Política

«No me preocupa la movilización sino la manipulación sobre la educación concertada»

Eduard Ureña, Iñaki Zaragüeta, Mónica Oltra, Alicia Martí y Enrique Martín antes de los desayunos de LA RAZÓN y ONDA CERO
Eduard Ureña, Iñaki Zaragüeta, Mónica Oltra, Alicia Martí y Enrique Martín antes de los desayunos de LA RAZÓN y ONDA CEROlarazon

Mónica Oltra. VICEPRESIDENTA DEL CONSELL Y CONSELLERA DE IGUALDAD Preparada para la campaña, dice que solo «predicará» por las noches. El día es para el Consell, pero avisa, salen a ser la fuerza más votada

-¿Qué valoración hace de este primer año de Gobierno? Oposición y sindicatos habla de falta de gestión.

-Ha sido un año de mucho e intenso trabajo, intenso. Hemos tenido que gestionar y arreglar los desastres y agujeros que todos los días nos encontramos a causa de una gestión pésima, y muchas veces corrupta, del antiguo Gobierno del PP. Hemos compaginado gestión con la limpieza, y eso no es fácil. A partir de ahí, el balance que hago es positivo, obviamente sin triunfalismos porque estamos en una situación muy difícil, de emergencia social, de falta de financiación del Gobierno de España... Pero sí estoy satisfecha porque hoy hay gente que vive mejor que hace un año. La eliminación de los copagos en Sanidad y el confiscatorio para los dependientes, el Xarxa Llibres... Digo tres medidas para ejemplicar en tres ámbitos: Sanidad, servicios sociales y Educación. Además, la primera ley que aprobó este Gobierno fue la de la Función Social de la Vivienda porque entendemos que hay un problema en un país donde hay 500.000 viviendas vacías y gente que está en la calle. También somos la primera autonomía que hemos firmado un convenio con la organización Transparencia Internacional para someternos a su control. Ha sido un récord cubrir estas áreas en un año.

-Habla de las necesidades económicas, ¿seremos los últimos en cobrar el Fondo Liquidez Autonómica (FLA)?

-Parece que sí... Estamos entrando en una especie de castigo porque nosotros negociamos hasta el último minuto y no nos hemos resignado a que el ministro de Hacienda en funciones, Cristóbal Montoro, nos impusiese sus reglas de juego. Todas las comunidades tenemos derecho a opinar. Sobre todo, cuando reconocen que estamos infrafinanciadas. Se nos cambia el dinero que pagamos por FLA, que es un préstamo. Esto la gente lo tiene que saber. Nos lo están poniendo difícil. El año pasado antes de las elecciones al Gobierno de Fabra le inyectaron más de 2.000 millones.

-¿Habrá problemas para pagar las prestaciones si no llega?

-Si no llega, obviamente. Lo que no está en financiación debe estar en el FLA. No podemos multiplicar el dinero, eso lo sabe el ministro y también los ciudadanos. En cualquier caso, llegará pronto y podremos proceder a los pagos pendientes.

-¿Se descarta negociar los pagos con los grandes proveedores?

-Lo que dijimos es que el ajuste no afectaría a los servicios básicos de los ciudadanos, a sus derechos, ni a las pymes. Estamos centrados en el que FLA llegue y gestionaremos los ajustes con estos tres irrenunciables.

-La otra vía es aumentar los ingresos es aumentar los impuestos. ¿En qué estado se encuentra la revisión con la Conselleria de Hacienda?

-Se ha constituido una Comisión de catedráticos, expertos en derecho tributario, que analizan el sistema valenciano para saber qué es lo que tenemos y lo que necesitaríamos. Ese informe sentará las bases para que podamos decidir mejor. Hemos hecho una alianza con las universidades, la ciencia y el rigor, que se había roto.

-¿También se está consultado a los expertos cómo reducir el paro?

