Ayuntamiento de Madrid

Carmena aprueba en solitario el presupuesto de la M-30 para 2018

Reduce en un 33% la partida de inversión para renovar la infraestructura. PP, PSOE y Cs alertan del peligro que esto supone para la seguridad de los usuarios

El consistorio ha dejado de cumplir con el plan de inversiones de renovación de la infraestructuras de la calle 30
El consistorio ha dejado de cumplir con el plan de inversiones de renovación de la infraestructuras de la calle 30larazon

El consistorio aprueba en solitario el presupuesto de la M-30 para 2018. Reduce en un 33% la partida de inversión para renovar la infraestructura, acumulando una bajada desde que Ahora Madrid llegó a la Alcaldía de más de un 70%. PP, PSOE y Cs alertan del peligro que esto supone para la seguridad de los usuarios.

El concejal de Economía y Hacienda del Gobierno de Manuela Carmena, Carlos Sánchez Mato, sacó ayer adelante el presupuesto para el año 2008 de la M-30. Lo hizo valiéndose de la mayoría que tiene Ahora Madrid en el Consejo de Administración de la Sociedad Mixta Calle 30, ya que tanto PP, como PSOE y Cs, así como los tres representantes de Emesa –la sociedad privada que posee el 20% de Calle 30–votaron en contra de unas cuentas que reducen en más de un 33% la partida para renovar la infraestructura. Una bajada que preocupa a la oposición y a la empresa privada, «porque dejar de invertir en el mantenimiento de una infraestructura tan sensible como la M-30 supone dejar de invertir en la seguridad de sus usuarios».

Las cuentas de la calle, cuya situación financiera está siendo objeto de una comisión de investigación, pasará ahora al proyecto general del presupuesto municipal para 2018 del Gobierno de Ahora Madrid para el que Carmena necesita el apoyo del PSOE, puesto que no tiene mayoría absoluta en el Pleno. Un apoyo que ayer no obtuvo por parte del concejal representante del partido socialista, José Manuel Dávila: «Nuestro grupo ha vuelto a votar en contra de los presupuestos de la M-30 por que no estamos de acuerdo con el modelo de gestión de la empresa, cuyos ingresos dependen exclusivamente del Ayuntamiento, que hace un sobreesfuerzo para que la empresa genere beneficios, lo que provoca que se paguen altísimos impuestos». Un modelo de gestión que aunque Carmena dijo que iba a cambiar, para municipalizar la empresa, lo cierto es que dicho cambio no aparece reflejado en los presupuestos y, de hecho, ayer Sánchez Mato se negó a tratar.

Lo que realmente preocupa a todos los grupos de la oposición es la seguridad. Según explica Álvaro González, del PP, «hay un déficit en la inversión en renovación. Y eso es muy preocupante», afirma. Y es que la partida de inversiones no ha dejado de decrecer en los últimos años. Así, mientras que en 2016 se destinaron 27.812.581 euros, en 2017 la cifra bajo a 12 y este año la reducción ha llegado hasta los 8 millones. Así, desde que Carmena llegó al Ayuntamiento, la inversión en la M-30 ha caído un 70,3%.

La vía de urgencia

El motivo: el consistorio ha dejado de cumplir con el plan de inversiones de renovación de la infraestructuras de la calle. En su lugar tramita por «la vía de urgencia» las inversiones que se requieren si se detectan problemas. Según puntualizó ayer el Ayuntamiento «ante cualquier necesidad que pueda surgir, se ejecutará independientemente del presupuesto aprobado». Esto se debe, según la oposición, a la guerra que desde hace tiempo tiene Sánchez Mato con Emesa, a la que quiere cargar con más gastos de Calle 30. «Tramitando las inversiones por la vía urgente puede reclamar la factura a Emesa, sin embargo, si las presupuesta, tiene que asumirlas el consistorio, como hasta ahora».

Tanto desde PP, como PSOE y Cs se apunta al peligro que puede suponer no acometer este plan: «Que no nos sorprenda si esta falta de inversión pasa factura», advierte González. «Estamos preocupadísimos por la reducción de la partida de inversiones y si garantiza la seguridad de los usuarios», apunta Dávila del PSOE.

Desde Ciudadanos, Sergio Brabezo apunta también a la «improvisación» y «falta de respeto a la oposición» de Sánchez Mato, ya que el viernes recibieron el borrador del proyecto, que preveía una inversión de 14.094.084 de euros, y el sábado, cerca de las nueve de la noche, recibieron por email un nuevo borrador en el que se reducía la partida de inversiones en seis millones, hasta dejarla en poco más de ocho.

El PP además pone en entredicho que se vaya a cumplir esta previsión. Según asegura el representante popular en el consejo de administración de Calle 30, «el pasado año se presupuestó una inversión de 12 millones que no se ha ejecutado. Según el cálculo que hace tanto el PP como Cs de lo que se habrá ejecutado a final de año, la cifra quedará entre 6 y 8 millones de euros.

Según el consistorio, entre las actuaciones contempladas para 2018 en ese capítulo figuran el inicio del nuevo centro de control, la gestión automática de la ventilación, ampliar la cobertura de radiocomunicaciones a los servicios de emergencia y rehabilitar el puente de la Lira y de la pasarela peatonal Ramón y Cajal, entre otros proyectos. «No es un presupuesto realista, porque no se ejecuta y porque no recoge las inversiones que esta infraestructura necesita», explica Sergio Brabezo de Ciudadanos.

Otro de los motivos por los cuales el presupuesto presentado ayer por Sánchez Mato obtuvo un «no» rotundo es porque, según denuncian los portavoces, hay contradicciones entre lo que dice Sánchez Mato y lo que recogen sus cuentas para 2018 en cuanto a quién pagará el suministro eléctrico de la vía. Según el presupuesto y según se ha venido haciendo siempre, es la sociedad mixta Calle 30 quien asume el gasto, que en el presupuesto para el próximo año es de 4,7 millones de euros. Sin embargo Sánchez Mato volvió a insistir ayer que «pagara Emesa». «Es parte de la cruzada de Sánchez Mato contra Emesa», dicen desde la oposición que recuerda que la empresa encargada del mantenimiento y explotación de la calle (participada por Ferrovial, Dragados y la Api Conservación) ha reclamado al Ayuntamiento más de tres millones de euros por la modificación contractual de un préstamo concedido a Madrid Calle 30, y por su parte del consistorio le ha sancionado con 995.000 euros por falta de cumplimiento en la instalación de una red wifi, otra de comunicaciones y de servicios de mantenimiento.

Respecto a la factura eléctrica del próximo año, el Ayuntamiento destacó ayer que ahorrará el próximo año un 15% en la factura de la luz, ya que reducirá la potencia y redistribuirá alumnos trabajos para hacerlos en periodo nocturno y fines de semana, que el coste de la electricidad es menor.

La «indignante» hora extra de la reunión

En la reunión de ayer del Consejo de Calle 30 no pudieron entrar varias preguntas que el PP y Cs pidieron tratar con concejal de Economía y Hacienda. Tal y como informó ayer este periódico, Carlos Sánchez Mato denegó introducir varias preguntas de la oposición «por problemas de disponibilidad de agenda». Un argumento que indignó a la oposición porque el edil sí tuvo tiempo la semana pasada para ir al Supremo a manifestarse a favor de los secesionistas catalanes o para estar en Barcelona para hablar de municipalismo. La sopresa fue mayúscula ayer cuando Sanchez Mato alargó casi una hora la reunión del consejo: «Una vez más obstaculizan la labor de la oposición», afirmó Állvaro González del PP.