Violencia de género

Apuñala a su ex pareja un día después de caducar la orden de alejamiento

El hombre le asestó varias puñaladas en el cuello en plena calle. Ya está en la cárcel.

Los vecinos se manifestaron ayer desde la Plaza de Lavapiés hasta el número 21 de la calle Tribulete, donde se produjo la agresión.
Los vecinos se manifestaron ayer desde la Plaza de Lavapiés hasta el número 21 de la calle Tribulete, donde se produjo la agresión.larazon

El hombre le asestó varias puñaladas en el cuello en plena calle. Ya está en la cárcel.

Un nuevo caso de violencia de género se produjo el pasado día 8 en Madrid. Se trata de Nati, una mujer de 47 años, vecina del barrio de Lavapiés, que fue apuñalada en plena calle, a la altura del número 21 de la calle Tribulete por su ex pareja, de 61 años. La agresión se produjo en torno a las 21:45 horas, cuando un hombre, supuestamente su ex pareja, le asestó varias cuchilladas en el cuello a la mujer delante del bar que ella había regentado hasta hacía poco. Según explicaron fuentes policiales, varios vecinos llamaron a la Policía para alertar de lo que estaba ocurriendo, lo que permitió que los agentes lograran reducir y detener al agresor y trasladarlo a la comisaría del distrito Centro.

«Él era un “pieza”. Estuvo diez años en la cárcel y había salido hacía no demasiado», comentaban ayer algunos vecinos del barrio, que, además, añadían que «tenía problemas con el alcohol». En el barrio también aseguraban ayer que la pareja no había vuelto; de hecho, la orden de alejamiento que él tenía sobre ella por agresiones anteriores había caducado el pasado viernes 7 de abril, un día antes del apuñalamiento.

El Juzgado Número 5 de Violencia sobre la Mujer de Madrid decretó ayer prisión provisional comunicada y sin fianza contra el agresor por un presunto delito de homicidio en grado de tentativa. La víctima fue atendida por el Samur y trasladada a la Fundación Jiménez Díaz en estado consciente y con heridas superficiales en el cuello.

Los vecinos del barrio de Lavapiés convocaron ayer una concentración a las 19:30 horas, en la plaza de Lavapiés para apoyar a la víctima y condenar este nuevo caso de violencia de género. La marcha, que contó un gran número de asistentes partió de la plaza donde, después de permanecer allí varios minutos, continuó por la calle Tribulete –que tuvo que ser cortada–, en la que se produjo la agresión.

La comitiva se paró frente al número 21, lugar donde se produjo el acuchillamiento, desde donde se lanzaron proclamas como «disculpen las molestias, nos están asesinando», «nos tocan a una, nos tocan a todas» o «vecina escucha, estamos en la lucha».