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Pedroche: «Me como a David»

David Muñoz y Cristina Pedroche en la Caja Mágica
David Muñoz y Cristina Pedroche en la Caja Mágicalarazon

Vive su amor con el chef con mucha intensidad. «Nos hemos construido nuestro propio mundo y somos la pareja perfecta».

No se guarda ningún as en la manga. Es como se la ve: transparente y franca, sin los resabios que algunos famosos se gastan a cuenta de la popularidad. Tanto, que está expandiendo su amor a David Muñoz, el tres estrellas Michelin, hasta el punto de que dan ganas de hacerle una OPA hostil por lo mucho y bien que habla de él desde que publicó en Twitter a mediados de enero que estaba enamorada. Si a eso se le suma que ha debutado con fortuna en el «prime time» de Antena 3 gracias a «Pekín Express» le sobran los motivos para estar exultante. «Ya sabía que molaba mucho el programa, pero pensaba que iba a ver alguna crítica porque en el ‘‘reality no soy la chica de los chistes. Al día busqué y rebusqué algunos que me diera caña, aunque sólo fuera simplemente por dármela y no encontré nada. ¡Lo flipé!», comenta. El día del estreno del programa, todo el equipo y Pedroche se fueron a verlo a un local de Argüelles, «pero no se oía nada y le dije a mi chico: ‘‘Vámonos y lo vemos en casita tranquilamente». Y es que, por venirle las cosas de cara, hasta tiene la suerte de que David Muñoz no trabaja los lunes. «Hay que precisar: trabaja, porque prácticamente no descansa nunca, pero ese día se cierra el restaurante». Así, no es difícil imaginárselos amartelados viendo la emisión, «estaba orgulloso y muy feliz por mí. Nos tenemos admiración mutua».

Durante estos días, Cristina Pedroche está no enfadada, pero sí sorprendida de que la prensa del corazón haya contado alguna que otra mentira sobre su vida. Simplemente no lo entiende, «porque soy una persona accesible y hablo sin problema de mi vida privada. Entiendo que puedan mentir con esos personajes que les dicen: ‘‘De este tema no hablo’’. En ese caso no me extraña que los periodistas se lo inventen, pero conmigo... A lo mejor me tengo que plantear tener otro tipo de relación con la Prensa, pero no me gustaría».

Todo esto viene a cuenta de dos noticias de esta semana. La primera: un artículo en el que hablaban de los amores de su vida. «No es verdad que haya estado con Juan Ramonet, pero como tenían una fotografía en la que le daba un beso... ¡Y era de un cortometraje que rodábamos! Con Miguel Torres y Dani Martínez sí que estuve saliendo, pero sin más. No es el amor que estoy viviendo ahora. Por primera vez estoy enamorada». Tampoco es cierto que tuviese una bronca monumental con Muñoz en plena calle. «Es que de verdad... Nosotros ya habíamos visto al paparazzi y sabíamos que nos estaba siguiendo. Fue uno de los días más felices que he disfrutado con David. Me cogía, nos dábmos besos... hasta me mordió y me hizo daño en un diente –explica– Pero justo vendió la imagen en la que David me estaba explicando no sé qué problema había tenido en el restaurante y, ¿qué quieres que te diga?, ¿me voy a reír cuando me está contando un problema? Normal que le estuviese escuchando con un rostro serio. Además es que David cuando algo no sale como él quiere en el restaurante se enfada mucho. Es muy autocrítico». La presentadora admite que sí, de tanto en tanto, discuten, algo que no ve nada práctico. «Estamos muy enamorados y discutir es absurdo. Ya se lo he dicho y él opina lo mismo. Si discutimos son dos horas en las que no le estoy besando y me lo estoy perdiendo. No puedo ser más clara. Es que me lo como a besos todo el día».

Pedroche no se cansa de repetir que le pide un día sí y otro también que se case con ella, «pero cuidado, él también me lo pide a mí y nos decimos que sí mutuamente». Entonces, ¿para cuándo la boda? «No lo sabemos y me parece absurdo esperar por esperar, ¿cuánto, un año, dos? No necesito más tiempo para saber que David es el amor de mi vida». ¿Las razones? «Todas. Me aporta confianza y estabilidad, es fiel y muy divertido. La única pega que le puedo poner es que trabaja 18 horas al día y es un tiempo en el que no puedo estar con él. Somos la pareja perfecta».

Él también la habrá echado de menos cuando ha estado al otro lado del mundo rodando la nueva entrega de «Pekín Express». Y las nuevas tecnologías allí valían de poco, «pero en cuanto tenía wifi, nos estábamos mensajeando».

Es consciente de las virtudes gastronómicas de su chico, como ella le llama, pero en casa, cocinar poquito. Con él, Pedroche se está haciendo una ruta gastronómica por Madrid y alrededores. «Yo no tenía ni idea de gastronomía y, hasta ahora, me han encantado todos los restaurantes a los que me ha llevado. Estoy aprendiendo mucho junto a él».

Para ella, lo más bonito de su relación es que provienen de órbitas distintas. «Venimos de mundos muy diferentes y lo que hemos hecho es construirnos uno propio. Él sabe que no soy ni tan pava como parezco en «Zapeando» ni la niña que se veía en «‘‘Sé lo que hicisteis... ‘‘Me conoce perfectamente».