Investigación científica

Guerra abierta entre el CNIO y su ex investigador Hidalgo

LA RAZÓN accede a una de las cartas del científico despedido en las que proponía un acuerdo para continuar. El centro niega que fuera así.

Manuel Hidalgo, en su época como director del Programa de Investigación Clínica del CNIO
Manuel Hidalgo, en su época como director del Programa de Investigación Clínica del CNIOlarazon

LA RAZÓN accede a una de las cartas del científico despedido en las que proponía un acuerdo para continuar. El centro niega que fuera así.

Guerra abierta entre el Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO) y el que era su investigador, Manuel Hidalgo, su ex director del Programa de Investigación Clínica del CNIO y jefe de la Unidad de Investigación Clínica de Tumores Digestivos. Hidalgo ha sido recientemente despedido por incompatibilidad con su cargo, debido a que hace un año ocupó el puesto de director del Leon V & Marilyn L. Rosenberg Clinical Cancer Center del Beth Israel Deaconess Medical Center, en Boston. El CNIO aseguró ayer que su intención era ayudar al científico «en todo momento» para que se quedara, pero Hidalgo no quiso llegar a «ningún acuerdo» con ellos. Como recordó ayer este centro, la Oficina de Conflicto de Intereses (OCI) del Ministerio de Hacienda estipuló que los dos cargos era incompatibles: el contrato del científico con EE UU era del 100%, mientras que el del CNIO era del 50%, informa Ep. Una de las soluciones planteadas por esta institución y ofrecidas a Hidalgo es que el científico dejara la dirección del Programa de Investigación Clínica y centrarse en la Unidad de Tumores Digestivos.

Hidalgo niega que no quisiera llegar a un acuerdo con la institución y, de hecho, afirma que les propuso esa misma solución. Fue en dos cartas enviadas al CNIO, una en julio y otra en octubre. La última de ellas, a la que ha tenido acceso LA RAZÓN, estaba dirigida al gerente de la institución, Juan Arroyo, y a la directora, María Blasco. «Dado mi compromiso con la institución, los miembros de mi grupo y, especialmente, los pacientes, es mi intención mantener mi puesto a tiempo parcial en CNIO», explica en la misiva, de nueve folios y fechada el 19 de octubre. Hidalgo pide que «consideren una reducción de jornada a 15 horas semanales dejando la Dirección del Programa para ser sustituido por un investigador cualificado con dedicación completa». Del mismo modo, afirma que «no tiene inconveniente en discutir el hecho de convertir mi grupo en una unidad asociada», en este caso, trasladar la Unidad de Tumores Gástricos al Hospital de Fuenlabrada. Hidalgo asegura que no obtuvo respuesta alguna.

En respuesta, el CNIO afirma que estas «renuncias» nunca se presentaron de manera «formal desde que la OCI dictó que ambos proyectos eran incompatibles». Además, señalan que «las prolongadas ausencias del Dr. Manuel Hidalgo han comprometido seriamente sus obligaciones para con el CNIO». De hecho, señala que «no ha asistido presencialmente a ninguna reunión de Directores de Programa del CNIO en este 2016, con el menoscabo que esto conlleva para el funcionamiento del centro y del Programa de Investigación Clínica». Así, «en un mes, trabajaba cuatro días», señalan fuentes del centro.

El Centro asegura asimismo que «las acusaciones de acoso y amenazas» realizadas por Hidalgo son «difamatorias y están perjudicando de manera injustificada la imagen de uno de los mejores centros de investigación de este país».