Navidad

Claret, ganador del IV Concurso de Villancicos LA RAZÓN

El ambiente de la final, celebrada un año más en el Auditorio Nacional, fue entrañable. Familias enteras acudieron a apoyar a los suyos. Actuaciones preparadas con esfuerzo e ilusión que hicieron reñida la deliberación. Claret, Virgen de Mirasierra y Vallmont coparon el podio

Todos los participantes formaron un coro espontáneo para interpretar dos villancicos populares mientras el jurado deliberaba
Todos los participantes formaron un coro espontáneo para interpretar dos villancicos populares mientras el jurado deliberabalarazon

El ambiente de la final, celebrada un año más en el Auditorio Nacional, fue entrañable. Familias enteras acudieron a apoyar a los suyos. Actuaciones preparadas con esfuerzo e ilusión que hicieron reñida la deliberación. Claret, Virgen de Mirasierra y Vallmont coparon el podio

Nervios, muchos nervios, flotaban en el ambiente en el Auditorio Nacional, desde una hora antes de que se iniciara la final del IV Concurso de Villancicos LA RAZÓN, que tuvo lugar el pasado sábado por la mañana. Seis colegios de la Comunidad de Madrid compitieron tras superar la disputada fase de clasificación.

De estos centros, tres de ellos se hicieron un hueco a través de la elección de un jurado, mientras que los otros tres lo hicieron gracias a las votaciones recibidas en los vídeos que habían subido a la website que LA RAZÓN había preparado para la ocasión. Las participantes del Colegio de Nuestra Señora de las Delicias estaban «segurísimas de que estaban allí gracias a los votos, ya que habían movilizado a todo el colegio para que las apoyaran a través de internet». Roberto Brasero fue el maestro de ceremonias, como viene ocurriendo desde la primera edición. Tras dar la bienvenida a todos, pidió especial respeto por parte de los padres hacia los niños, y a los niños, que permanecieran en silencio cuando cantaran sus compañeros, pero que lo dieran todo cuando les tocara a ellos. «Escuchad bien los villancicos con los oídos y con el corazón, que es con lo que se escuchan las emociones», aconsejó. Brasero remarcó que «el mejor tiempo hoy no es el de la tele; el mejor tiempo hoy es el que viviremos aquí durante las próximas horas. ¡Que dé comienzo la Navidad!».

Antes de subir al escenario, todos coincidían en lo mismo: «Hemos venido a pasárnoslo bien». «Estar aquí ya es un premio, he venido a ver conciertos y mi profesor ha cantado sobre ese escenario», decía una de las chicas del CEIP Tirso de Molina. Una de las pequeñas del Colegio Bilingüe Vallmont repetía que incluso estaba haciendo amigos de otros centros.

Instrumentos para las aulas

Después de las seis actuaciones, llegó la hora de decidir. El jurado estaba compuesto por Gema Pajares, jefa de Sección de Cultura de LA RAZÓN; Francisco Hiraldo, secretario del Consejo de Administración de LA RAZÓN; Juan Carlos Partido, director de División de Unión Musical; Javier Martí, presidente de la Fundación Excelentia, y Rafael López, director de marketing de nuestro periódico. Mientras se producía la deliberación, todos los participantes cantaron juntos «Los peces en el río». Hubo dos bises por petición popular, «Campana sobre Campana» y «All I want for Christmas is you».

Gracias a Unión Musical (UME), la plataforma para comprar instrumentos musicales on-line más importante de la Península y que también cuenta con tiendas físicas, los colegios recibieron un lote de instrumentos para sus aulas. Antonio Merino, director de Educachef, empresa que promueve actividades extraescolares y clases de cocina, alimentación saludable o recetas para niños, y Premio Nacional Gastronómico, obsequió a cada uno de los colegios con una jornada de hábitos saludables. Asimismo, todos los centros recibieron una cesta de Navidad por cortesía de Martí.

