La Policía Nacional destapa una estafa en pólizas de seguros a casi 400 murcianos

La compañía gestora cobraba a las víctimas pero no enviaba el dinero a la compañía aseguradora

Desde hace años, cientos de vehículos de la Región de Murcia circulan con pólizas falsas. Así lo desveló ayer la Policía Nacional tras detener a los propietarios de una correduría de seguros por haber vendido, presuntamente, entre 300 y 400 pólizas falsas a sus víctimas, después de que estas hubieran pagado las correspondientes cuotas de circulación. No era hasta que se producían accidentes de tráfico o en los rutinarios controles en la vía pública cuando los agentes constataban de su carencia de seguro.

Al parecer, la correduría entregaba a sus clientes un documento con las condiciones del seguro del coche y un recibí, pero no lo liquidaban a la respectiva compañía aseguradora. Al no hacer efectivo dicho pago, la póliza no entraba en vigor.

Los detenidos como presuntos autores de un delito de estafa continuada son un matrimonio compuesto por una mujer y un varón, de nacionalidad española, ambos con 53 años de edad. Según fuentes oficiales, se les seguía la pista desde hace dos años, periodo en el que se comenzaron a presentar denuncias en dependencias policiales por posibles estafas en la contratación de las pólizas de seguros para coches.

Estas denuncias llegaban a través de personas que se habían visto implicadas en algún accidente de tráfico o en un control rutinario, y a quienes los agentes les habían comunicado que circulaban sin un seguro en vigor. A pesar de ello, todos afirmaban haber pagado en metálico y estar en posesión de un justificante de pago. Sin embargo, a la compañía aseguradora no le constaba su liquidación.

El mismo origen

Lo que les llevó a los agentes de la Policía Nacional a iniciar la investigación fue que en todas las denuncias aparecía implicada la misma correduría de seguros, situada en una pedanía murciana bajo dos denominaciones mercantiles diferentes.

En las primeras comparecencias tramitadas, el titular de dicho local alegaba que el impago se debía a «errores administrativos, pero el Grupo de la Policía Judicial de la Comisaría del Carmen inició la investigación con el fin de esclarecer el trasfondo de las denuncias.

Tras numerosas indagaciones, la Policía Nacional pudo concluir que la correduría investigada «con un claro ánimo de lucro» cobrara a sus clientes por pólizas de seguros y, posteriormente, eludía el pago a las compañías aseguradoras.

Es decir, esta correduría emitía y cobraba por pólizas para automóviles sin que la compañía emisora llegara a formalizar dichos seguros, debido a que no eran liquidadas por la correduría, que se quedaba con la cantidad abonada por los clientes.

Los investigados en ningún momento llegaban a entregar a sus clientes copia de la póliza ya formalizada, sino solamente un resguardo de pago de una propuesta de seguro. Los clientes, por su parte, confiaban en los gestores de la correduría. La investigación continúa abierta a la espera de más casos de estafa.