La «okupa nazi» se hace ahora con la antigua sede del NO-DO

El grupo ultraderechista ya reparte alimentos «sólo a españoles» desde el edificio de Patrimonio Nacional de Joaquín Costa 43, almacén del noticiero franquista.

«De nuevo tomamos otro edificio, ya dijimos que no podrían con nosotros». Con este texto y la imagen adjunta de un edificio con la bandera del colectivo izada en un mástil anunciaba el grupo ultraderechista Hogar Social desde una cuenta no oficial su nueva okupación. Esta vez, y ya van cuatro, se han instalado se han instalado en un edificio estatal, que pertenece a Patrimonio Nacional y que está situado en el número 43 de la calle Joaquín Costa, esquina con Velázquez. Curiosamente, el inmueble de la Filmoteca Española estuvo cedido muchos años a RTVE y guardaba los originales del noticiero franquista No-Do. Hace un par de años, sin embargo, RTVE devolvió la cesión a Patrimonio Nacional, según confirmaron ayer fuentes del ente público. El edificio se encontraba, por tanto, vacío.

El pasado lunes, los activistas del grupo Hogar Social, que prestan ayuda sólo a españoles con dificultades económicas, entraron en el inmueble y ayer ya realizaron su primer reparto de alimentos desde la nueva sede, según explicó a este diario Melisa, una portavoz de los ultraderechistas. «Hemos tenido que avisar a la gente de que viniera aquí a recoger la comida porque había muchos alimentos, como carne y verdura, que nos corría prisa dar porque se iban a poner malos». Durante estos días han estado limpiando y acondicionando parte del edificio (cuenta con 4.500 metros cuadrados) para dar cobijo a la veintena de personas sin recursos que pernoctan allí. Según Melisa, desde que colectivo nació hace algo más de un año en el distrito de Tetuán, ayudan a unas 260 familias de forma continua y unas 20 duermen ahora en este edificio. Hasta el lunes pasado habían estado instalados en el Paseo del Prado.

Y es que fue hace un par de semanas cuando el colectivo se hizo más conocido. Un juzgado ordenó el desalojo de su última sede –en el edificio que fue de Fórum Filatélico de José Abascal– y los okupas ultraderechistas se fueron a pernoctar a las puertas del Ayuntamiento, al Palacio de Cibeles. Allí había ya otro colectivo asentado, pero de ideología contraria, que protestaba desde este verano por la aprobación de la llamada «Ley Mordaza». Tras varios días de tensión institucional entre el Consistorio y la Delegación del Gobierno acerca de qué Policía (si Municipal y, por tanto, tarea de Manuela Carmena, o Nacional y, entonces, responsabilidad de Concepción Dancausa) los debía echar de Cibeles.

Finalmente fue la Policía Municipal quien la madrugada del 25 de septiembre desalojó a ambos colectivos. Los ultraderechistas, por su parte, se instalaron a pocos metros de allí, en el Paseo del Prado, hasta que el pasado lunes okuparon la sede donde se guardaban las cintas originales del noticiero franquista. «El Samur Social sólo ofreció ayuda a los que eran de Madrid y, de todas formas, les proponía albergues municipales para que durmieran hacinados y en literas. Nosostros buscamos una solución digna», argumenta Melisa, quien quiere puntualizar que, a diferencia de los okupas de ultraizquierda, «que entran en edificios de particulares», ellos lo hacen en inmuebles propiedad del Estado. «Este edificio lleva tiempo abandonado y es del Estado. No vemos mal que gente española sin recursos se quede aquí a dormir hasta que resuelvan su situación porque no tiene dónde ir».

Patrimonio Nacional, dependiente del Ministerio de Educación y Cultura, deberá ahora interponer una denuncia e iniciar así los trámites ordinarios para que la autoridad judicial ordene el desalojo de este colectivo.