Casados a primera vista: los roces de la convivencia

Las parejas de ‘Casados a primera vista’ se enfrentan a la prueba más dura hasta ahora: la convivencia. Eso sí, una de las parejas no llega ni siquiera a esa etapa. Laura y Mariano deciden seguir adelante con los papeles del divorcio. No hay vuelta atrás.

El maestro de Albacete, Salva, ha cogido sus cosas y se ha instalado en la casa de Gloria. Su madre le ha preparado unos tuppers y una buena pata de jamón. Salva ya ha colocado su ropa, su oso de peluche y todas sus cosas. Parece que la pareja está contenta, aunque de momento duermen en habitaciones separadas. Gloria no soporta los ronquidos.

Laurent, el belga ha decidido irse a vivir a Chiclana con Toñi pero parece que la convivencia no empieza con muy buen pie. Laurent dice que se muere de frío pero por su parte Toñi cree que no necesita calefacción porque su casa tiene mucha luz, ha tenido que poner el aire por él pero aún así el tema no se soluciona. Parece que Laurent se lleva mejor con su suegra. Desde luego, Toñi no pone de su parte, todo lo cuestiona y le parece mal. ¿Hasta cuándo aguantará Laurent?

Entre Enrique y Verónica parece que la cosa funciona. Viven en Madrid, hacen planes juntos, pero Verónica tiene dos peros: los nervios de Enrique y el tabaco. Para intentar remediar lo segundo ha asistido a una sesión de hipnosis. Primera crisis: de querer dejar de fumar, Enrique pasa a “voy a intentarlo”.