Iglesia Católica

Adiós a un «visionario» del diálogo

El padre Héctor Guerra estrecha la mano al Papa Benedicto XVI
El padre Héctor Guerra estrecha la mano al Papa Benedicto XVIlarazon

El padre Héctor Guerra, que falleció ayer en Madrid, llevaba 46 años como legionario de Cristo. Fue director territorial de la Legión en España, donde promovió la Universidad Francisco de Vitoria.

«Les escribo con pena y alegría sobrenatural para avisarles de que el padre Héctor Guerra, L.C. acaba de fallecer. Hoy a las 14:40, víspera de la fiesta de la Virgen de Guadalupe, en el hospital Quirón de Madrid, el Señor lo llamó a los 62 años de edad y 46 años de legionario, tras una larga lucha contra un cáncer». Con estas palabras comunicaba el padre Eduardo Robles-Gil, director general de los Legionarios de Cristo, el fallecimiento del sacerdote mexicano, que ocupó la dirección territorial de la Legión en España y que iba a cumplir el próximo 3 de enero 35 años como sacerdote.

El propio Robles-Gil, poco después de enviar una nota a toda la congregación, abría el libro de condolencias virtual –alojado en la página web del Regnum Christi, movimiento al que pertenece la Legión– narrando su último encuentro con Guerra: «El día 20 de noviembre, a mi regreso de México, pude quedarme unas horas en Madrid y visitarle en el hospital. Lo vi físicamente muy decaído, pero espiritualmente muy fuerte. Él sabía perfectamente que le quedaban pocas semanas de vida. Estaba entero, lúcido, lleno de Dios. Pensaba que no llegaría a Navidad aquí en la tierra, pero tiene su Navidad anticipada en el cielo. Gracias, padre Guerra por su testimonio y fidelidad a Dios en la Legión».

Una fidelidad que fue denominador común de todas las tareas pastorales que le fueron encomendadas. Fue asistente en centros de formación, director territorial en España y Francia y trabajó en Roma, Jerusalén y Portugal. Los que le conocen, como el padre Manuel Salord, dicen que fue «un visionario en nuestra congregación», sobre todo, en el diálogo entre la fe y la cultura actual, lo que se conoce como Atrio de los Gentiles. «Vio la necesidad de salir al paso del hombre de hoy, del hombre de buena voluntad, y de entrar en diálogo con él», reconoce Salord. De hecho, organizó una jornada de debate sobre libertad religiosa –TEDx Via della Conciliazione– en la que participaron personas de todas las disciplinas, entre ellas, la cantante Gloria Stefan; el jugador de baloncesto, Vlade Divac; o el presidente del Pontificio Consejo para la Cultura, Gianfranco Ravasi. Se celebró el 19 de abril de 2013 y fue un gran éxito.

También destacó por su trabajo sobre la Sábana Santa, de la que realizó dos exhibiciones permanentes llamadas «¿Quién es el hombre de la Sábana Santa?» en Jerusalén y Roma, y que llegaron a estar presentes en otros ocho países. Sostenía que esta reliquia tiene mucho que aportar a la fe de hoy y puede ser un gran instrumento para la nueva evangelización. Así lo manifestaba en uno de sus escritos: «Podemos decir que no usar la Sábana Santa o no darla a conocer sería una omisión importante en el esfuerzo y tarea de la nueva evangelización. Conecta directamente con el kerigma, que es el núcleo central del evangelio. La Sábana Santa permite incorporar un nuevo método en la evangelización, implicando a las ciencias. Presentación especialmente atractiva para el hombre de hoy. Así, la Sábana Santa se convierte en un signo de credibilidad que facilita y promueve el camino para el encuentro con Dios».

En nuestro país, antes de convertirse en director territorial en los años 90, cuando impulsó la creación de la Universidad Francisco de Vitoria, el padre Guerra había sido, una década antes, formador del seminario que la Legión de Cristo tiene en Salamanca. Hoy, su recuerdo es sinónimo de agradecimiento. «Tengo una deuda de gratitud con el padre Guerra, a quien tuve como formador en los años 80 en Salamanca. Y, luego, como director territorial. Su consejo, sus palabras y, sobre todo, su ejemplo siempre me marcaron», afirma José Ignacio. Y es que los que tuvieron la suerte de coincidir con él afirman que destacaba por cómo invitaba a hacer experiencia de Cristo e insistía sobre la oración.

Amante de la música y de la tecnología, el padre Guerra deja una amplia producción literaria, realizada en colaboración con el también legionario Juan Pablo Ledesma. En total son siete libros editados por Planeta Testimonio.

La capilla ardiente estará abierta hoy desde las 9 a las 12:30 horas en la dirección territorial de la Legión. La misa funeral será a las 13 horas en la Parroquia San Josemaría Escrivá de Aravaca y el entierro, a las 16 horas en el cementerio de la Almudena.