Tribunales

La Audiencia rechaza liberar al asesino y violador del Parque de María Luisa

Imagen del juicio a Francisco Morillo Suárez
Imagen del juicio a Francisco Morillo Suárezlarazon

La Audiencia de Sevilla ha rechazado poner en libertad a Francisco Morillo Suárez, condenado a 39 años de cárcel por la violación y asesinato de una joven en el parque de María Luisa de Sevilla, debido a la “peligrosidad” del condenado y a la “extrema gravedad” de los hechos.

En un auto notificado hoy, al que ha tenido acceso Efe, la sección primera de la Audiencia rechaza la petición de libertad del condenado solicitada por su defensa y acuerda prorrogar la prisión preventiva hasta el 4 de marzo de 2031, como habían pedido la Fiscalía y la acusación particular.

En una audiencia celebrada el pasado 20 de julio, la defensa del condenado pidió su libertad mientras que se tramita el recurso de apelación que han presentado ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), en el que solicitan que la pena máxima sea de 10 años de prisión.

En una sentencia dictada en junio pasado, la Audiencia condenó al hombre a 24 años de cárcel por asesinato y 15 por agresión sexual, aunque no le condenaron a prisión permanente revisable, como pedía la Fiscalía y la acusación particular, que han reiterado que se le aplique este nuevo tipo de condena en los recursos que han planteado al TSJA.

En la audiencia de la semana pasada, la acusación particular y el Ministerio Público se opusieron a la libertad provisional “por el evidente riesgo de fuga al haber sido condenado a 39 años y carecer de arraigo”.

Francisco Morillo Suárez fue condenado por unos hechos en los que el propio tribunal destacó la “brutalidad” de lo ocurrido, y en la sentencia reflejaba que agredió sexualmente en dos ocasiones a la mujer, y en la segunda le provocó una hemorragia abundante que el ahora condenado pudo advertir y que finalmente le causó la muerte.

Sin embargo, en vez de llamar a un médico para que la atendieran, se limpió la sangre, la vistió y la trasladó a otro lugar cercano “dejándola abandonada a su suerte”, como dijo el tribunal en su sentencia y recuerda la Fiscalía.

En la sentencia, la Audiencia fijó el límite de cumplimiento de cárcel en 30 años, y también le condenó a pagar 100.000 euros a los padres de la víctima y 25.000 a la hermana.

En los hechos probados, la Audiencia explicó que la tarde del 23 de febrero de 2016, el condenado se fue al parque, lugar al que solía ir a espiar parejas y mantener encuentros sexuales, y encontró adormecida a Sara por las pastillas que había tomado.

La víctima era una periodista que “decidió, como en otras ocasiones anteriores, reclamar la atención de sus familiares y amigos”, por lo que se tomó las pastillas que seis días antes le recetó su psiquiatra, aunque en una cantidad que no era letal y simplemente la dejaron adormecida, circunstancia que aprovechó el condenado para violarla y matarla, según la sentencia.