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Sin soluciones para el Madrid más sucio

Los sindicatos recelan del plan de remunicipalización de Carmena. CC OO y UGT exigirán que no varíen sus condiciones laborales ni económicas y dicen que la solución a la suciedad pasa por aumentar la plantilla

Las limpiezas a fondo de los barrios, sin éxito. Ya se han realizado en 18 zonas de Madrid, pero según admitió ayer la alcaldesa no han tenido el resultado esperado, porque a los «cuatro días» han vuelto a ensuciarse.
Las limpiezas a fondo de los barrios, sin éxito. Ya se han realizado en 18 zonas de Madrid, pero según admitió ayer la alcaldesa no han tenido el resultado esperado, porque a los «cuatro días» han vuelto a ensuciarse.larazon

Carmena quiere remunicipalizar la limpieza; una solución de la que recelan los sindicatos, que advierten de que la única opción viable es aumentar la plantilla: «El resto son milagros», aseguran. La alcaldesa, sin embargo, se niega a aumentar el presupuesto

Para resolver el problema de la limpieza de las calles de la capital, la alcaldesa madrileña, Manuela Carmena, pide a los vecinos que envíen cuantas más quejas mejor, con fotografías incluidas, de los incumplimientos de las empresas concesionarias del servicio. De hecho, ella misma lo ha hecho, como confirmó ayer en la Ser. Ha pasado de ofrecer a las empresas de la limpieza quitar los descuentos por no cumplir con la calidad exigida, como muestra de buena fe, a enseñar el colmillo. No sólo pidió más quejas a los madrileños –que son uno de los indicadores de calidad–, sino que también advirtió a las empresas: o cambian de actitud o no descarta remunicipalizar el servicio.

Este cambio de actitud obedece al fracaso de las limpiezas extraordinarias por barrios que se pusieron en marcha hace un mes para retirar la suciedad acumulada en las calles que, según confesó ayer, no han servido ya que «en cuatro días vuelven a estar sucias o aparecen otros focos», pese a que ya se ha actuado en 18 localizaciones. «O las empresas cambian de actitud o habrá que buscar una manera de ir a una actuación contractual que nos permita limpiar al propio Ayuntamiento», afirmó, y detalló que ya se ha puesto en contacto con otras ciudades europeas que han remunicipalizado el servicio, como Berlín.

De hecho, según explicaron fuentes del Área de Medio Ambiente y Movilidad, actualmente se está revisando minuciosamente el contrato de concesión del servicio de limpieza, que se firmó en 2013 y tiene una vigencia de ocho años más otros dos de prórroga, para ver cómo se puede exigir a las empresas que cumplan con lo establecido en los pliegos de condiciones. Todo ello con coste 0 para los madrileños porque, según aseguraron desde el área que dirige Inés Sabanés, «no está sobre la mesa de negociación dar más dinero a las empresas. No es una alternativa».

Sin embargo, fuentes conocedoras del contrato y los sindicatos del sector señalan que no hay otra opción si de verdad se quiere mantener la ciudad limpia. «Faltan 4.000 trabajadores y para retirar el ERTE y contratar a más hace falta dinero, todo lo demás son milagros», consideró Moisés Torres, secretario de la Federación de Servicios de UGT-Madrid. Es más, fuentes conocedoras del contrato de prestación sostienen que es muy difícil ratificar un incumplimiento grave y reiterado de la concesión y así rescindir el contrato y recuperar el servicio para que lo preste directamente el Ayuntamiento de Madrid. Es más, si fuese rescindido de forma unilateral, las empresas podrían reclamar el lucro cesante.

Asimismo, los representantes de los trabajadores de la limpieza de UGT y de CC OO se mostraron más que cautelosos respecto a la remunicipalización del servicio. «Queremos saber cómo se va a hacer y en qué condiciones económicas, laborales y de capacidad contractual», exigió el portavoz de la Federación de Construcción y Servicios de CC OO, Félix Carrión, puesto que hay experiencias como la de Alcobendas, que recuperó su servicio de limpieza pero manteniendo el convenio que marcaba el sector y la de Rivas Vaciamadrid, cuyos trabajadores estaban sujetos al Real Decreto del Funcionariado mediante el cual se les podían aplicar recortes y reducciones de sueldo.

