Bankia

Tres juzgados condenan a Bankia a devolver 41.000 € por la venta de acciones

Tres juzgados de Primera Instancia de Valencia han coincidido en anular la compra de acciones de Bankia a cuatro particulares y condenan a la entidad financiera a devolver 41.000 euros.

Las sentencias consideran probado que Bankia ofreció una imagen de solvencia no real en su salida a bolsa en julio de 2011, según los autos judiciales de los Juzgados de Primera Instancia 1, 3 y 4 de Valencia facilitados por la Asociación de Perjudicados de Entidades Financieras (APDEF).

Los pequeños inversores "fueron engañados por la entidad porque adquirieron las acciones basándose en una información que no reflejaba la situación real de Bankia cuando salió a bolsa", según el abogado de APDEF en Valencia Armando Galán.

Consultada por EFE, Bankia no se ha pronunciado por el momento sobre esta cuestión.

En una de las sentencias, se señala que la adquisición de acciones se basó en una información dada en un folleto, recogida en un resumen y publicitada a través de todos los medios de comunicación social no acorde con la realidad de la entidad que ofrecía las acciones.

Es el caso de una vecina de Valencia de 70 años, con serias dificultades para saber leer y escribir, que invirtió 21.000 euros en julio de 2011 con la compra de acciones de Bankia.

El Juzgado de primera instancia número 4 de Valencia declara la nulidad de la compra en este caso, al considerar que existió un "error"en el consentimiento prestado para su adquisición.

En otras dos resoluciones similares, el Juzgado de Primera Instancia número 3 de Valencia da la razón a dos vecinos de Valencia de 45 y 73 años que adquirieron 6.000 y 3.997,50 euros respectivamente en acciones.

En estos casos, el juzgado declara nula la compraventa de acciones debido a la falta de información sobre las características y naturaleza del producto adquirido.

El Juzgado de Primera Instancia número 1 de Valencia ha admitido también la demanda de un vecino de Valencia que adquirió 9.997,50 euros en acciones de Bankia, al considerar que existió un "error esencial relevante y excusable en el consentimiento".

En todos los casos los juzgados condenan Bankia a devolver íntegramente el dinero invertido, más los intereses desde la compra, además de condenar a la entidad al pago de las costas.