabilitación e ingeniería civil) que evoluciona a muy distintas velocidades.

El análisis que realiza Zamora apunta a que la vivienda nueva «se recupera de manera tibia, lejos de su zona de confort y con niveles de producción muy reducidos». Según el informe Euroconstruct del pasado noviembre, durante 2016 el crecimiento en España alcanzó el 14 por ciento, pero se reduce a partir de 2017 a un diez y sigue bajando en 2018 al seis y al cinco en 2019.

Por lo que respecta a la edificación no residencial ofreció registros en negativo en 2015. En 2016 hubo un «pírrico crecimiento del 1,5 por ciento», y pese a que la previsión para los próximos años pueda ofrecer valores del cuatro por ciento, Zamora advierte de que estos datos deben ser evaluados con cautela porque la demanda está promovida básicamente por fondos de inversión y no por el cliente final.

La obra pública dejó en 2016 una nueva recaída. «Tras un 2014 y 2015 distorsionados por el calendario electoral», los porcentajes para 2016 han sido negativos, menos once por ciento. La tendencia parece que seguirá en 2017, menos seis por ciento para dar paso a «crecimientos simbólicos» en 2018 (1,2 por ciento) y 2019 (3,5 por ciento).

Únicamente en el sector de la rehabilitación existe cierto nivel de actividad, que podría aportar cierto «dinamismo» al sector. Sin embargo, Zamora afirma que nace lastrado por excesivas trabas burocráticas.

Con este panorama, los constructores avisan de que los niveles de crecimiento seguirán estando muy por debajo de las necesidades del sector. Consideran que durante 2017 se mantendrá el contraste entre obra pública y privada y la primera seguirá siendo la «gran sacrificada» para que las Administraciones cumplan con los objetivos de déficit.