África

Almería

Intervenidas cerca de 20 toneladas de hachís en un buque con destino a Libia

El instituto armado se consolida como el cuerpo policial que más hachís incauta en el mundo

Intervenidas cerca de 20 toneladas de hachís en un buque con destino a Libia
Intervenidas cerca de 20 toneladas de hachís en un buque con destino a Libialarazon

La intervención se enmarca dentro de una compleja operación iniciada en 2013, en la que se ha detenido a 109 personas e intervenido 5 buques con cerca de 100.000 kilogramos de hachís.

La Guardia Civil, en el marco de la "operación Urca", ha procedido al abordaje, por parte de Unidades Especiales de Intervención, de un buque de bandera panameña que llevaba camuflados en dobles fondos, entre carga de madera, 19.600 kilos de hachís, lo que la convierte en una de las mayores aprehensiones de este tipo de sustancias estupefacientes. Igualmente, en la operación los agentes incautaron abundante documentación y material informático que está siendo analizado.

La operación se inicio el pasado 22 de septiembre, cuando la Guardia Civil y el Servicio de Aduanas francés tuvieron conocimiento de que el buque Marti N, con bandera panameña y que se encontraba navegando por el Mediterráneo con rumbo a Libia, podría portar una gran cantidad de estupefacientes.

Sobre este buque ya se mantenía abierta una investigación por parte del Equipo Contra el Crimen Organizado (ECO-Alicante) de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil, por su supuesta implicación en el transporte internacional de estupefacientes, Equipo que requiere la colaboración del Centro de Coordinación de Vigilancia Marítima de la Guardia Civil, encargado del control de embarcaciones por el Mediterráneo, así como de la Unidad Especial de Intervención (U.E.I) del mismo Cuerpo, especialistas en el asalto de embarcaciones y en otras operaciones de alto riesgo. Con el apoyo de Europol y de un avión del Servicio Aéreo de la Guardia de Finanza italiana, en la madrugada del 23 de septiembre fue localizado e interceptado en la zona del Estrecho, procediendo al abordaje del buque, ocupado en ese momento por 12 tripulantes (11 ucranianos y 1 de Uzbekistan).

Tras la inspección del interior del barco se localizaron en unos dobles fondos, ocultos junto a la carga legal de madera que transportaba, unas grandes bolsas que contenían fardos de resina de hachís por lo que se procedió a trasladar el buque al puerto de Almería donde, en presencia de la comisión judicial, se realizó la descarga de la madera y el registro exhaustivo del barco, hallándose en su interior 19.600 kilos de hachís, deteniendo a la tripulación, que ingreso en prisión por orden de la Autoridad Judicial.

Ruta marítima

El buque Marti N, al igual que otros intervenidos con estupefacientes en el mediterráneo, se hallaba incurso en una operación policial internacional que bajo la coordinación de Europol, desarrolla conjuntamente la Guardia Civil, Servicio de Aduanas y Policía Nacional de Francia, Guardia de Finanza y Dirección Central para los Servicios Antidroga de Italia, Servicio de Guardacostas de Grecia y la DEA de EEUU, operación que, durante diversas fases, ha permitido la detención de 109 personas de diversas nacionalidades y la intervención de cinco buques de gran calado que transportaban 97.840 kilos de hachís y de otros dos buques intervenidos en Grecia, uno de bandera boliviana, que transportaba 5.000 armas largas y 500.000 cartuchos de munición 9 mm parabellum, y otro de bandera de Togo con 6.400 armas largas, 570.000 cartuchos y 10 toneladas de nitrato amónico, cuyo destino final era la ciudad Libia de Misrata, bastión del califato islámico.

Se da la circunstancia que el buque de bandera boliviana intervenido con las armas y municiones en Grecia, había estado atracado en el Puerto de Málaga desde 2010, tras ser abandonado por su anterior propietario, siendo adquirido en subasta pública en el año 2014 por un empresario sirio-libanes.

