Ahora Madrid

La Justicia paraliza la retirada de la calle Millán Astray

Carmena no podrá cambiar las placas hasta que el juez resuelva si la Ley de Memoria Histórica puede aplicarse para el fundador de la Legión. El juez estima los perjuicios que ocasionaría a los vecinos.

Cartel de la calle Millán Astray
Cartel de la calle Millán Astraylarazon

Carmena no podrá cambiar las placas hasta que el juez resuelva si la Ley de Memoria Histórica puede aplicarse para el fundador de la Legión. El juez estima los perjuicios que ocasionaría a los vecinos.

La Justicia ha parado los pies a la alcaldesa de Madrid en su cruzada por cambiar 52 calles consideradas franquistas por Comisionado de la Memoria Histórica nombrado por la propia Manuela Carmena. El Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 7 de Madrid ha paralizado «toda actuación o trámite tendente a cambiar de denominación de la calle del General Millán Astray» como medida cautelar hasta que se resuelva el contencioso administrativo que pide la anulación del cambio de placas del fundador de la Legión aprobado por el Pleno del Ayuntamiento el pasado mes de abril.

Las placas con el nombre sustitutivo de Maestra Justa Freire deberán esperar en los almacenes municipales, puesto que el juez toma esta decisión al ponderar y hacer valer los «perjuicios» que a las administraciones públicas, así como a los comercios y vecinos «les causaría el cambio inmediato de la denominación de la calle».

El auto no cree que –como defendió el Ayuntamiento– esta suspensión cautelar pueda provocar una «grave disfunción en la organización del consistorio»
–que ya había realizado el cambio de calles en muchas de sus bases de datos– y sí que contempla que «los particulares afectados puedan quedar seria e intensamente perjudicados» por el cambio. Y es que, el juez apunta que de no llevarse a cabo esta paralización, si se produce una «eventual sentencia estimatoria del presente recurso, conllevaría volver a la denominación primitiva, ocasionando evidentes perjuicios a los vecinos, comerciantes ciudadanos e incluso administraciones públicas, que verían cómo en un breve lapso de tiempo la calle cambiaría de denominación en dos ocasiones provocando un estado de confusión que hemos de evitar, atendidos los intereses particulares a tutelar».

El magistrado también tiene en cuenta «el gasto que a las arcas municipales se derivaría de la nueva rotulación» y la crítica de la plataforma recurrente a no haber tenido acceso «al expediente y a la posibilidad de formular alegaciones».

El auto, con fecha del 1 de agosto, acepta la legitimidad de la Plataforma como recurrente por los estatutos de la misma –en los que se describe su finalidad en la «defensa de la verdad histórica y la memoria histórica que representa la obra del General Don José Millán Astray»– y en que sólo impugna el punto del acuerdo municipal relativo al cambio de denominación de esta calle, y no extiende su recurso al resto de las 52 calles, plazas, y travesías que el Ejecutivo de Manuela Carmena va a eliminar del callejero en aplicación del dictámen que hizo el Comisionado para cumplir con la Ley de Memoria Histórica y que aprobó el Pleno.

No obstante, seguramente consciente de que esta paralización podía acordarse, la semana pasada el Ejecutivo de Carmena anunció que dejaba en suspenso el cambio de calles por «prudencia», ya que, además del recurso judicial de la Plataforma Patriótica Millán Astray, hay otras tres peticiones de medidas cautelares de suspensión por sendos recursos contencioso-administrativos interpuestos contra este proceso y que afectan a las calles de Caídos de la División Azul, Hermanos García Noblejas y del General Asensio Cabanillas.

La Plataforma Patriótica sostiene que la Ley de Memoria Histórica no es aplicable al fundador de la Legión debido a que la normativa establece medidas «en favor de quienes padecieron persecución o violencia durante la Guerra Civil y la dictadura» y sin embargo la calle Millán Astray está en el callejero desde 1924 por su trayectoria como fundador de la Legión, sus heridas de guerra en África y su participación en la contienda de Filipinas. «Es como si le quitásemos la calle a Carlos V o a Felipe II», defendió ayer Guillermo Rocafort, secretario de la Plataforma, quien además señaló que seguirá luchando «con el firme y único propósito de que la calle del General continúe en Latina, en las inmediaciones de aquel Carabanchel Bajo que en la década de 1920 creció de la mano y afecto de su benefactor como, años después, ocurrió en el Barrio de Las Latas de Vallecas».

Paralelo al proceso judicial, se han interpuesto un millar de recursos de carácter administrativo (todos ellos han sido rechazados por el consistorio) y hasta seis recursos contencioso-administrativos contra el acuerdo del Pleno. Y es que la batalla contra el cambio de calles de Carmena se libra en varios frentes. El presidente del Colectivo de Familiares Caídos en Rusia, José Luis Marín, afirmó ayer a este periódico que el Defensor del Pueblo –que ya subrayó que en este proceso no ha existido un trámite de participación de los interesados para que formulen las alegaciones– les ha dado recientemente la razón en su pelea porque el Ayuntamiento les muestre el expediente y en concreto el acta sobre el cambio de nombre a la calle Caídos de la División Azul. Asimismo Marín adelantó que se plantean intermponer una demanda por prevaricación contra «quienes hayan ordenado el cambio de nombres de calles en bases de datos municipales mientras estaban interpuestos hasta 500 recursos de reposición».