Música

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«Alma del ayer» para el mundo de hoy con Felipe Alberto

Felipe Alberto, cantante peruano y universal
Felipe Alberto, cantante peruano y universallarazon

El mundo se hace más pequeño, cercano y a la vez más interesante, sí se trasciende el tiempo y el espacio y nos transportamos como por arte de magia a un lugar distante donde la música y el sentimiento que esta trasmite lo dominen todo.

Un claro ejemplo de ello, sin duda, es «Notre secret», una canción cantada en francés que con los primeros acordes de su guitarra revela ser la emblemática canción «nuestro secreto», un vals criollo perteneciente al cancionero clásico de la música tradicional peruana. Esta versión, sin renunciar a su espíritu, transmite inéditos y sugestivos matices. «Notre secret» produce la sensación de escuchar una canción de toda la vida y encontrarle secretos hasta entonces no desvelados, que la convierten en una acertada interpretación, que no hace otra cosa que enriquecer la ingente tradición musical de los pueblos en un mundo globalizado.

El autor de esta audaz iniciativa musical se llama Felipe Alberto, un versátil cantante y excelso guitarrista peruano afincado hace años en Canadá. Fue allí, en tierras norteamericanas donde creció y donde aprendió a querer, canturreando con su padre, las canciones que muchos años después le abrirían un espacio en el panorama musical. La música, que en su niñez acompañaba los momentos familiares, con el tiempo fue adquiriendo más importancia y terminó imponiéndose con sus ritmos y sus acordes, perfilando así su potencial como cantante y músico.

Fruto de aquel impulso musical vital es el disco «Alma del ayer», editado el 2015, grabado íntegramente en Canadá e interpretado en español con la colaboración de músicos peruanos y canadienses. Contiene una selección de representativos temas que conforman un muestrario de la música tradicional del Perú, ya convertidos en verdaderos clásicos. Las canciones elegidas son versiones en las que Felipe Alberto, un artista con enjundia, imprime su particular sello cosmopolita.

Para alegría de los amantes del verso elegante y la palabra precisa, entre las piezas elegidas encontramos la canción «José Antonio», una verdadera oda musical dedicada al brioso caballo de paso peruano con la inconfundible firma y sobriedad de la gran compositora Chabuca Granda, interpretada magníficamente por Felipe Alberto. El disco también recoge composiciones de maestros de la música peruana entre los que encontramos a Alicia Maguiña o Augusto Polo Campos.

La acertada selección del disco incluye géneros musicales tradicionales como el Tondero, la Marinera, y entre otros, el Huayno, propio de los andes. En el popurrí de huaynos grabado en vivo, Felipe Alberto inicia con unos excelsos acordes que hacen brotar de la guitarra las notas musicales que inmediatamente nos remiten a los parajes andinos que inspiran estas melancólicas melodías.

Musicalmente, como no podía ser de otro modo, el disco contiene la alegría de las muy mentadas jaranas limeñas de antaño y la guitarra se convierte en protagonista imprescindible dotándole a cada canción su propia personalidad. El cajón peruano, como polifacético instrumento de percusión, imprime el frenético compás que remata armónicamente cada canción y deja paso claro para que los versos y coros expresen la picardía e imaginación del saber tradicional extendido a lo largo y ancho del país.

En su disco, como una declaración de intenciones, Felipe Alberto revalida su tradición musical con orgullo y la expone al orbe, llevando su música por los festivales más importantes de Canadá, Estado Unidos y Perú.

Las sociedades, con mayor o menor intensidad, siempre están en constante evolución, enriqueciéndose con múltiples aportes culturales, es su sino, es su destino, de otro modo apagarían su creatividad, enfermarían de endogamia y pronto, débiles y casi desvanecidas, desaparecerían. Por ello el aporte musical de Felipe Alberto, además de ser musicalmente muy recomendable, cumple acertadamente su función de engranaje cultural que acerca la tradición musical peruana de antaño (siempre vigente en Perú) y la traslada a la actualidad editándola en Norteamérica, en suma, brinda una tradición musical a todos quienes se sientan atraídos pos sus embriagantes notas.

Las canciones del disco «Alma del ayer», del cantante y guitarrista Felipe Alberto contienen el implícito propósito de aportar, de enriquecer culturalmente a través de un dialogo musical y por ello se hacen universales. Cuando empiezan a sonar las canciones, el ayer y el hoy se funden en el ahora, las fronteras desaparecen y la música despliega ese misterioso toque especial y entonces hace volar la mente, exalta el sentir e inevitablemente invita a los pies a moverse incesantemente, sin parar.