Cines, el séptimo arte inicia la remontada

Por primera vez en diez años sube el número de cines en la Comunidad. Casi 20 millones de espectadores pasaron por las 490 salas de la región en el último año, 900.000 más que el anterior; un ascenso que se traduce en un aumento en la recaudación de 4,5 millones

La industria del cine en Madrid se recupera con paso lento pero seguro. Aunque los números de recaudación y espectadores aún están lejos de las cifras que alcanzaron en 2007, justo antes del estallido de la crisis económica, los datos dan fe de la recuperación del sector en la comunidad. Madrid es también líder en la salida a flote de las salas de cine a nivel nacional. En comparación con 2015, en 2016 se registraron cuatro cines más en la región, y aumentó en nueve el número de salas. Esa tendencia también se traduce en menos butacas vacías. Casi 20 millones de madrileños fueron al cine en 2016, 900.000 más que en el año anterior. En cuestión de dinero, la caja se superó en más de cuatro millones de euros, en concreto en 4.367.902.

Las cifras invitan al optimismo, en especial, porque se trata de un cambio de tendencia que parece que se consolida. El número de espectadores en las salas madrileñas ha crecido ininterrumpidamente desde 2013, que fue el año con el dato más bajo de la última década: menos de 16 millones de asistentes, una circunstancia que se reflejó en la recaudación más escasa de los últimos años (112 millones de euros). Por aquel entonces estaban en funcionamiento 76 cines en toda la región, una infraestructura cultural que sumaba 521 salas

Si bien el progreso anima a pensar en positivo, los números aún no se acercan a los de hace una década. Según datos del Ministerio de Cultura, con una diferencia de apenas diez años, las salas de Madrid acogieron en 2016 a 4,5 millones de espectadores menos que en 2007, y los ingresos descendieron en más de 13 millones de euros. En 2007, en la región había 91 cines, por los 73 actuales. Además, 2015 fue el año con menos proyectores encendidos: tan solo 481, 135 menos que antes del inicio de la dura crisis del sector.

Con todo, la Comunidad de Madrid sigue siendo la referencia del sector en el conjunto nacional. En la actualidad, la región se sitúa a la cabeza de provincias españolas por porcentaje de espectadores y de recaudación de las salas, ambos con un 20 por ciento. Madrid también es la provincia con más número de cines y de salas. Por comunidades autónomas, en la lista solo aparece por encima Cataluña.

Aunque el nivel de recaudación y de espectadores ha sufrido altibajos en la última década, el número de largometrajes que se han exhibido entre 2016 y 2007 en los cines regionales se ha mantenido más o menos constante. El pico de títulos se registró en 2008, cuando se pudieron ver hasta 951 películas distintas. Según datos de 2016, el año pasado se proyectaron en Madrid hasta 858 largometrajes diferentes.

Lo que parece claro es que el futuro del cine no pasa por la zona centro. La tendencia en los últimos años es que la gente se desplace a las afueras para ver los estrenos con palomitas y en pantalla grande, en gran parte gracias al efecto llamada de los centros comerciales. Del total de la recaudación de 2016, apenas la mitad se quedó en las salas de la capital. Juan Ramón Gómez Fabra, administrador de los ya desaparecidos cines Palafox, explicó en el momento en que dijo adiós a las míticas salas, el segundo cine más grande de la capital, que esta tendencia se debe a que «los cambios estructurales para adaptarse a las nuevas tecnologías son más sencillos en los centros comerciales que en las salas antiguas».

El declive de los cines «de toda la vida» y la hegemonía de las grandes empresas también lo reafirman los números. Hoy en día, en Madrid existe tan solo una veintena de cines con sólo una sala, mientras que los que ofrecen ocho o más títulos distintos en su cartelera ascienden a 25 (más de un tercio del total).

Las iniciativas para reactivar el sector se han sucedido en los últimos tiempos, ya que se trata de una industria que los consumidores consideran «cara». A falta de que se haga efectivo el anunciado descenso del IVA cultural (del 21 al diez por ciento) en 2018, muchos cinéfilos esperan a las ansiadas promociones especiales para ver las películas en pantalla grande. Una de las iniciativas que ha tenido más acogida es la Fiesta del Cine, un evento bianual que esta misma semana dejó atrás su decimotercera edición con unos números por debajo de convocatorias anteriores.

el cine español, en alza

En Madrid, 379.821 personas fueron al cine entre el lunes y el miércoles. En comparación con los números del otoño pasado, el descenso de asistentes se cifra en un 34 por ciento. Los organizadores achacan este bache a la ausencia en la cartelera de un título de gran calado entre la audiencia. En 2016, el certamen coincidió con la proyección de «Un monstruo viene a verme», que a nivel nacional consiguió 900.000 espectadores sólo durante los tres días con entradas a la venta en taquilla por 2,9 euros. En esta ocasión, dos producciones españolas se cuelan entre las películas más vistas, una lista compuesta por «Annabelle: Creation», «Blade Runner 2049», «Toc toc», «El muñeco de nieve» y «La llamada». Con todo, Madrid ha sido la región con más asistentes en esta edición.