Estrella Galicia, la gran familia del Mundial

El único equipo con presencia en las tres categorías ha presentado su proyecto para 2017. En Moto2 y Moto3 tienen opciones de título. En MotoGP sueñan con otro triunfo como el de Miller en Assen

La colaboración de Estrella Galicia con el mundo de las motos comenzó hace siete años con un modesto rótulo en el guardabarros en la moto de un chico llamado Marc Márquez, que corría en 125cc. Ahora, la versión sin alcohol de la cerveza gallega aparece en el nombre del equipo más numeroso del Mundial, que ha presentado esta mañana su proyecto para 2017. Nueve pilotos, presencia en todas las categorías y muchas opciones de título en las dos pequeñas. Más de 50 personas trabajando a tiempo completo y diez nacionalidades distintas, una apuesta única en el “paddock”, según cuenta Michael Bartholemy, el mánager general del equipo. “Fuimos los primeros en introducir este concepto de 14 pilotos de la base a la élite. Intentaron copiarnos, pero no es fácil. La estructura está funcionando muy bien, sabemos en qué dirección vamos. Fue una idea original de Ignacio, Marc y Emilio y somos los auténticos”.

El Team Estrella Galicia Marc VDS va desde los niños de la cantera Monlau a MotoGP, donde Jack Miller sueña con repetir la victoria del curso pasado y Tito Rabat suspira por olvidar el pasado y poder disfrutar definitivamente de las motos grandes.

En Moto2, el equipo de la cervecera gallega será sí o sí protagonista, con Álex Márquez y Franco Morbidelli. El hermano de Marc afronta su tercer año en la categoría intermedia convencido de que la experiencia le va a permitir reducir errores y estar peleando por el título a final de temporada. No oculta que éste es el objetivo y acepta le presión que se pone él mismo y la que lleva por ser el hermano de Marc.

En la categoría pequeña también estarán delante las motos azules del Estrella Galicia Marc VDS, con el fichaje estrella de Enea Bastianini, un gran talento y candidato a heredero de Rossi. "Me he sentido como en casa desde que llegué. Me han recibido muy bien", reconocía la única cara nueva en la escudería respecto al curso pasado.

Ignacio Ribera, CEO de Estrella Galicia y Marc van der Straten son la cabeza del proyecto, gracias a su pasión por las dos ruedas, que convierten en un patrocinio provechoso para ambas partes. El año pasado cumplieron el sueño de ser el primer equipo privado que ganaba una carrera de MotoGP en el último decenio. Lo hizo Miller bajo la lluvia de Assen. Repetirlo otra vez sería increíble. “Hicimos lo que otros no han conseguido en toda su vida”, cerraba Bartholemy, uno de los padres de la familia más numerosa del Mundial.