Región de Murcia

Un perro mata a su dueño cuando le iba a dar de comer

El pastor belga acompañaba a la víctima desde hace 15 años y ya antes tuvo algún brote agresivo

El pastor belga acompañaba a la víctima desde hace 15 años y ya antes tuvo algún brote agresivo

Cada día durante quince años Juan Sánchez, «el Paquito», acudía a su pequeña finca de Beniaján para cuidar y dar de comer a su fiel compañero, «Rocky», un perro pastor belga que paseaba junto él por el huerto de limoneros. Aunque en alguna ocasión ya se había mostrado agresivo, jamás imaginó que pudiera llegar a agredirle con la ferocidad que lo hizo. Poco antes de anochecer,Juan, jubilado de 70 años, fue a darle de comer a su perro. En aquel instante el animal reaccionó de manera extremadamente agresiva y se abalanzó sobre él.

Aunque en un primer momento intentó calmarle, la fuerza del can hizo que cayera al suelo. En ese momento comenzó a chillar pidiendo auxilio, pero sus gritos ya eran agonizantes. El perro había mordido su cuello. En aquel momento Abu Faye, empleado de la víctima, salió a socorrerle sin que ya pudiera hacer nada por salvarle la vida, solo consiguió, según él mismo relató, que dejara de morderle. Inmediatamente llamó a los servicios de emergencia que se presentaron en el lugar de los hechos, pero no pudieron hacer nada para salvarle la vida.

Juan, viudo , con tres hijos y dos nietas, yacía en el suelo junto a la caseta de la finca, con múltiples heridas causadas por los mordiscos del perro.

Abu, natural de Senegal, de 43 años, vivía en la casa desde hace ocho ocupándose de las tareas del campo y según relató, fue atacado por el animal en otra ocasión causándole una herida en la mano de la que todavía puede verse la cicatriz.

Cuando la Policía Local llegó a la casa intentó reducir al pastor belga sin conseguirlo. A pesar de dispararle dos veces, el animal pudo huir. Posteriormente, fue localizado y capturado vivo por dos empleados de la perrera que lo trasladaron al depósito.

Los hijos y nietos de la víctima llegaron al lugar antes de que lo hiciera el juez de guardia requerido para el levantamiento del cadáver y encontraron el cuerpo de su padre bajo un árbol en el exterior de la casa ubicada en la zona de la carretera que discurre junto al puente del Reguerón, al lado de la vía del tren.