Barcelona

Rentabilizar y controlar el turismo, objetivos clave de los nuevos gobiernos

La moratoria en la concesión de licencias turísticas en Barcelona y la posibilidad de implantar una tasa al turismo en el Ayuntamiento de Madrid y de recuperarla en Baleares muestran el interés de los nuevos gobiernos por controlar el flujo de visitantes y aumentar el beneficio que pueden obtener sus territorios. El Ayuntamiento de Madrid, gobernado por Ahora Madrid, se ha sumado hoy a un enconado debate abierto en Barcelona sobre la gestión de un sector que supone casi el 11 % de la riqueza nacional y que también afecta a Canarias y Baleares, principales focos de atracción de visitantes.

El Gobierno de Manuela Carmena estudia la implantación en septiembre de una tasa al turismo (y otra a los cajeros automáticos), una iniciativa que ya ha encontrado la oposición del PP y del Gobierno, cuyo presidente, Mariano Rajoy, ha pedido “prudencia extrema” para no dañar un sector clave.

Una medida similar a la que se pretende recuperar en Baleares, donde el Govern, formado por el PSOE y por Més, negocia ya con la patronal hotelera un cambio legal para cobrar a los turistas la denominada “ecotasa”, que ya estuvo en vigor durante los gobiernos del socialista Francesc Antich.

El deseo del Govern balear es que ese impuesto se cobre en aeropuertos y puertos o incorporarlo a los precios de los billetes y los paquetes turísticos, pero ante las dificultades legales que acarrearía es posible que finalmente se aplique en los alojamientos turísticos.

La propuesta no gusta a los empresarios del sector, aunque ha despertado menos revuelo que la decisión de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, de congelar un año la concesión de licencias de todo tipo de alojamientos turísticos en la ciudad para hacer un plan especial de un sector que supone el 12 % del PIB de la ciudad.

Colau pretende abrir un debate tranquilo sobre uno de los principales activos de la ciudad para lograr que sea sostenible y evitar desequilibrios, pero la moratoria, que afecta a una treintena de proyectos hoteleros en marcha, ha cosechado la crítica de los empresarios, de la oposición y del Gobierno central.

El debate sobre la moratoria turística en Canarias se ha reabierto en Canarias con las declaraciones que hizo ayer su nuevo presidente, Fernando Clavijo, partidario de cambiar el modelo turístico de las islas para que lleguen menos turistas pero dejen más dinero en el territorio.

La patronal del sector ha confiado en que ese mensaje no implique una apuesta por “parar de nuevo” el crecimiento del sector con una nueva moratoria a la construcción de hoteles.

Atraer turismo de calidad aparece también en los retos de la Agencia Valenciana de Turismo, que pretende mejorar la competitividad del sector y la formación de sus trabajadores para competir no en precios sino en calidad, imaginación y creatividad.

También en Navarra el acuerdo programático para la conformación de un nuevo gobierno apoyado por Geroa Bai, EH Bildu, Podemos e I-E prevé un nuevo Plan Estratégico de Turismo, mientras que en San Sebastián el nuevo Ejecutivo del PNV y el PSE ha optado por poner en marcha un “plan de choque” de limpieza para devolver los niveles de calidad previos al gobierno de Bildu