Cataluña

La «tensión política» de Cataluña podría mermar el crecimiento de la Región

La patronal Croem advierte que se trata de uno de los principales socios comerciales de la Comunidad, así como de los emisores turísticos con mayor incidencia

Los empresarios alertan de las consecuencias que puede tener para la Región la tensión política que se vive en Cataluña de cara a las elecciones autonómicas del 21 de diciembre
Los empresarios alertan de las consecuencias que puede tener para la Región la tensión política que se vive en Cataluña de cara a las elecciones autonómicas del 21 de diciembrelarazon

La patronal Croem advierte que se trata de uno de los principales socios comerciales de la Comunidad, así como de los emisores turísticos con mayor incidencia

Si la tensión política que ha presidido la situación de Cataluña en los últimos meses se prolonga más allá del 21 de diciembre, «sin duda terminará teniendo un impacto en el crecimiento económico». Así lo pone de manifiesto la Confederación Regional de Organizaciones Empresariales de la Región (Croem) en el Boletín de Coyuntura Económica del tercer trimestre, donde añade que el impacto en Murcia se dejará notar «en similar medida que en el ámbito nacional» dada la intensidad de las relaciones económicas entre ambas regiones.

De hecho, algunas de las consecuencias que está teniendo actualmente, según la patronal, es el aplazamiento que está ocasionando en la tramitación parlamentaria de los Presupuestos Estatales para el próximo año, así como el hecho de que distintos organismos comiencen a revisar a la baja las previsiones de crecimiento nacional. « La Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) ha rebajado las previsiones de 2017 en dos décimas, hasta el 3 por ciento, y el Gobierno otras tres las del próximo año (del 2,6 al 2,3)».

Croem incide en que el final de la época estival ha estado marcado por la «incertidumbre» política de Cataluña, «que sin duda afectará a la evolución económica nacional». Pero por el momento, el mayor impacto se ha notado en el sector financiero, en la inversión y en el traslado de empresas que tienen su sede fiscal allí.

Algo que sin duda puede perjudicar a regiones como Murcia, como consecuencia de las «estrechas relaciones comerciales» que existen entre ambos territorios, y que se extienden al menos al intercambio de bienes, a la actividad turística, a los vínculos empresariales y a los intereses compartidos territorialmente.

Peso comercial

La patronal insiste en el Boletín de Coyuntura Económica que Cataluña destaca por ser uno de los principales socios comerciales con Murcia, siendo así el cuarto destino nacional de los productos murcianos (superado únicamente por las regiones limítrofes), y el tercer mayor proveedor.

«Entre 2010 y 2016, Murcia vendía a la comunidad catalana 688 millones al año, y le compraba 1.219», según datos del Centro Regional de Predicción Económica. Igualmente, en lo que respecta al turismo, el número de catalanes alojados en establecimientos hoteleros superó los 80.000 en 2016, tras mejorar las cifras que se alcanzaban a principios de la década actual (en torno a los 70.000).

De este modo, Cataluña representa aproximadamente el 8,5 por ciento del turismo hotelero que los españoles realizan en la Región (y algo menos del siete si se consideran también los visitantes extranjeros), un porcentaje significativo que solo es superado por madrileños, valencianos, andaluces y los propios murcianos que realizan turismo interior.