Carmena culpa de la suciedad a los «jóvenes españoles con estudios»

La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, responsabilizó ayer de una parte de la suciedad de las calles de la capital a los propios vecinos. Para ilustrar su denuncia puso como ejemplo lo que ella observa en su camino diario hacia Cibeles: «Yo voy muchas veces andando al Ayuntamiento y recojo a lo mejor hasta cinco o seis latas que la gente tira, y las tira al lado de una papelera. Eso no se puede tolerar». Carmena cree que detrás de estas actitudes hay «una desidia enorme en la forma en que los madrideños cuidamos la ciudad». Una actitud que, a su juicio, es de la «época del feudalismo». La alcaldesa realizó estas declaraciones durante una entrevista en televisión. Horas más tarde, durante una visita a Vallecas, dio más pistas y se atrevió, incluso, a dibujar un retrato robot de los vecinos que más ensucian las calles. Según su diagnóstico, se trata de un español joven con estudios universitarios.

Para obtener esta conclusión, se basa en los datos de las personas que han sido multadas por ensuciar las calles, muchos de las cuales han visto sustituidas las sanciones de 750 euros por la realización de labores de limpieza: «¿Son los emigrantes mayores? No, son los jóvenes. ¿Son los jóvenes sin estudios? No, son los jóvenes con educación, en un elevado tanto por ciento de universitarios», señaló la alcaldesa respecto a quienes ensucian más.

Al margen de responsabilizar a los vecinos por la acumulación de basura en las calles –«el nivel de ensuciamiento es enorme porque hay una enorme falta de actitud cívica», insistió–, Carmena subrayó que la situación no es tan grave como hace unos meses: «Estamos muchísimo mejor en cuanto a limpieza». Sin embargo, los datos de avisos, quejas y reclamaciones que los madrileños formulan ante el consistorio por la falta de limpieza no se compadecen con la visión de la jefa del Ejecutivo municipal. Tal y como adelantó este diario, en septiembre de 2016 se batió el récord histórico de avisos por esta materia: se registraron 10.038 avisos. Fue el primer mes desde que se contabilizan estas incidencias en el que se superó la barrera de las 10.000 quejas. En octubre y noviembre, los datos de avisos han bajado respecto a ese mes, aunque, sin embargo, están por encima de los niveles registrados en esos mismos meses de 2015. En el pasado mes de octubre, se registraron 5.958 avisos, casi 2.000 más que doce meses antes, en octubre de 2015, cuando esta cifra se quedó en los 3.982. En noviembre de 2016 se contabilizaron 4.705 avisos frente a los 4.242 de noviembre de 2015.