Ruta terrestre

Durante la investigación, se ha detectado que esta gran organización también utilizaba la vía terrestre para el transporte de hachís, el cual se realizaba a través del Sahel (Marruecos). El transporte, realizado en camiones, partía de ese país, atravesando Mauritania, Mali y Nigeria, introduciéndose en Libia, desde donde se llevaba a cabo la distribución del estupefaciente, que en ocasiones tenía como destino Egipto.

Esta vía terrestre también ha sido desmantelada como consecuencia de la estrecha colaboración de la Guardia Civil con la Gendarmería Real Marroquí, posibilitando diversas intervenciones en ese país, así como la detención de uno de los principales miembros de la organización criminal que se encontraba asentado en España.

Fruto de la colaboración e información entre la Guardia Civil y la Gendarmería Real Marroquí, en septiembre de 2015 se intervinieron en un camión que se dirigía a Mauritania desde Marruecos, 9.880 kilogramos de hachís que iban camuflados entre rodillos de plástico destinados a la agricultura.

Seguidamente, y como continuación de la actuación anterior, en otros dos operativos en el mismo País, se incautaron otros 5.160 kilogramos de hachís ocultos entre bloques de mármol cargados sobre un camión y 8.500 kilogramos de la misma sustancia oculta entre pulpo congelado que trasladaba un camión frigorífico.

Igualmente en España, en una variante de dicha ruta terrestre, fueron intervenidos, en los meses de marzo y abril de 2016, dos camiones que transportaban 462 y 490 kilogramos respectivamente. Como consecuencia de las aprehensiones llevadas a cabo en Marruecos y España, se detuvieron a 26 personas y se efectuaron 5 registros, interviniéndose gran cantidad de información relacionada con la red investigada.

Culminando la operación de la parte terrestre de la organización, agentes del Equipo Contra el Crimen Organizado (ECO-Alicante) de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil, en junio de 2016 detuvieron a un marroquí residente en Málaga, uno de los principales responsables del traslado de hachís a través de la vía terrestre.

Tres años de trabajo

Las investigaciones de esta compleja operación se iniciaron en los primeros meses del año 2013, tras detectar la Guardia Civil un considerable aumento del número de incautaciones de embarcaciones (pesqueros, buques mercantes, etc.) transportando por el Mediterráneo grandes cantidades de hachís. Tras un minucioso análisis criminal realizado por agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil y el Departamento de Análisis Criminal de la Unidad Técnica de Policía Judicial del mismo Cuerpo, ambas Unidades encargadas de la lucha contra el crimen organizado, la información obtenida fue contrastada con Organismos y Cuerpos de Seguridad de otros países, determinándose la existencia de una nueva ruta de la droga por el Mediterráneo Oriental perfectamente organizada y que podría estar siendo empleada por grupos criminales para financiar la insurgencia de algunos de los conflictos existentes en el norte de África y Oriente medio (Siria, Libia, Egipto, etc.).

La perfecta coordinación de los diferentes servicios de investigación de los países implicados, así como la elaborada información aportada por el Centro de Coordinación de Vigilancia Marítima de la Guardia Civil, permitió identificar durante estos últimos años las embarcaciones sospechosas de transportar estupefacientes u otro material ilícito.

La aprehensión de estas cantidades de hachís, así como de las armas, ha supuesto un duro golpe para estas organizaciones que podrían estar detrás de la financiación de grupos de la insurgencia islamista radical.

Los datos obtenidos en el marco de esta importante operación, junto con las estadísticas de aprehensiones efectuadas en los últimos años, avalan la tesis de que la Guardia Civil es el Cuerpo policial que más hachís incauta a nivel mundial, convirtiendo a España en un país de referencia en el ámbito internacional en la lucha contra el tráfico de este tipo de sustancias estupefacientes.

Los datos de aprehensiones de hachís en España en el mismo periodo (2011-2014), según la estadística anual sobre drogas elaborada por Centro de Inteligencia Contra el Terrorismo y el Crimen Organizado, dependiente de la Secretaría de Estado de Seguridad, sitúan a la Guardia Civil como el Cuerpo policial que más hachís incauta, habiendo intervenido en el citado periodo el 60,53 % del total, duplicando, e incluso triplicando, las incautaciones anuales con respecto al siguiente cuerpo policial.