-Las cifras de paro tienen un componente que no depende de nosotros, sino del Gobierno de España. La regulación del mercado laboral y de la legislación laboral es de su competencia. La reforma laboral aprobada fue muy lesiva. Tenemos un fenómeno que no ocurría desde hace décadas y es el de los trabajadores pobres. Nosotros podemos poner en marcha políticas activas de ocupación, como es la formación, la inserción laboral. Ya hemos aprobado el Avalem Joves y habrá tres programas más: Avalem Experiència, Territori y Emprendedors. El margen que tenemos como Comunidad Autónoma es más estrecho, si la economía no chuta... Lo hace porque con las políticas de «austericidio» el sector público no tira del privado. Nosotros en Educación y Sanidad, entre la anterior convocatoria y la próxima, sacaremos 4.000 plazas.

-¿Le preocupa la gran movilización en defensa de la concertada?

-No me preocupa la movilización, sí la manipulación que determinados dirigentes del PP están haciendo. No está bien generar angustia en la gente ni mentir sobre la realidad para conseguir un puñado de votos. Está claro que el PP nos tiene acostumbrados a esto. El próximo año, las aulas concertadas serán las mismas que había con el PP. Entonces, ¿cuál es el objeto de la reivindicación? Para nosotros toda la red pública es importante, y ahí entran las privadas que prestan un servicio público. Toda la red es valiosa y hemos bajado los ratios para que sea de mayor calidad. Por primera vez tratamos a todos por igual. Ningún niño o niña que esté estudiando en este momento tendrá que cambiar de centro, además estudiamos las vías para sus hijos vayan al mismo colegio. Eso no pasaba con el PP cuando cerraban colegios y aulas. Se cerraron 600. Tutelamos los derechos de los niños y niñas y no el de los partidos ni las empresas. Nadie verá un impacto en su vida.

-En su programa electoral y en el del PSPV dicen claramente que la prioridad es la escuela pública.

-Claro. ¿Cómo no vamos a amar nuestra escuela pública? Como los hospitales... Son un bien común de todos los ciudadanos.

-¿En qué situación se encuentra la reapertura de RTVV? ¿Será los extrabajadores un obstáculo?

-Este tema era complejo. A nosotros nos vinculan los compromisos adquiridos en el Pacte del Botànic. En el programa electoral que yo defendí no se hablaba de fecha concreta. Entramos al Gobierno con una RTVV cerrada, un pleito en la Audiencia Nacional y un recurso en el Tribunal Constitucional, a parte de los agujeros que encontramos en los cajones. Necesitábamos primero una ley. Dijimos que como no queríamos una televisión gubernamental dejaríamos que Les Corts trabajasen. Cuando lo hayan decidido, ya se puede poner en marcha RTVV y desde Les Corts nos dicen que podría estar hacia octubre o noviembre.

-A parte del mandato legal, hay informes como el del Consell Jurídic Consultiu (CJC), que realiza advertencias sobre las consecuencias que puede tener su reapertura. ¿Cómo trabaja el Consell este escenario?

-Yo espero que el Parlamento tenga en cuenta las advertencias del CJC, pero no depende del Gobierno. Cuando esté la ley, se tomarán decisiones. Veremos en la práctica cómo ponemos en marcha el servicio. Necesitamos el mandato legal de Les Corts, no queremos hacer desastres jurídicos, ya tenemos bastante con los que nos dejó el PP.

-¿Qué leyes de igualdad son difíciles de cumplir para el cardenal Cañizares?

-Se le debería preguntar a él. Hay dos grandes leyes, la de Igualdad y contra la Violencia de Género. Incumplir la primera supone invisibilizar a las mujeres, en el segundo caso... en ese terreno no quiero ni entrar. Me resulta muy penoso que un representante del Evangelio haga estas declaraciones sin pensar en las consecuencias.

-¿Genera odio?

