Historia

Presentación

Estrellas rejuvenecedoras

La Razón
La RazónLa Razón

Pocos logotipos son tan clásicos, identificables y admirados como el de Mercedes-Benz. La trayectoria de la marca ha sido casi siempre impecable: cuando hace bastantes años se supo que su primer Clase A no pasaba la «prueba del alce», una maniobra extrema hecha en circuito para esquivar un animal en situaciones de emergencia, retrasó el lanzamiento hasta conseguir mejorarlo y que la superase sin problemas. Algo de lo que podían aprender seguramente otras marcas, y que dice mucho de la confianza que ha conseguido mantener.

El objetivo desde hace años es que la estrella resulte brillante y atractiva también para los conductores más jóvenes, pues la edad media de sus compradores supera ampliamente los 50 años. Precisamente la citada Clase A fue el modelo que empezó a permitirle llegar a generaciones de menos edad, por su precio y características. Pero la mayor batalla no estaba solo en los automóviles, sino en su comunicación, fundamental para conseguir ese rejuvenecimiento de imagen.

En su anterior campaña, el exitoso chef David Muñoz se enfadaba porque alguien le había robado la estrella de su Mercedes. Ahora es la actriz Maribel Verdú la que intenta por todos los medios quedarse con el coche como «recuerdo» del rodaje de la película que protagoniza. Tras la ruptura absoluta que suponía el chef, la actriz podría parecer una cierta vuelta hacia un público más convencional. Pero lo cierto es que ambos famosos son perfiles que no hace tanto resultarían muy extraños asociados a la marca, y hoy día empiezan a parecer normales. Lo que es señal de que la estrategia de la agencia Contrapunto BBDO puede estar funcionando, aunque el objetivo de rejuvenecer los consumidores debe plantearse a medio o largo plazo.

Curiosamente, y casi coincidiendo con esta campaña, el actor Imanol Arias, en su papel de Antonio Alcántara, rompía la estrella del coche de su enemigo en un reciente capítulo de la serie «Cuéntame». Es difícil saber si se trata de un «product placement» acordado y pagado por la marca, o un recurso creativo de los guionistas. Claro que esta referencia a la estrella se acerca bastante más a la imagen clásica, tradicional y lujosa de Mercedes, pero resulta gracioso cómo el suceso es parecido al que tanto enfadó a David Muñoz. Y un guiño evidente a que la estrella ha sido desde hace muchos años uno de los símbolos más icónicos del mundo del automóvil.