El Colegio Claret consiguió hacerse con un primer puesto muy disputado. Los 23 alumnos de 2º de Primaria, los concursantes más pequeños, conquistaron a todos con su «En tus manos está la Navidad», una versión del tema «Go Now», de la banda sonora de la película «Sing Street». Resaltaba un bonito mensaje: «Tú tienes en tus manos el poder cambiar, tú tienes en tus manos la Navidad». Ana Fernández, una de las chicas del grupo, indicó divertida que «habían ensayado muchísimo para ganar». Todos los niños recibieron una bolsa con diferentes regalos como una tarjeta de juego de BadlandGames, Kinder Bueno y Kinder Chocolate cortesía de la empresa Ferrero Ibérica, diferentes productos de Coca-Cola y un robot Zowi de la firma BQ. Alberto Valero, director de BQ Educación, indicó: «Nos encantan la alegría, el talento y el entusiasmo que los niños han demostrado en este certamen. Desde BQ queremos que dediquen esa misma energía a descubrir la robótica y programación con Zowi. Es más, queremos que den un paso más y aprendan a disfrutar creando su propia tecnología. Al final, esta energía y entusiasmo son el motor de la sociedad, y si podemos ayudar a que cultiven estos valores, seguro que, desde el ámbito de la tecnología, habremos puesto nuestro granito de arena para mejorar el mundo».

El segundo puesto fue para el Virgen de Mirasierra, una plata que supo a oro. En este caso, los alumnos de 6º interpretaron «Su mirada especial», un villancico compuesto por su profesor Víctor Gorrindo. Antes de actuar, Claudia Ledo hizo referencia a la «alegría por estar ahí y la necesidad de disfrutarlo al máximo». A pesar de los nervios, en el escenario se mostraron seguros y siempre con una sonrisa. Todos recibieron un kit de NGS, tienda on-line de tecnología, electrónica de consumo y smartphones NGS; tarjetas de juego de la distribuidora de videojuegos BadLandGames, y un juguete por cortesía de Imaginarium, entre otros.

El Colegio Vallmont consiguió hacerse con el tercer puesto del concurso. Apostó por un villancico en inglés, «Carol of the bells». Cuando los alumnos subieron al estrado dejaron a todos boquiabiertos con su «mannequin challenge». Eligieron este villancico ucraniano por el mensaje de esperanza y alegría que transmite.

El cuarto puesto fue para el Colegio Nuestra Señora de las Delicias, con «Es mi destino». Por otra parte, el CEIP Tirso de Molina interpretó a capela «Ha llegado la Navidad». El sexto lugar recayó en el Colegio San Agustín y su «Ya vienen los Reyes Magos».

Todos los colegios recibieron una copa y una placa conmemorativa por cortesía de Ferposán, empresa fundada en 1977 y especializada en la fabricación de trofeos. Los organizadores agradecieron a los patrocinadores su implicación. Entre ellos, CaixaBank; Murprotec, empresa experta en cualquier tratamiento antihumedad, y la agencia de medios Gesmedia.También colaboraron Coca-Cola, Cáritas o Bandai, distribuidor de algunas de las familias de juguetes más populares de todos los tiempos como Power Rangers, Pocoyó, o Pokémon.

«El esfuerzo se refleja en la calidad»

Aunque fueron seis los colegios que consiguieron llegar a la final, más de 40 de toda la Comunidad de Madrid han participado en el IV Concurso Escolar de Villancicos LA RAZÓN. A pesar de que otros años se había visto una clara influencia extranjera en las melodías propuestas, esta vez hay que destacar una vuelta tanto a los orígenes así como a las letras en castellano. Lo demuestra, por ejemplo, la interpretación de «A la huella, a la huella», del Colegio Bristol. O «En brazos de una doncella», del Colegio Virgen de la Vega. Lo más relevante es la gran calidad tanto de las interpretaciones como de los vídeos presentados al concurso. Varios colegios han creado sus propios temas navideños a partir de las canciones de la popular banda colombiana Morat. Entre ellas destaca la del Colegio Tajamar, «Caminito de Belén» o la del Colegio Montpellier, «Una gran sonrisa ilumina el firmamento». Con una ejecución magistral, los chicos del Colegio Monte Tabor Schoenstatt se atrevieron con una versión en castellano y navideña de «Vois sur ton chemin», de los Chicos del Coro. Los alumnos del Colegio Los Tilos presentaron un «Aleluya», basado en la canción homónima de Leonard Cohen. «Vuela, vuela Navidad» fue el villancico del Colegio Ponce de León, muy especial ya que estaba destinada tanto a sordos como oyentes, al estar interpretada tanto de manera vocal como en lenguaje de signos.