-No digo que sea su intención, pero hay personas que entienden sus palabras como un grito a una cruzada. No es casual que después de sus palabras hayan aparecido pintadas encima de los carteles de celebración del día contra el odio a las personas gays o transexuales. Debería calibrar sus palabras. Para mucha gente es un referente y no son recibidas en la intención que en muchas ocasiones son dichas. En este mundo todos somos iguales y respetables. Pintadas como «degenerados fuera de la escuela» cuando estamos hablando de un niño transexual, generan odio, bullying, agresiones... No ayudan. No son caritativas. No creo que tengan nada que ver con la Palabra de Jesús.

-¿Qué opinión le merece que la Fiscalía no admita el caso Ritaleaks que promovió Compromís?

-No nos ha llegado la resolución, pero sabemos que desde Valencia se envió al Tribunal Supremo porque había indicios de posibles ilícitos penales. Supongo que nos informarán, pero no estamos personados. Hablamos de facturas que no se justifican desde el ejercicio del cargo público. En algún momento se debe diferenciar lo necesario para el cargo y lo que es un lujo personal. No hace falta ir a una ratonera, pero por 100 o 200 euros hay cosas muy confortables en Madrid... ¿Hay que pagar 600 ó 800? ¿Dónde está la línea entre la malversación y lo necesario? De eso hablamos. En este caso se traspasaron todos los límites. También hay que delimitar entre el partido y la Alcaldía.

-¿Preparada para una nueva precampaña? ¿Cómo afecta al trabajo del Consell?

-Más que al Consell a nuestras vidas. Llegamos exhaustos a este final de curso y tenemos que acabar con elecciones, pero bueno, siempre movilizan las energías y uno saca fuerzas de donde no tiene. El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, nos dejó muy claro que la actividad del Consell no se verá resentida. Por el día se gobierna y por la noche se predica. Doblamos la jornada. A mí las campañas me gustan porque te dan la oportunidad de estar en contacto con la gente y de movilizar ilusiones, esperanzas. Tenemos una candidatura muy emocionante y vamos a hacer una gran movilización.

-¿El objetivo es el «sorpasso»?

-El objetivo es ser la primera fuerza política de la Comunitat Valenciana.

-¿Tiene datos? ¿Cuál será un buen resultado?

-El 20 D ya fue bueno. Tenemos que decir a la gente que no tenemos miedo a ganar, queremos ser decisivos en este país, formar parte del Gobierno de España, construir las políticas de cambio. Es lo que está esperando la gente, que alguien le diga que tiene ganas de ganar.

-Usted llegó a decir que había que cambiar los líderes si no se llegaba a un acuerdo.

-Lo dije en un contexto donde había que hacer autocrítica. Repetir las elecciones es un fracaso por no saber gestionar el voto de las personas. Yo votaré lo mismo, pero un poco ampliado, por lo que me hará más ilusión votar. No todo el mundo tiene la misma responsabilidad, pero creía que era importante evidenciar que habíamos decepcionado a la gente. Tampoco es un drama, espero que haya una mayoría suficiente para formar un Gobierno de cambio, a la valenciana.

-No fue posible el pacto para acudir en coalición al Senado con el PSPV y Podemos. Tanto usted como el presidente Ximo Puig, dicen que será posible en el futuro. ¿Se refiere a las próximas elecciones autonómicas?

-(Ríe) Bueno... Probablemente estamos hablando de que el presidente y yo tenemos grandes sintonías. Creo que Pedro Sánchez se ha equivocado, porque estábamos planteando hacer unas candidaturas conjuntas en el Senado para que de los doce senadores que se eligen, nueve fueran del cambio político. Ahora lo tenemos más difícil. En un sistema electoral mayoritario, cuando hay diversas opciones políticas, o se ponen de acuerdo, o la opción minoritaria les gana. Que eso no lo haya visto Sánchez me resulta incomprensible, como también que quiera dejar gobernar al PP. Vamos a por la mayoría social, electoral y la parlamentaria.

-¿De verdad podría renunciar a un Ministerio en un Gobierno de cambio?

-Soy vicepresidenta de la Generalitat hasta 2019, me gusta cumplir mis compromisos. Se ve que no me creen porque lo contesto muchas veces. Tengo un compromiso particular y general. para cuatro años.