Iglesia Católica

El Papa denuncia el «silencio cómplice» ante la persecución de cristianos

El Papa ha concelebrado una misa en la plaza de San Pedro con los cinco nuevos cardenales, entre ellos, el arzobispo de Barcelona, Juan José Omella.

El Papa, durante la misa.
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El Papa ha concelebrado una misa en la plaza de San Pedro con los cinco nuevos cardenales, entre ellos, el arzobispo de Barcelona, Juan José Omella.

El Papa denuncia el "silencio cómplice"ante la persecución de cristianos en el mundo durante la misa que ha concelebrado en la plaza de San Pedro con los cinco nuevos cardenales, entre ellos, el arzobispo de Barcelona, Juan José Omella, con motivo de la solemnidad de San Pedro y San Pablo.

"Incluso hoy en día, en varias partes del mundo, a veces en un clima de silencio -un silencio con frecuencia cómplice-, muchos cristianos son marginados, calumniados, discriminados, víctimas de una violencia incluso mortal, a menudo sin que los que podrían hacer que se respetaran sus sacrosantos derechos hagan nada para impedirlo", ha denunciado el Pontífice.

Durante la solemne ceremonia, el Pontífice ha bendecido los palios destinados a los Arzobispos metropolitanos nombrados a lo largo del año y que les serán impuestos en sus respectivas diócesis.

Francisco ha centrado parte de la homilía en la persecución de cristianos al poner de ejemplo a los apóstoles Pedro y Pablo de los que ha dicho que "derramaron su sangre por Cristo"y ha agregado que son la prueba de que desde los comienzos "toda la comunidad fue perseguida". En este sentido, ha especificado que el cristiano está llamado a "soportar el mal", que significa "no sólo tener paciencia y continuar con resignación", sino que "soportar es imitar a Jesús: es cargar el peso, cargarlo sobre los hombros por él y por los demás".

Para el Papa, ser cristiano es "aceptar la cruz, avanzando con confianza"con la certeza de la compañía del "Señor crucificado y resucitado".

Asimismo, ha arremetido contra lo que ha llamado "cristianos de salón"porque "comentan cómo van las cosas en la Iglesia y en el mundo"en vez de ser "apóstoles en camino, que confiesan a Jesús con la vida porque lo llevan en el corazón".

Ante miles de fieles en la Plaza de San Pedro, ha explicado que "quien confiesa a Jesús sabe que no ha de dar sólo opiniones, sino la vida; sabe que no puede creer con tibieza, sino que está llamado a 'arder' por amor; sabe que en la vida no puede conformarse con 'vivir al día' o acomodarse en el bienestar, sino que tiene que correr el riesgo de ir mar adentro, renovando cada día el don de sí mismo".

Por otro lado, ha reivindicado la oración como "el agua indispensable que alimenta la esperanza y hace crecer la confianza". "La oración nos hace sentir amados y nos permite amar. Nos hace ir adelante en los momentos más oscuros, porque enciende la luz de Dios. En la Iglesia, la oración es la que nos sostiene a todos y nos ayuda

a superar las pruebas", ha concluido.