Cartagena

Detenido el autor de la amenaza de bomba en un instituto de Cartagena «por amor»

Para darle más credibilidad a su mensaje, decidió poner de fondo música árabe y finalizar el comunicado reiterando la frase «Alá es grande».

Aula del IES Isaac Peral de Cartagena
Aula del IES Isaac Peral de Cartagenalarazon

Para darle más credibilidad a su mensaje, decidió poner de fondo música árabe y finalizar el comunicado reiterando la frase «Alá es grande».

Pretendía conseguir que su ex pareja saliera antes de clase. Esos fueron los motivos que dio el hombre de 27 años de edad y de nacionalidad española, que fue detenido el pasado martes tras protagonizar el 15 de enero uno de los momentos más tensos que vivió el municipio. A través de una llamada amenazante desde un número de teléfono oculto, el autor comunicó que había colocado una bomba en el interior del Instituto Isaac Peral de Cartagena.

Para darle más credibilidad a su mensaje, decidió poner de fondo música árabe y finalizar el comunicado reiterando la frase «Alá es grande».

De inmediato, se establecieron protocolos de actuación frente a tales circunstancias, y debido a que España se encuentra en el nivel 4 de alerta terrorista, se evacuó de inmediato a las 700 personas que se encontraban en el interior del centro educativo, la mayoría adolescentes. Se paralizó el tráfico entre la plaza de Alicante y la Asamblea Regional, puntos clave en Cartagena, y se ordenó el cierre de todos los establecimientos comerciales ubicados en las inmediaciones del instituto. Tras comprobar la inexistencia de artefactos explosivos, los agentes policiales sospecharon de que la llamada tenía otro tipo de intenciones.

«Por amor»

Tras cuatro meses de investigaciones e indagaciones por parte de la Brigada Local de Información de la Policía Nacional, el pasado 3 de mayo fue detenido en Cartagena el autor de los hechos, y una vez en dependencias policiales, declaró en presencia de la letrada que su acción criminal la realizó «por amor», debido a que su ex pareja estudiaba en el centro y no podía esperar a que saliera de clase para hablar con ella. El detenido podrá ser condenado con penas de hasta tres años de prisión y multa por un delito de desordenes públicos.