Policía

Detenido en Brasil un segundo sospechoso por los asesinatos de Pioz

Según la Policía, Gouveia, de 20 años, le envió a su amigo fotografías que se tomó al lado de los cadáveres descuartizados de sus víctimas

Marvin Henriques Correia, sospechoso de haber colaborado con Patrick Nogueira Gouveia en el asesinato Pioz, en la rueda de prensa de su detención. En la imagen pequeña, una foto suya.
Marvin Henriques Correia, sospechoso de haber colaborado con Patrick Nogueira Gouveia en el asesinato Pioz, en la rueda de prensa de su detención. En la imagen pequeña, una foto suya.larazon

La Policía brasileña informó hoy que ha detenido a un sospechoso de haber colaborado con el brasileño Patrick Nogueira Gouveia en el asesinato de cuatro miembros de su familia en España.

La Policía brasileña informó hoy que ha detenido a un sospechoso de haber colaborado con el brasileño Patrick Nogueira Gouveia en el asesinato de cuatro miembros de su familia en España.

El arrestado es un amigo de Gouveia, asesino confeso del crimen, y que, según la policía, le dio consejos "en tiempo real"para cometer el asesinato y para esconder los cadáveres.

"Durante la ejecución del crimen, Patrick conversaba por WhatsApp en tiempo real con el sospechoso arrestado en Paraíba. Patrick preguntaba como actuar, como podía ocultar los cuerpos, qué hacer", afirmó el comisario Reinaldo Nóbrega en una rueda de prensa, según recogieron medios locales.

La Policía no informó de la identidad del nuevo sospechoso, que fue detenido hoy en João Pessoa, capital de Paraíba (noreste) y fue presentado a la prensa de espaldas.

Según la Policía, Gouveia, de 20 años, le envió a su amigo fotografías que se tomó al lado de los cadáveres descuartizados de sus víctimas.

El arrestado afirmó a la Policía que no pensaba haber cometido ningún crimen por ayudar a su amigo.

El asesinato de Marcos Nogueira, Janaína Américo y sus dos hijos, de uno y cuatro años de edad, ocurrió el 17 de agosto pasado en una casa de la localidad de Pioz, a unos 60 kilómetros de Madrid.

Semanas después, la Guardia Civil española localizó los cadáveres descuartizados y repartidos en bolsas de basura que habían sido abandonadas en el lugar del crimen.

Gouveia, sobrino de Nogueira, regresó a España para entregarse a las autoridades españolas y confesó haber cometido el crimen cuádruple.