Acoso sexual

Detenido un menor por «sextorsión»

La Policía ha arrestado por un delito contra la libertad sexual, amenazas y coacciones a un joven que quería distribuir vídeos sexuales de otra menor de edad con la que ligó por internet.

La Policía recomienda a los jóvenes no enviar nunca estas imágenes, ni siquiera a amigos, porque ante cualquier enfado pueden acabar utilizándolas como medida de presión y colgarlas en las redes
La Policía recomienda a los jóvenes no enviar nunca estas imágenes, ni siquiera a amigos, porque ante cualquier enfado pueden acabar utilizándolas como medida de presión y colgarlas en las redeslarazon

La Policía ha arrestado por un delito contra la libertad sexual, amenazas y coacciones a un joven que quería distribuir vídeos sexuales de otra menor de edad con la que ligó por internet.

Los implicados son menores de edad por lo que no ha trascendido apenas información sobre los hechos. El caso se repite más de lo que le consta a la Policía ya que, al igual que ocurre con otros delitos «sensibles», quedan en una especie de limbo porque, por vergüenza, la víctima suele guardar silencio. Por eso este caso es un ejemplo para que las víctimas –sobre todo las menores de edad– se den cuenta de la importancia de contárselo a un adulto y un aviso a navegantes para quienes crean que este tipo de conductas quedan impunes. Todo comenzó como un juego entre un chico y una chica, menores de edad ambos, que comenzaron a ligar por una aplicación de mensajería instantánea. Iniciaron el contacto en noviembre y comenzaron a intercambiar, de forma voluntaria, fotos eróticas. Después, pasaron a los vídeos y, un mes más tarde, el joven quería seguir recibiendo más videos de contenido sexual. Sin embargo, la joven decidió que ya no quería seguir con ese juego y se negó. Él trató de convencerla mediante el típico chantaje más habitual en estos casos: difundiría en las redes sociales todo el material pornográfico que tenía en su poder, un delito que la Policía llama «sextorsión». Lejos de sucumbir a las amenazas, la chica reaccionó de la mejor manera posible y acudió, junto a sus padres, a Comisaría. Apenas dos meses después, los investigadores lograron identificar al titular del teléfono a través del cual se habían enviado los mensajes. La investigación culminó con la detención del chico como supuesto autor de un delito contra la libertad sexual, amenazas y coacciones. Dado su condición de menor de edad, según establece la ley, fue puesto a disposición de la Fiscalía de Menores. Desde la Jefatura Superior de Policía de Madrid, quisieron recordar ayer algunos consejos para las víctimas más vulnerables de «sextorsión».

La Policía aconseja no hacerse fotos de carácter erótico y compartirlas. En el caso de los menores puede ocasionar situaciones de chantaje o ciberacoso sexual, o acoso en el entorno escolar. Además, recuerdan que reenviar este tipo de imágenes es delito. Mejor, envíelo, de forma privada, a la dirección de correo eléctrico: denuncias.pornografia.infantil@policia.es. También recomiendan a los padres que si su hijo le informa de situaciones que le han hecho sentir incómodo (sexuales) deben denunciarlo.