El Papa: «Los muros para frenar la migración siempre caen»

En el vuelo de regreso a Roma, el Papa mostró su lado más personal al confesar que «tiene miedo» de su debilidad y que no se siente una estrella

Como siempre hace, y a pesar del largo y cansado viaje que le llevó a Cuba y Estados Unidos, el Papa Francisco se puso a disposición de los periodistas que viajaban con él en el avión de vuelta a Roma para que le preguntasen. No evitó cuestión alguna; incluso se atrevió a hablar de cómo se siente al ser recibido como una estrella, si se siente poderoso o qué piensa en el trayecto de vuelta a Roma tras un viaje. De los demás temas, cabe destacar dos frases: una sobre la crisis de refugiados –«los muros antes o después caen»– y otra sobre la reformas en materia familiar –«no hay divorcio católico. El matrimonio es indisoluble cuando es sacramento»–.

Los muros no son la solución; los puentes, sí

Francisco volvió a referirse a la crisis de refugiados que vive Europa y a la respuesta, con la construcción de alambradas, que se está dando a este drama por parte de algunos países. «Todos los muros caen, hoy o dentro de cien años, pero caen. No es la solución. El muro no es una solución. En cambio, los puentes, sí», explicó.

A pocos días del Sínodo: ¿hay «divorcio católico»?

El Pontífice fue muy claro en su respuesta. «En la reforma de los procesos he cerrado la puerta a la vía administrativa, que era la vía por la cual podía entrar el divorcio», dijo. A renglón seguido, añadió que quien piense que se ha legalizado el «divorcio católico» «se equivoca». Según Bergoglio, la última reforma que llevó a cabo y que acelera los procesos de nulidad matrimonial «no es una cosa esencial». «Este Motu Proprio facilita los procesos, pero no es un divorcio, porque el matrimonio es indisoluble cuando es sacramento, y esto la Iglesia no lo puede cambiar», apuntó.

«La tribulación» de los abusos sexuales

Horas después de reunirse con víctimas, Francisco volvió a referirse a los casos de abusos por parte de sacerdotes. Entre otras cosas, dijo que entiende que algunas víctimas hayan perdido la fe y que los clérigos que no piden perdón no los recibe de Dios. El Papa llegó a calificar de «sacrilegio» estos abusos y condenó que miembros de la Iglesia, también obispos, «los hayan tapado».

Siempre a favor de la objeción de conciencia

Al ser preguntado por el caso de una funcionaria estadounidense que fue condenada por negarse a cumplir la legislación en materia de matrimonio homosexual, subrayó que la objeción de conciencia es «un derecho humano», que si no se permite «se está negando». «En cada estructura judicial debe entrar la objeción», añadió.

Sobre el poder, el estrellato y la debilidad

Durante la entrevista se pudo ver al Francisco más personal, haciendo alguna confidencia. «No sé si he tenido éxito o no, pero yo tengo miedo de mí mismo, porque me siento siempre débil. Es importante si tú, con poder, puedes hacer el bien. Para Jesús el veradero poder es el servicio», dijo en primer lugar. Sobre si es o no una estrella, apuntó lo siguiente: «Las estrellas son bonitas para verlas, pero el Papa debe ser el siervo de los siervos de Dios. Las estrellas se apagan y caen».

La tumba de fray junípero, atacada

La tumba de Fray Junípero, canonizado la semana pasada por el Papa en Washington, fue atacada ayer en el cementerio de la Misión de Carmel (California). Los vigilantes de seguridad encontraron el pasado domingo pintadas en la tumba del primer santo hispano de EE UU. «Santo de genocidio», se podía leer en una de ellas. Cabe recordar que algunos sectores del país consideran que el nuevo santo convirtió a la fuerza a miles de indios. En cambio, el Papa, durante la canonización, defendió que hizo frente a los abusos que sufrieron.