Puig pide perdón por la «cruel» política sanitaria del PP

El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, pidió ayer perdón a las oenegés por la política sanitaria del gobierno popular. «Una sociedad decente nunca puede tomar decisiones como las que se han tomado», señaló en referencia a la pérdida de la sanidad universal en 2012. A su juicio, el Real Decreto de 2012, aprobado por el Gobierno central y que restringió la atención sanitaria a inmigrantes «sin papeles» fue un medida «de una gran crueldad» que se basaba «en ahorrar por medio de quitar derechos a los más vulnerables».

Por ello, dijo, el Ejecutivo que él preside ha decidido ahora anular esa orden y devolver el derecho de asistencia sanitaria universal a 30.000 personas que estaban hasta ahora excluidas del sistema público. Así, defendió, que todos desde ayer tendrán derecho y acceso a este servicio gracias al Plan de Universalización de Sanidad de la Comunitat Valenciana aprobado por el Consell.

«Propaganda»

No obstante, desde las filas populares se ha criticado la «propaganda» socialista, pues aseguran que la propuesta del tripartito es igual al plan vigente que puso en marcha la Conselleria de Sanidad que dirigió Manuel Llombart. «Solo han acortado el plazo de empadronamiento necesario para acceder a esta ayuda -de un año a tres meses-.

Con todo, el Gobierno valenciano quiso rodearse ayer de los beneficiarios de su idea y organizó un acto solemne en el Palau de la Generalitat junto a los colectivos y asociaciones de apoyo a inmigrantes como Farmamundi, Médicos del Mundo, Cáritas y la Plataforma Intercultural de Inmigrantes a los que agradeció el trabajo que durante estos años han llevado a cabo para defender «un derecho que no debe depender ni del nivel adquisitivo, ni del origen ni de la situación administrativa».

Por su parte, la consellera de Sanidad, Carmen Montón, explicó que desde la semana pasada ya han expedido 200 tarjetas sanitarias a inmigrantes y que todo el proceso se está llevando a cabo de forma «ordenada y escalonada».

Sobre la posición del Gobierno central respecto a este asunto subrayó que «no han querido ni hablar del tema» en el Consejo Interterritorial del miércoles y que el Consell «devuelve la universalidad independientemente de otras cuestiones que se plantearon en el ‘decretazo’ de 2012».