César Lumbreras

La factura

La Razón
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Los ministros de Agricultura de la UE celebran hoy su última reunión del año en Bruselas con la mirada puesta en Buenos Aires. En la capital argentina se encuentran la comisaria encargada de Comercio y el de Agricultura, con el fin de participar en conferencia ministerial de la OMC y, de forma paralela, para seguir muy de cerca las negociaciones bilaterales entre Mercosur y la Comisión Europea, encaminadas a alcanzar un acuerdo comercial de última generación. Durante los últimos meses se ha intensificado ese proceso negociador que cuenta con el apoyo firme y decidido de España. Hay coincidencia es que ahora es un momento adecuado para cerrar el pacto político y que los detalles técnicos se podrían rellenar más tarde. Si no hay avances, y no se cierra esta semana ese acuerdo de principio, habría que esperar bastante tiempo por el calendario político y electoral que se avecina, tanto en los países miembros de Mercosur como en otros de la UE. «Ahora o nunca», han llegado a decir algunos mandatarios de los dos bandos.

El capítulo agrario es el más complicado. Una parte del sector tendrá que pagar la factura de un hipotético acuerdo, como ya ha sucedido con los alcanzados con otros países terceros. Desde el punto de vista español preocupan el vacuno de carne, los cítricos y la remolacha-azúcar.

Los asuntos comerciales han sido una de las principales inquietudes de los ministros de Agricultura de la UE en los últimos años, por encima incluso de la reforma de la PAC. Precisamente éste es el otro asunto estrella que se abordará hoy en Bruselas, porque la Comisión, sin la presencia de Hogan, presentará su comunicación sobre el futuro de esta política. Si triunfan sus tesis, habrá otra vuelta de tuerca en el proceso de renacionalización de la misma, algo muy peligroso para su financiación.