Carrión señala a su vez que los 8.000 trabajadores que prestan el servicio no pueden ser funcionarios sin haber pasado un examen por lo que entienden que tendrán que ser contratados por una empresa pública municipal o una fórmula mixta. «Si lo quieren hacer, adelante, pero queremos mantener la capacidad de negociación y no perder sueldo, ni condiciones laborales», añadió. Desde UGT recordaron que lo primero es retirar el ERTE que afecta a la plantilla tras 17 días de huelga salvaje y una durísima negociación en otoño de 2013.

En principio, la intención del consistorio pasa por recuperar a todos los empleados de limpieza a tiempo completo, cuestión que, según explicó la portavoz del Ayuntamiento, Rita Maestre, es clave para que las calles se limpien todos los días. Para ello, Maestre aseguró que «se van a poner todos los recursos necesarios para que eso se materialice». Eso sí, sin que cueste más dinero a los madrileños aunque las cuentas lo permitan. La regidora madrileña confirmó ayer que no será necesaria una reestructuración de la deuda municipal –que se seguirá pagando al mismo ritmo– ya que «va a haber dinero para hacer muchas cosas», según le había explicado el delegado de Economía y Hacienda, Carlos Sánchez Mato.

«El nuevo equipo de Gobierno municipal tiene muy buenas intenciones pero no han definido un plan estratégico para la limpieza ni para la recogida de basuras», señaló Torres, que añadió que, le parece «un poco extraño» que Carmena esté presionando a las concesionarias de limpieza, cuyo contrato tiene aún ocho años por delante, mientras que ha pedido a las mismas empresas que prorroguen un año más la concesión de la recogida de basuras que expira dentro de unas semanas.

De hecho, tanto el representante de UGT como el de CC OO se quejaron de que no les han presentado ningún proyecto ni para mejorar la limpieza –como reclamaban durante la campaña electoral–, ni para recuperar la prestación de la recogida de basuras, que fue una de las propuestas estrellas de Manuela Carmena. «Todos los partidos políticos se reunieron con nosotros, pero nadie ha puesto un proyecto sobre la mesa», aseguró Carrión. «No basta con la crítica, tienen que dar opciones», añadió Torres. Ambos criticaron también que no se les ha consultado respecto a los pliegos del inminente contrato de recogida de basura ni sobre la limpieza.

Tecnología para conocer en tiempo real el estado de las calles

La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, visitó recientemente la Academia Wayra, la aceleradora de startups digitales de Telefónica en la que ayudan a impulsar iniciativas empresariales en el campo de las nuevas tecnologías. Al respecto, Carmena se mostró interesada en todas las propuestas que contribuyan a impulsar el tipo de Ciudad Inteligente que proyecta para Madrid, para solucionar los problemas de los madrileños. Así, consideró que sería muy importante contar con tecnología que permitiese conocer en tiempo real el estado de las calles y planificar convenientemente la limpieza, así como otra que permita hacer un seguimiento del estado de la pobreza y malnutrición, especialmente de la infancia, que le permita seguir el impacto de las iniciativas que está poniendo en marcha.

El chalé de Zahara: periodismo del escándalo

La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, se refirió ayer en la Ser a las fotografías publicadas en LA RAZÓN de sus vacaciones en la playa gaditana de Zahara de los Atunes, cuestión que calificó como «periodismo del escándalo». La regidora reconoció que le da «un poco de miedo» el pensar que el periodismo de escándalo que hubo en su día en el mundo del corazón se esté trasladando ahora a la política. Carmena explicó que se sorprendió al ver las fotografías y que cree «mucho en la prensa», por lo que manifestó no entender «que un periodista pueda lanzar una información personal de nadie si ni siquiera haber cogido el teléfono». «Creo que no es bueno para la sociedad –que se haga periodismo del escándalo con los políticos– pero también es malo para el periodismo», apuntó.