Cerca de 40 heridos, dos de ellos graves, en el choque de un tren en Alcalá

Un convoy de Cercanías de la línea C-7 que tenía dos alturas colisionó ayer contra la topera de la estación por un posible fallo en el sistema mecánico. De los heridos, dos resultaron graves, once moderados y 26 leves. El conductor del tren dio negativo en los test de alcoholemia y drogas.

Un tren de Cercanías de la línea C-7 que realizaba el recorrido Atocha-Alcalá sufrió ayer una colisión contra la topera de fin de vía en la estación de Renfe de Alcalá de Henares por un posible fallo mecánico. Eran las 15:37 horas cuando el tren, de dos alturas, sufrió la colisión que provocó heridos de diversa consideración. Los topes son dos barras que se sitúan al final de la vía para amortiguar un poco el choque, en caso de que se produzca algún problema como el que tuvo lugar ayer. Enseguida se trasladaron al lugar varios efectivos de Emergencias-Comunidad de Madrid. Los sanitarios del Summa atendieron a 39 personas, dos de ellos graves, y once moderados, según informó ayer un portavoz de Emergencias-Comunidad de Madrid. Los atendidos más graves fueron trasladados a los hospitales La Princesa y Príncipe de Asturias de Alcalá de Henares. Presentaban un posible neumotórax y una fractura de cadera, respectivamente. Se trata de un varón de 45 años, el primero (el que fue trasladado a La Princesa, en Madrid capital) y un barón de 80 años, que tenía una fractura de cadera y le valorarán en profundidad en el hospital de la localidad. Los once heridos moderados fueron trasladados a hospitales de la zona del corredor del Henares, según el jefe de guardia del Summa, Luis Pardillos. El resto (26 personas) fueron atendidos por el personal sanitario pero todos estaban leves. Lo más común fueron contusiones de distinta consideración y ataques de ansiedad. Fueron dados de alta en el lugar. Por su parte, los Bomberos de la Comunidad de Madrid se dedicaron a facilitar las labores a los sanitarios del Summa y les ayudaron en tareas de acceso al convoy siniestrado, para abrir puertas y evacuar heridos.

Aunque en un primer momento se pensó que el accidente podía haber sido mucho más grave, finalmente el balance fue menor de lo esperado. De hecho, Emergencias-Comunidad de Madrid activó todos los recursos disponibles. En total fueron al lugar cinco UVI móviles, quince ambulancias y soporte vital básico y hasta el helicóptero de Summa se desplazó al lugar en prevención aunque, afortunadamente, no fue necesaria su intervención. Tampoco hizo falta instalar un hospital de campaña porque en el andén, donde fueron atendidos muchos heridos, ya estaban cubiertos, según explicó ayer una portavoz del Summa.

En una nota de prensa, Renfe explicó que el accidente se produjo cuando «el tren estaba parando en Alcalá, estación fin de trayecto, a muy baja velocidad, cuando ha colisionado contra la topera de la vía». Sin embargo, el hecho de que muchos usuarios viajaran de pie, provocó caídas y algunos se precipitaron por las escaleras porque el tren era de dos alturas. De acuerdo con los protocolos para casos de accidentes, Renfe movilizó a los servicios sanitarios y de seguridad en cuanto se produjo el siniestro.

Mientras los servicios sanitarios actuaban, Renfe informaba de que el servicio habitual de Cercanías en las líneas C-7 y C-2 (que comunican Atocha con Alcalá y Guadalajara) no se había visto interrumpido, aunque los trenes circularon con una demora media de 8 minutos.

Además, la empresa pública, ha abierto una investigación para conocer las causas del accidente. En este sentido, las primeras pesquisas apuntan a un fallo en el sistema de frenado del convoy aunque no se descarta fallo humano. El conductor del tren dio negativo en los test de drogas y alcohol que se le practicaron tras el accidente, según señaló el alcalde de la localidad, Javier Rodríguez Palacios. En declaraciones a Europa Press, el primer edil explicó que el Summa 112 se había desplazado rápidamente al lugar y estuvieron trabajando en la zona, que se derivaron ya a varios heridos al hospital mientras otros continuaban en observación. El regidor señaló que el conductor dio negativo en drogas y alcohol, una prueba practicada por parte de la Policía Local de Alcalá, y que la información de esta prueba se le remitirá a Renfe para determinar en su investigación si el incidente se debe a causas técnicas o humanas. Además, calificó de «fatalidad» que en este momento los viajeros iban de pie (el tren ya estaba en la estación por lo que se disponían a bajar), sin agarrarse a las barras, porque se cayeron desde el segundo piso.

Al lugar también se desplazó el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, que aseguró que la Comisión de Investigación de Accidentes Ferroviarios (CIAF) ya había comenzado a recabar los primeros datos para esclarecer las causas del siniestro. El titular de Fomento agradeció «muy sinceramente» la labor de los cuerpos que han intervenido en el suceso. También el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, expresaron en Twitter su deseo de que los afectados se recuperaran pronto.

Las mismas fuentes han precisado que el accidente no ha afectado al servicio de trenes de Cercanías, dado que el siniestro ha ocurrido en una vía de fondo de saco.

Alrededor de cuarenta personas han recibido asistencia sanitaria del Servicio de Urgencia Médica de Madrid (Summa), la mayoría por crisis de ansiedad y contusiones, aunque por el momento se desconoce si alguna ha sufrido heridas de carácter grave.

El conductor del tren ha dado negativo en los test de drogas y alcohol que se le han practicado tras el accidente, según ha señalado el alcalde de la localidad, Javier Rodríguez Palacios.

En declaraciones a Europa Press, el alcalde ha explicado que el SUMMA 112 se ha desplazado rápidamente al lugar y está trabajando en la zona y que se han derivado ya a varios heridos al hospital mientras otros siguen en observación.

El alcalde ha explicado que, según las primeras informaciones, al entrar en la estación el vehículo, un articulado de dos plantas, y tratar de frenar ha sufrido un golpe contra la topera que no ha sido a gran velocidad. No obstante, al haber personas que viajaban de pie, la colisión les ha afectado y algunos han caído por las escaleras.

El regidor ha señalado que el conductor no ha dado positivo en drogas y alcohol y que la información de esta prueba se le remitirá a Renfe para determinar en su investigación si el incidente se debe a causas técnicas o humanas.

Javier Rodríguez Palacios ha expresado su preocupación por los afectados en el accidente, la mayoría vecinos de Alcalá, y ha puesto en valor la "profesionalidad"de la Policía Nacional, la Policía Local, los bomberos de la Comunidad de Madrid y los efectivos de Protección Civil, que se han desplazado rápidamente a la zona tras conocer lo ocurrido.

A su vez, el alcalde también ha destacado la labor del personal de Renfe y Adif en la estación, que trabajan para que el incidente no afecte a la circulación de trenes de Cercanías, que no se ha suspendido y que circulan por una sola vía.